Anuario iSanidad 2023
Juan Pablo Núñez, CEO de Uniteco
En el universo de las unidades de cuidados intensivos pediátricos, donde la fragilidad se entrelaza con la fortaleza y el dolor se encuentra con la esperanza, surge la imperante necesidad de teñir de humanidad cada rincón. Como si de un “sueño de la razón” se tratara, en palabras del ilustre Rousseau, la infancia se convierte en el epicentro de nuestro compromiso, el faro que guía nuestra labor en Uniteco. En este viaje, como también nos iluminó Paulo Coelho, “un niño siempre puede enseñar tres cosas a un adulto: a ponerse contento sin motivo, a estar siempre ocupado con algo y a saber exigir con todas sus fuerzas aquello que desea”.
Desde Uniteco, nos embarcamos en una travesía marcada por la poesía de la humanización en las UCI pediátricas, llevando con nosotros un proyecto que se erige como testamento de nuestro compromiso con la niñez. “Hospitales Mágicos” y “Torreones Vigía” son las alas con las que buscamos elevar el espíritu de los pequeños guerreros que enfrentan la batalla de la enfermedad.
“Aspiramos a sembrar la semilla de la prevención en cada rincón de la sociedad”
En el lienzo de los “Hospitales Mágicos”, la imaginación se entrelaza con la realidad para crear un entorno que trasciende la monotonía hospitalaria. Como un pincel en manos de un artista, cada niño da vida a su propia mascota, una compañera que le acompaña en su travesía hacia la curación. Estas creaciones, plasmadas en las paredes de la UCI pediátricas, cobran vida a través de la magia de la realidad aumentada y códigos QR. Así, los pequeños exploradores pueden sumergirse en un universo paralelo, donde encuentran juegos, información sobre tratamientos y, sobre todo, un refugio lleno de color en medio de la adversidad.
Pero nuestra misión no se limita a transformar las paredes de los hospitales; aspiramos a sembrar la semilla de la prevención en cada rincón de la sociedad. Los “Hospitales Mágicos” se erigen como centros de prevención, extendiendo sus brazos hacia los colegios de la zona. Aquí, profesionales sanitarios ofrecerán charlas informativas a los padres, dotándoles de conocimientos para prevenir enfermedades y proteger la salud de sus pequeños tesoros. La alianza entre la medicina y la educación se convierte así en un escudo contra las adversidades, uniendo fuerzas para construir un futuro más saludable.
“Nuestra misión no se limita a transformar las paredes de los hospitales; aspiramos a sembrar la semilla de la prevención en cada rincón de la sociedad”
En la línea del horizonte, emergen los majestuosos “Torreones Vigía”, símbolos de agradecimiento y admiración hacia los héroes de batas blancas. Estos monumentos, que pronto adornarán todas las carreteras nacionales, son faros que iluminan el camino, recordándonos que, ante la adversidad, siempre contaremos con los mejores guardianes de la salud. Cada torreón es un tributo a la dedicación incansable de los médicos, un recordatorio de que su luz guía a aquellos que se encuentran en la oscuridad de la enfermedad.
Sin embargo, la construcción de este proyecto no puede ser obra de unos pocos. Requiere la sinfonía de esfuerzos y el compromiso conjunto de instituciones y organizaciones. En este sentido, expresamos nuestro profundo agradecimiento a la Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid por su apoyo continuo. Su respaldo ha sido el viento bajo nuestras alas, permitiéndonos elevarnos hacia horizontes más ambiciosos.
“La alianza entre la medicina y la educación se convierte así en un escudo contra las adversidades, uniendo fuerzas para construir un futuro más saludable”
Pero este sueño necesita más arquitectos, más manos dispuestas a construir puentes hacia un futuro más humano y esperanzador. Lanzamos un llamamiento a otras instituciones y organizaciones para que se sumen a esta obra, aportando recursos y fortaleza al proyecto. La unión de fuerzas no solo mejora el servicio que brindamos, sino que también teje una red de apoyo más resistente, capaz de sostener los sueños de cada niño que anhela curarse con la luz de la esperanza.
En cada trazo de color, en cada palabra de aliento, en cada torreón que se erige hacia el cielo, Uniteco y su proyecto de humanización en las UCI y las unidades pediátricas buscan ser el eco de la esperanza que late en el corazón de la infancia. Porque, al final, la verdadera magia reside en la capacidad de transformar la realidad, de tejer sueños y de recordar que, incluso en las UCI, la luz de la humanidad puede brillar con intensidad.
