Redacción
El Hospital Sant Joan de Déu Barcelona y el Hospital Clínic Barcelona han creado un centro de cardiopatías congénitas que aplica por primera vez en España la cirugía cardiaca robótica en niños y jóvenes. El nuevo centro ofrecerá una atención conjunta y, durante todas las etapas de la vida, a los niños que nacen con una malformación en el corazón. Para ello, dispone de un equipo multidisciplinar formado por 23 profesionales, incluyendo a cirujanos cardiovasculares, cardiólogos, pediatras y anestesiólogos.
El centro es el primero en España en aplicar esta técnica a pacientes pediátricos con cardiopatías congénitas, que antes eran intervenidos mediante cirugía abierta
Hasta ahora, los pacientes pediátricos con cardiopatías congénitas que debían pasar por quirófano eran intervenidos mediante cirugía abierta. Esto alargaba el período postoperatorio y la recuperación del paciente, además de causar un mayor perjuicio estético. El nuevo centro de cardiopatías congénitas ya ha llevado a cabo cinco intervenciones de este tipo en niños. En tres casos, los profesionales han optado por una cirugía toracoscópica, que consiste en realizar unas pequeñas incisiones en el tórax del niño para introducir un dispositivo con una cámara de vídeo, que les permita ver la zona quirúrgica, y los utensilios necesarios para llevar la intervención. La primera niña operada mediante esta técnica presentaba un tumor en el corazón que había que resecar. La paciente de menor edad así operada hasta ahora en el centro ha sido una paciente de seis años.
En otros dos casos, los profesionales han optado por la cirugía cardíaca robótica. La primera paciente pediátrica intervenida con la ayuda de un robot ha sido una chica de 13 años y vecina del País Vasco que presentaba una comunicación interauricular congénita del tipo ostium primum (tenía las dos aurículas conectadas) y un defecto en la válvula mitral. Estas malformaciones le provocaban una circulación anómala de la sangre en el corazón y un desequilibrio que sobrecargaba la banda derecha del corazón y, a largo plazo, le causaba insuficiencia cardiaca.
El nuevo centro de cardiopatías congénitas ya ha llevado a cabo cinco intervenciones de este tipo en niños
En el caso de esta paciente, además, la patología se veía agravada por una escoliosis muy acentuada que dificultaba el acceso al corazón. Por este motivo, los cirujanos cardiacos optaron por utilizar un robot quirúrgico que, a través de cuatro pequeñas incisiones en el tórax de la paciente (de ocho milímetros de diámetro cada una), les permitió introducir una cámara en el corazón para ver la zona quirúrgica y los utensilios necesarios para realizar la intervención. De este modo, un equipo médico del Centro de Cardiopatías Congénitas logró cerrar, por un lado, la conexión entre las dos aurículas y, por otro, reparar la válvula mitral dañada. La intervención, que tuvo lugar en noviembre, duró cuatro horas e intervinieron una decena de profesionales.
El segundo paciente intervenido mediante cirugía cardíaca robótica es un joven de 15 años que hace meses fue tratado de una comunicación interauricular mediante cateterismo y presentado una infección del dispositivo de cierre (endocarditis). Por su parte, el director del centro, Daniel Pereda, explica que, en el caso de los niños, la cirugía robótica está limitada al tamaño y la edad de los pacientes porque los utensilios quirúrgicos se han ideado y diseñado a medida de los adultos. Por eso, ahora los cirujanos se plantean esta opción solo en los niños mayores y adolescentes.
Los principales pacientes candidatos a someterse a una intervención de este tipo son los que sufren las siguientes patologías: comunicaciones interauriculares (siempre que no puedan resolverse con un cateterismo), problemas en las válvulas mitral o tricúspide o tumores cardíacos. La previsión es operar mediante cirugía robótica mínimamente invasiva a una docena de pacientes cada año y empezar con una actividad anual de 20 cirugías toracoscópicas.
Los principales pacientes candidatos a someterse a una intervención de este tipo son aquellos que sufren comunicaciones interauriculares, problemas en las válvulas mitral o tricúspide o tumores cardíacos
Centro especializado, integrado y con visión transversal
En concreto, en Cataluña cada año nacen 600 niños con una cardiopatía congénita y en el 30% de los casos son graves. Los avances producidos en las últimas décadas han permitido que un 95% de los niños lleguen a la edad adulta, pero presentan necesidades muy específicas.
El objetivo del nuevo centro, que tendrá dos sedes, una en el Hospital Sant Joan de Déu Barcelona y otra en el Hospital Clínic Barcelona, es que el propio equipo de profesionales atienda y trate a estos pacientes a lo largo de toda la vida. El éxito en el manejo del paciente con enfermedad cardiovascular se basa en la asistencia multidisciplinar de alta calidad y en una estrategia de seguimiento a largo plazo que asegure su continuidad durante la vida adulta.