Juan León García
La Plataforma de Organizaciones de Pacientes (POP) ha presentado este jueves su proyecto ‘ParticipACCIÓN’, un modelo de excelencia de los hospitales en la involucración de pacientes. El objetivo es que este colectivo se integre de forma holística dentro de las estrategias de gestión y toma de decisiones en el ámbito hospitalario. Un camino al que le queda mucho por recorrer si se tiene en cuenta que los quince hospitales que participan actualmente no superan los 50 puntos sobre 100 del cuestionario con el que se evalúan las distintas medidas implantadas en las estrategias de cada uno.
Asimismo, ya en 2023 los pacientes no estaban satisfechos con el rol que se les asignaba por parte de las direcciones hospitalarias, según un documento de consenso presentado a finales de ese año y elaborado junto a la Sociedad Española de Directivos de la Salud (Sedisa). “No sentían que lo que contaban servía para cambiar”, ha recordado Carina Escobar, presidenta de la POP.
Hasta el momento, se ha evaluado ‘ParticipACCIÓN’ en ocho consejerías de sanidad y en 15 hospitales. Entre ellos, el Hospital General Universitario Gregorio Marañón (Madrid), en cuyas instalaciones se ha desarrollado el evento. Uno de los pioneros a la hora de incluir la voz (y el voto) de los pacientes en determinados comités (el primero, Farmacia Hospitalaria) dentro de la estructura del centro. En dichas autoevaluaciones, obtuvo un 43 sobre 100, algo superior a “la media de todos los hospitales” de nuestro país (34%), ha precisado Escobar. Por otra parte, en el lado de las consejerías esta puntuación se eleva hasta el 64%. En cualquier caso, una de las novedades de un proyecto que se lleva gestando desde 2022 es la incorporación de un mapa en el que se pueden ver las instituciones que han completado el proceso.
Hasta el momento, se ha evaluado ‘ParticipACCIÓN’ en ocho consejerías de sanidad y en 15 hospitales. Desde la POP confían en ir sumando nuevos durante este año
Uno de los objetivos para este año, ha adelantado Yolanda Rueda, de la secretaría técnica de la POP, es “incrementar la red” de hospitales y consejerías. Todos ellos se ciñen a 30 estándares (elaborados por un comité multidisciplinar de expertos), englobados en cuatro grandes dimensiones. Por un lado, la articulación y los objetivos de participación, dos de los bloques donde menos puntuación se ha obtenido hasta el momento. Por el otro, los mecanismos de participación y los recursos materiales y humanos. En este último, el Gregorio Marañón ha obtenido un 100 sobre 100.
Esta herramienta permite conocer el grado de implantación de cada uno de los estándares contemplados. Una vez finalizada la evaluación, se genera un informe que recibe el hospital o la consejería, con recomendaciones en distintos puntos a mejorar y un gráfico en el que se muestra una comparativa con el resto de los hospitales (con datos anonimizados).
El modelo, ha confesado Rueda, “busca generar impacto y cambios”. Desde el punto de vista de la gerente del Hospital General Universitario Gregorio Marañón, Sonia García, la participación de los pacientes “es clave para la mejora asistencial de los procesos”. Motivo de más para incorporarlos y que así se puedan vehiculizar al resto de centros, en este caso, de la red del Servicio Madrileño de Salud (Sermas).
Formación para más participación
Pero no solo el paciente debe de estar en la toma de decisiones sobre su propia salud, sino que debe de poder hacerlo lo mejor formado e informado posible. Punto que ha mencionado Laura Gutiérrez, viceconsejera de Sanidad de la Comunidad de Madrid, durante la inauguración del acto. En concreto, se ha referido al II Plan de Humanización de la Asistencia Sanitaria 2022-2025, “centrado en la protección de paciente pero que brinda toda la información y protagonismo sobre el proceso de su enfermedad”.
Además de elaborar políticas sanitarias basadas en la “corresponsabilidad” para el autocuidado de la salud y la toma de decisiones del paciente en la enfermedad. Esta figura es transversal en la estrategia de la consejería, según ha asegurado, y se plasma en el plan de salud mental u otras iniciativas como el centro de ELA ubicado en el Hospital Enfermera Isabel Zendal.
“Con todo ello, pretendemos que el paciente sea el verdadero eje que vertebra nuestro sistema de salud”, ha reiterado.
En esta línea, Carmen Lobo, directora de enfermería del Hospital General Universitario Gregorio Marañón, ha añadido otros programas como el Foro de Pacientes o la Escuela de Pacientes impulsados desde dentro del centro y la consejería. O bien los comités asesores de pacientes y los comités de grupos de interés, entre otros.
Todo ello requiere de una medición y evaluación. Algo que se realiza mediante una metodología cualitativa “para que el paciente pueda expresar todos los puntos de mejora, o bien las fortalezas”. Además, Lobo ha mencionado el trabajo “muy estrecho” que existe entre el hospital y atención primaria para ver, por ejemplo, cómo mejorar la derivación de los pacientes.
Otorgar protagonismo e información al paciente para que sea corresponsable de su autocuidado y de la toma de decisiones sobre su enfermedad, claves en la política sanitaria de la Comunidad de Madrid
La presentación ha concluido con un coloquio en el que María Machón, trabajadora social y responsable del Área Social de Fundación Menudos Corazones; Eva Pérez, presidenta de la Federación Nacional de Enfermos y Trasplantados Hepáticos y Juana Mateos Rodilla, jefa de servicio de coordinación de la Escuela Madrileña de Salud de la Dirección General de Humanización, Atención y Seguridad del Paciente, han aportado una serie de claves para potenciar la participación de los pacientes.
El modelo ‘ParticipACCIÓN’ recibe la colaboración de AbbVie, Bayer, Boehringer Ingelheim, CSL Vifor, GSK, Johnson & Johnson, Lilly, MSD, Novartis, Pfizer y Roche.
