Juan León García
La Unión Europea (UE) contabilizaba en 2022 2,31 millones de camas hospitalarias, un 7% menos en diez años (171.110 en términos absolutos). La reducción se ha dado en algunos de los principales países del continente, como Alemania, Francia, Italia o Polonia, que también pierden camas. Pero no así en España, donde se han incorporado 2.398 más en una década, según los datos que ha publicado este jueves Eurostat. De los países por la parte de arriba de la tabla, solo Rumanía comparte esta tendencia, sumando 5.264 en este periodo.
Los mayores números de camas de hospital se registraron en 2022 en Alemania (642.107), Francia (374.290) y Polonia (231.789), mientras que los más bajos se registraron en Malta (2.158), Luxemburgo (2.609) y Chipre (2.857).
Esta reducción, ha explicado el organismo europeo en un comunicado, refleja no solo el hecho de que los datos sobre camas de hospital solo cubren las camas para atención hospitalaria (excluidas las camas de atención diurna y ambulatoria). También influyen los avances científicos y tecnológicos que redujeron la duración media de la estancia para los procedimientos hospitalarios o reemplazaron esos procedimientos por los proporcionados por la atención diurna o ambulatoria.
Número de camas por población
Extrapolado al número de camas por cada 100.000 habitantes, en 2022 la media europea era de 516 camas de hospital, mientras que en 2012 había 563. Algunos países de la UE sobrepasan la media, como Bulgaria (823 por 100.000 personas), Alemania (766, y que además es el país con mayor número absoluto de camas) o Rumanía (728).
En el otro extremo, Suecia (190), los Países Bajos (245), Dinamarca (248), Finlandia (261), Irlanda (291) y España (294 camas) registraron el menor número de camas de hospital en relación con el tamaño de su población, todas ellas de menos de 300 camas por cada 100 000 personas.
En cuanto a las camas para cuidados de larga duración en centros de enfermería y otros centros residenciales de cuidados de larga duración, en 2022 las tasas más altas se registraron en los Países Bajos (1.420 camas para cuidados de larga duración por cada 100.000 personas), Suecia (1.299) y Bélgica (1.283). Bulgaria (25 camas de cuidados de larga duración por cada 100.000 personas) y Grecia (26) registraron las tasas más bajas, seguidas de Polonia (214).
La estadística recoge en sus notas metodológicas que los números relacionados con nuestro país tienen varias excepciones. En concreto, los datos relativos a las camas para cuidados de larga duración son provisionales. Además, las camas para cuidados paliativos en todo tipo de centros de enfermería y atención residencial no están incluidas. Por lo tanto, los datos totales pueden subestimarse y el incremento de camas hospitalarias puede ser aún mayor.