Redacción
El objetivo de las jornadas fue dar a conocer el impacto y el abordaje de esta patología, así como recalcar la necesidad de establecer un plan de asistencia de salud renal que involucre distintos niveles asistenciales. La enfermedad renal crónica (ERC) es una enfermedad progresiva que se caracteriza por una disminución de la función renal o de los marcadores de daño renal, o ambos. En la Comunidad Valenciana, donde se supera la media nacional, esta patología afecta a 8.000 pacientes que precisan de Tratamiento Renal Sustitutivo (TRS) -diálisis o trasplante-.
Los organizadores de la jornada Escuchando el silencio, diagnosticando la Enfermedad Renal Crónica fueron AstraZeneca, junto a la Federación Nacional Alcer, la Sociedad Española de Nefrología, Alcer Alicante, Alcer Turia y Alcer Castalia. Estas entidades insistieron en la importancia de disponer de una estrategia renal regional que cuente con las tecnologías y equipos adecuados para la mejora de la prevención y detección de la ERC. Marta Moreno, directora de Asuntos Corporativos y Acceso al Mercado de AstraZeneca, señalaba la importancia de organizar este tipo de eventos ya que “sirven como base para llevar a cabo planes y acciones efectivos que ayuden en la prevención y detección precoz de esta enfermedad tanto a nivel regional como nacional”
La ERC es uno de los problemas de salud pública más graves; se prevé que en 2040 esta patología se convierta en una de las cinco primeras causas de muerte en el mundo
De igual forma, el presidente de la Sociedad Valenciana de Nefrología, el Dr. José Luis Górriz recalcaba como este tipo de jornadas “permiten abordar y explorar soluciones innovadoras requeridas para un mejor abordaje en la prevención y diagnóstico de esta enfermedad”.
Se estima que esta enfermedad vaya a ir en aumento, debido al incremento de factores de riesgo asociados como la diabetes, la hipertensión y la obesidad, así como al envejecimiento de la población. Por ello, Daniel Gallego, presidente de la Federación Nacional Alcer, afirmaba: “dado el aumento de casos tanto a nivel nacional como regional, es necesario fomentar e impulsar mejoras en el abordaje de esta enfermedad desde su prevención y detección precoz, fundamental para evitar que la enfermedad avance”. En España, la ERC afecta al 15% de la población adulta y a nivel mundial son más de 800 millones de personas quienes sufren de esta enfermedad. Aun así, la ERC está completamente infradiagnosticada.