Pablo Malo Segura
Los cambios en las necesidades de los pacientes como consecuencia de la cronicidad y el envejecimiento y los disruptivos avances tecnológicos están transformando la sanidad. En este contexto, apostar por la digitalización y la innovación se ha vuelto esencial para mejorar el funcionamiento del sistema sanitario. La colaboración público-privada permite optimizar recursos y atender el aumento en la demanda de atención sanitaria, según se ha puesto de manifiesto durante la sexta edición de Forbes Summit Healthcare. Esta jornada, patrocinada por AbbVie, Asisa, HM Hospitales y Merz Aesthetics, ha reunido a múltiples actores relevantes del sector para analizar la innovación, accesibilidad y calidad en el futuro de la sanidad española.
“La calidad de nuestro Sistema Nacional de Salud es uno de los temas que más preocupan a la población. Si nos comparamos con otros países tenemos un sistema sanitario de alta calidad tanto en el ámbito público como privado. Debemos sentirnos orgullosos, pero todavía hay muchas cosas que se pueden mejorar”, ha señalado Ignacio Quintana, CEO de Forbes, que ha inaugurado el Forbes Summit Healthcare 2024.
Por su parte, la Dra. Raquel Yotti, comisionada del Perte para la Salud de Vanguardia del Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades, ha resaltado la importancia de apostar por espacios de colaboración ante el momento de transformación en el que se encuentra inmerso el sistema sanitario “El sector sanitario es uno de los grandes motores para la dinamización de la economía española. Es una oportunidad única para mejorar la eficiencia del sistema sanitario y para crear riqueza”, ha destacado. En este sentido, ha indicado que el gasto sanitario anual en España es de 132.000 millones de euros, “una cifra que no deja de incrementarse cada año”.
Dra. Raquel Yotti: “El gasto que supone nuestro sistema sanitario es de 132.000 millones de euros y cada año aumenta”
La Dra. Raquel Yotti ha subrayado que el Perte para la Salud de Vanguardia permitirá “mejorar todo el proceso clínico asistencial al incorporar la innovación en el sistema sanitario. El objetivo es generar empleo y favorecer el sector productivo en nuestro país”. Actualmente, se ha destinado al Perte un presupuesto superior a los 2.300 millones de euros. Además de la inversión, ha comentado que el Perte ofrece tres elementos fundamentales: planificación estratégica, nuevos modelos de colaboración y transferencia del conocimiento y una plataforma de colaboración denominada Alianza Salud de Vanguardia, que permite trabajar a las Administraciones y al sector público y privado de manera conjunta.
“La medicina de precisión, que integra la información molecular y genómica de los biomarcadores con el resto de factores que afectan a nuestra salud, permite prestar una atención individualizada para poder prevenir y anticiparnos a las enfermedades con herramientas basadas en la capacidad de integrar datos”, ha expuesto.
Colaboración público-privada: optimizando recursos para atender la mayor demanda sanitaria
Durante el encuentro ha tenido lugar una mesa redonda titulada Colaboración público-privada: optimizando recursos para atender la mayor demanda sanitaria, que ha sido moderada por Marta Villanueva, directora general de la Fundación IDIS. “El sector privado y público deberían funcionar como vasos comunicantes. La normalización del sector privado llevaría a unos mejores sistemas de accesibilidad, equidad y calidad de servicio para la ciudadanía española. La colaboración público-privada es clave para optimizar recursos”, ha recalcado.
Carlos Rus (ASPE): “La situación de la colaboración público-privada es mejorable. No se ha incrementado como se debería”
Carlos Rus, presidente de la Alianza de la Sanidad Privada Española (ASPE), ha compartido su visión sobre la colaboración público-privada desde la perspectiva de la asistencia sanitaria y hospitalaria. “Tenemos dos escenarios. A nivel nacional hay un problema ideológico y a nivel autonómico falta financiación”. Por ello, ha indicado que se están poniendo en valor otras formas de colaboración donde prima la imaginación y menos el dinero de la administración autonómica.
Así, ha asegurado que “la situación de la colaboración público-privada es mejorable”, lamentando que la inversión en este ámbito no se ha incrementado como debería y que el sector no tiene el reconocimiento que merece por su aportación al sistema sanitario. “El sector privado realiza el 42% de las intervenciones quirúrgicas y cuenta con tecnología puntera. El primer robot da Vinci que se utilizó en España fue en el ámbito privado, al igual que las dos primeras máquinas de protonterapia que se han implantado”, ha recordado. Por todo ello, ha revindicado que “el Sistema Nacional de Salud sin el conjunto de lo público y lo privado no tiene sentido ni futuro”.
Por su parte, Marta Villanueva ha enfatizado en el potencial del sector privado, resaltando que dispone de cerca del 40% de los recursos. “Cuando un paciente se encuentra enfermo quiere que le atiendan y le curen de manera rápida con independencia de la titularidad del lugar en el que se lo hagan”, ha comentado.
Enrique de Porres (Asisa): “Hay que introducir nuevos elementos de gestión e incentivación a los profesionales. Para ello, la colaboración público-privada es imprescindible”
Enrique de Porres, consejero delegado de Asisa, ha mostrado su preocupación por las contradicciones que existen dentro del Gobierno de España en relación a la colaboración público-privada. “Por una parte se reconoce la necesidad de la colaboración entre el sector público y el privado para hacer frente a los problemas de incertidumbre, mientras que, por otra, se habla de limitar la capacidad de actuación en materia de asistencia sanitaria y de iniciativa privada”, ha precisado.
“Nos enfrentamos a una gran incertidumbre sobre el futuro de la sanidad como consecuencia de los cambios a nivel de las posibilidades de actuación por los determinantes sociales de la salud y el impacto de la innovación tecnológica. La genómica, el big data y la inteligencia artificial son palancas de transformación, pero no tenemos una idea exacta de cómo van a transformar el funcionamiento del sistema sanitario”, ha argumentado el consejero delegado de Asisa.
En esta línea, ha subrayado que la colaboración público-privada es imprescindible. “España no se puede permitir tener recursos ociosos en materia de asistencia sanitaria o de protección de la salud de la población. Hay que introducir nuevos elementos de gestión e incentivación a los profesionales. La ausencia de liderazgo del Ministerio de Sanidad en políticas de salud es evidente”. Finalmente, ha señalado que una de las asignaturas pendientes del sistema sanitario es disponer de un análisis comparativo del sector público y privado.
Carina Escobar (POP): “Es necesario hacer una apuesta decidida a medio y largo plazo por la sanidad que incluya al sector público y al privado”
Por otro lado, el consejero delegado de Asisa también ha identificado varios aspectos positivos del sistema. “Las compañías aseguradoras en nuestro país, a diferencia de muchos otros, están acostumbradas a gestionar la atención sanitaria, controlar la calidad de las prestaciones y participar en el control de la evolución de los costes asistenciales”, ha aseverado. Asimismo, ha subrayado que el personal sanitario está muy bien formado y que España dispone de una estructura asistencial pública y privada con un alto nivel de permeabilidad. “Tenemos la capacidad para adaptarnos a los cambios, pero hace falta voluntad política”, ha concluido.
“La situación sanitaria actual debe priorizar la innovación, dando respuestas a las peticiones actuales de los pacientes”, ha asegurado Carina Escobar, presidenta de la Plataforma de Organizaciones de Pacientes (POP). Asimismo, ha hablado sobre el reto de dar respuesta a una demanda cada vez mayor y más compleja de los servicios sanitarios debido al aumento del envejecimiento de la población y de la cronicidad.
“Tenemos un déficit de información y una fragmentación importante del sistema sanitario. Es necesario hacer una apuesta decidida a medio y largo plazo por la sanidad que incluya al sector público y al privado. Hay que saber priorizar a qué políticas sanitarias destinamos los recursos. Pensamos en el futuro y la inteligencia artificial, pero todavía existen muchos aspectos que solucionar en temas como la interoperabilidad, la historia clínica y la normalización de datos”, ha concluido.