Redacción
El Hospital del Mar ha realizado con éxito la primera cirugía láser en el Estado para tratar un glioblastoma inoperable mediante ablación térmica. Esta técnica avanzada y mínimamente invasiva permite abordar tumores cerebrales en áreas que no son accesibles mediante cirugía abierta convencional.
El Hospital del Mar ha realizado con éxito la primera cirugía láser en el Estado para tratar un glioblastoma inoperable mediante ablación térmica. Esta técnica avanzada y mínimamente invasiva permite abordar tumores cerebrales en áreas que no son accesibles mediante cirugía abierta convencional.
Conocida como terapia térmica intersticial con láser (LITT), se utiliza en algunos centros para pacientes con epilepsia y en el tratamiento de tumores cerebrales malignos en un número limitado de hospitales en todo el mundo.
El procedimiento se llevó a cabo el pasado 21 de mayo sin complicaciones significativas. Los resultados de la resonancia magnética postoperatoria muestran la desaparición de la captación de contraste por parte del tumor, indicando una respuesta positiva al tratamiento.
Los resultados de la resonancia magnética postoperatoria muestran la desaparición de la captación de contraste por parte del tumor
El equipo multidisciplinario de Neurocirugía Funcional, Neuroradiología y Neuroanestesiología del hospital ha integrado esta técnica en su oferta de servicios. Sin embargo, su aplicación está reservada para casos específicos de pacientes para los que se han agotado otras opciones terapéuticas sistémicas.
El glioblastoma, el tipo más común y agresivo de tumor cerebral primario, afectó a un paciente de 45 años en este caso particular. Después de recurrencias anteriores y considerando las posibles complicaciones neurológicas, se eligió LITT como tratamiento viable. Previamente a la cirugía, el paciente se sometió a una preparación intensiva de áreas motoras y cognitivas cercanas al tumor, utilizando técnicas avanzadas como la estimulación magnética transcraneal y rehabilitación específica.
El Dr. Jaume Capellades explicó que “el grado de ablación se evalúa mediante mapas de termografía por resonancia, que muestran, en tiempo real, la temperatura, tanto en los puntos a destruir como en los puntos de seguridad. Esto permite hacer un seguimiento constante del proceso, proporcionando gran precisión en la necrosis inducida y, sobre todo, seguridad, impidiendo la coagulación de las estructuras críticas adyacentes”.
Durante la intervención, se utilizó un sistema de navegación guiada por resonancia magnética para colocar con precisión las sondas láser dentro del tumor. Este enfoque permitió monitorear en tiempo real la temperatura y asegurar la precisión del procedimiento sin comprometer estructuras cerebrales críticas.
No todos los pacientes con glioblastoma son aptos para el tratamiento
El paciente fue dado de alta cinco días después de la intervención. Mostró una recuperación sin secuelas inmediatas y una mejora en aquellas capacidades afectadas por el tumor. Si bien es cierto que los primeros resultados son prometedores, se requiere un seguimiento a medio plazo para evaluar la evolución de la enfermedad.
La Dra. Gloria Villalba, coordinadora del Servicio de Neurocirugía del Hospital del Mar, enfatiza la relevancia de esta técnica para pacientes seleccionados, subrayando que no todos los pacientes con glioblastoma son candidatos para este tratamiento.
El Hospital del Mar ha incorporado la técnica LITT como parte fundamental de su oferta de servicios para glioblastomas y metástasis cerebrales, involucrando a equipos especializados en neurocirugía, neurorradiología y neuroanestesiología en este avance terapéutico.