Con motivo del Día Mundial Sin Tabaco, neumólogos de HM Hospitales en la provincia de Málaga subrayan la importancia de concienciar sobre los riesgos del consumo de tabaco y fomentar hábitos de vida más saludables, ya que el uso de vapeadores no deja de aumentar.
Este hábito, además, preocupa especialmente entre los jóvenes. La Organización Mundial de la Salud (OMS) advierte que los adolescentes están comenzando a usar cigarrillos electrónicos a un ritmo incluso superior al de los adultos. Según datos de la OMS, 37 millones de jóvenes entre 13 y 15 años consumen tabaco.
“El vapeo atrae a la mayoría de los adolescentes por curiosidad”, comenta el Dr. Borja Valencia, jefe del servicio de Neumología del Hospital HM Málaga y HM Santa Elena. “No son conscientes del riesgo que implica para la salud. El consumo de tabaco sigue siendo una de las principales causas de enfermedades respiratorias crónicas, cáncer y patologías cardiovasculares. Los tipos de cáncer más comunes diagnosticados este año serán los de colon y recto, seguidos de mama y pulmón. La exposición a factores de riesgo como el tabaco puede favorecer la aparición de estos tipos de cáncer”, remarca el médico.
Dr. Donate: “Los vapeadores se perciben como una alternativa más segura al tabaco tradicional, pero no están exentos de riesgos”
En los últimos años ha habido un incremento preocupante en el uso de cigarrillos electrónicos y cachimbas, especialmente entre los jóvenes. El Dr. Francisco Linde, neumólogo del Hospital HM Quirónsalud Málaga advierte que, al contrario de algunas creencias, “el humo de las cachimbas es peligroso porque contiene altos niveles de monóxido de carbono y metales pesados”. Por su parte, el Dr. Donate señala que, “aunque los vapeadores se perciben a menudo como una alternativa más segura al tabaco tradicional, no están exentos de riesgos. Los cigarrillos electrónicos pueden contener sustancias tóxicas y su uso puede llevar a la adicción a la nicotina, además de ser una puerta de entrada al tabaquismo convencional”.
Además, su consumo también puede dañar los pulmones y provocar bronquiolitis obliterante, una enfermedad que afecta a las vías respiratorias más pequeñas de los pulmones y puede causar tos y dificultad para respirar.
“El consumo de tabaco está vinculado a varios tipos de cáncer, incluyendo los de boca, garganta, esófago, páncreas, vejiga y riñón, entre otros”, indica el neumólogo Francisco Espíldora. “La prevención es la mejor estrategia contra el cáncer, y dejar de fumar es una de las decisiones más importantes que una persona puede tomar para reducir su riesgo. Si no puede dejar el tabaco por sus propios medios, es aconsejable acudir al hospital, donde el neumólogo evaluará el caso para iniciar el tratamiento y realizar un seguimiento”, concluye la Dra. Isabel Asschet, neumóloga del Hospital Quirónsalud Campo de Gibraltar.