Victoria Guillén
Los casos de infecciones de transmisión sexual (ITS) en España están experimentando un crecimiento exponencial en los últimos años. En concreto, nuestro país registro en 2022 la tasa más alta de infección gonocócica y clamidiasis desde que se tienen registros. Sin embargo, solo el 5% de las mujeres se someten a pruebas de diagnóstico de enfermedades de transmisión sexual (ETS), según muestra el Índice Global de la Salud de la Mujer de Hologic. Se trata de un porcentaje muy por debajo de las media de la Unión Europea que es de un 8% y la global, un 10%.
“Las ITS representan un importante problema de salud pública”, alertó Emilio Hernández, responsable de Acceso al Mercado de Hologic Iberia. “Según el Índice Global de la Salud de la Mujer, el porcentaje de mujeres que acceden a este tipo de pruebas en España es inferior a la medía europea y mundial, lo que dificulta la detección precoz”, añadió.
En este sentido, la presidenta de la Junta Directiva del Grupo de Estudio de ITS (GeITS) de la sociedad Española de Enfermedades Infecciones y microbiología Clínica (Seimc), la Dra. Mar Vera García, señaló la importancia de que los profesionales sanitarios realizaran una anamnesis sexual y una exploración física; así como pruebas complementarias a los pacientes. “El alarmante aumento de casos de infecciones de transmisión sexual en España pone de manifiesto la urgencia de un abordaje multidisciplinar. Las ITS suelen ser asintomáticas, y es importante aumentar las pruebas de detección periódicas para un diagnóstico temprano y un tratamiento oportuno”, indicó la Dra. Vera
El Índice Global concluye que es necesario trabajar más para mejorar la salud de las mujeres en nuestro país
En concreto, este porcentaje se refiere al número de mujeres que se sometió a pruebas de infecciones de transmisión sexual o ETS en los 12 meses anteriores a la realización de la encuesta, que en su tercer año incluyó a más de 147.000 participantes de 143 países y cuyos datos se recogieron en 2022. Por ello, el índice señala que a pesar de la recuperación mundial del Covid-19, todavía es necesario trabajar más para mejorar la salud de las mujeres en España.
En cuanto a atención preventiva, el índice muestra un amplio margen de mejora, ya que España, con una puntuación de 17, se sitúa por debajo de la puntuación media de las regiones de la UE, que es de 25. La principal razón son las bajas tasas de pruebas relacionadas con enfermedades mortales.
Respecto a la percepción de su estado de salud, con una puntuación de 58 sobre 100 puntos en total, las mujeres españolas se sitúan por encima de la puntuación media del G20, que es de 56, y de la media mundial, que suma 54 puntos, pero no alcanza la puntuación media de los países de la Unión Europea, que es de 61.
Asimismo, la satisfacción con la calidad de la asistencia sanitaria ha disminuido desde 2020 en España, donde el 65% de las encuestadas se mostraron satisfechas con la disponibilidad de una asistencia sanitaria de calidad, frente a una media mundial y en toda la UE del 68%.
La satisfacción con la calidad de la asistencia sanitaria ha disminuido desde 2020 en España
En cuanto a la salud individual, un 23%l de las encuestadas ha admitido haber experimentado problemas que les impidieron hacer lo que otras personas de su edad pueden hacer. Esta cifra se compara con la media de la región de la UE, que es de 25%, y con la media mundial de 24%.
Además, las mujeres encuestadas que afirmaron haber pasado gran parte del día anterior con dolor alcanzaron 28%, un porcentaje equivalente a alrededor de 6 millones de mujeres en España. Finalmente, más de una de cada cinco mujeres (23%) reportó haber sentido emociones negativas en el día anterior. La tasa de emociones más negativas es más alta que la experimentada a nivel mundial y en toda la UE.
