Redacción
El Hospital Universitario Gregorio Marañón (Madrid) ha puesto en marcha un nuevo tratamiento denominado electroporación en España para tratar la fibrilación articular persistente. Cuatro pacientes (dos hombres y dos mujeres) han sido tratados con éxito, informa la Comunidad de Madrid. Este procedimiento, que permite una mayor precisión, se basa en la ablación de células con catéter a través de pulsos de corriente de alto voltaje y corta duración.
Esta nueva tecnología permite eliminar los circuitos cardiacos responsables de la fibrilación articular de una forma más precisa y reduciendo posibles complicaciones, ya que no afectará a los tejidos o estructuras sanas adyacentes (como el esófago o los nervios frénicos). A su vez, ofrece una mayor versatilidad a la hora de personalizar el tratamiento del paciente dependiendo de sus necesidades, ya que se pueden utilizar diferentes fuentes de energía y capacidades de mapeo.
“Es una tecnología que se puede aplicar a todo el mundo”, afirma el Dr. Ángel Arenal, cardiólogo del Gregorio Marañón. Con la electroporación se reducirán los tiempos de procedimiento y las repeticiones de estudio: “Va a permitir que los pacientes estén muy poco tiempo en el hospital” añade.
Esta nueva tecnología permite eliminar los circuitos cardiacos responsables de la fibrilación articular de una forma más precisa y reduciendo posibles complicaciones, ya que no afectará a los tejidos o estructuras sanas adyacentes
El Servicio de Cardiología de este hospital, que cuenta con uno de los índices de mayor actividad asistencial en España, efectuará este durante el 2024 cerca de 300 ablaciones con pulsos eléctricos para tratar esta patología. El Gregorio Marañón fue también pionero en utilizar diferentes sistemas de navegación en el tratamiento de arritmias complejas. Sus profesionales realizan más de 600 ablaciones de arritmias al año. De ellas, casi el 50% corresponden a diferentes tipos de fibrilación auricular.
La fibrilación articular es la arritmia más prevalente en nuestro país y afecta a más de 60 millones de personas en todo el mundo. Se define como una afección en la que el corazón late de forma irregular y rápida causando palpitaciones, fatiga y dificultad para respirar. Dicha patología implica una peor calidad de vida y una mayor mortalidad para los afectados.
