Carlos Pardo, managing director de SD Worx
El verano pone a prueba la capacidad de los centros de salud para mantener sus operaciones de manera fluida y efectiva. La gestión del personal en esta época requiere un equilibrio cuidadoso entre cubrir vacantes, cumplir con las normativas y mantener la moral del equipo. Por lo tanto, es necesario que exista una planificación adecuada y una estrategia bien definida, pues solo así es posible minimizar los riesgos de saturación y asegurar que la atención sanitaria siga siendo de alta calidad.
Para ello, cabe identificar cuáles son los problemas más acuciantes en esta época. Uno, incontestable, es la escasez de personal disponible: las vacaciones suelen generar vacantes que deben ser cubiertas para evitar una sobrecarga en los equipos que permanecen en activo. Es evidente que esta presión adicional afecta la calidad de la atención, aumenta los niveles de estrés y lleva a una menor satisfacción tanto de los pacientes como de los propios trabajadores.
Cabe añadir que esta problemática es incluso más aguda cuando hablamos de la atención primaria, probablemente el sistema más erosionado y falto de presupuesto. Y es que, tal y como apuntaba recientemente la Sociedad Española de Salud Pública y Administración Sanitaria (Sepas), el sobreesfuerzo de los profesionales que trabajan en la atención primaria permite que se resuelvan las demandas de más del 90% de los pacientes.
Es necesario que exista una planificación adecuada y una estrategia bien definida, pues solo así es posible minimizar los riesgos de saturación y asegurar que la atención sanitaria siga siendo de alta calidad
Aquí entra en juego un desafío clave, que es el equilibrio entre la dotación de personal y la demanda de pacientes. La planificación debe considerar no solo la cantidad de personal necesario, sino también las habilidades específicas requeridas para atender las necesidades particulares de los pacientes en diferentes unidades y turnos.
Además, la normativa y la seguridad son aspectos cruciales que no deben pasarse por alto. Hay que garantizar que se cumplan todas las regulaciones y que se mantenga un ambiente de trabajo seguro. Asimismo, está la complejidad de manejar múltiples contratos variables, turnos irregulares y la necesidad de una adecuada conciliación laboral.
La digitalización como habilitador de un servicio más humano
La digitalización se ha convertido en un aliado indispensable para la gestión del personal en el sector sanitario. El software de gestión de recursos humanos lo está cambiando todo, ya que permite a los responsables de personal visualizar la disponibilidad de todos los empleados, asignar turnos de manera eficiente y prever posibles cuellos de botella antes de que se conviertan en problemas serios.
En este sentido, la tecnología es útil a la hora de anticipar las necesidades futuras, identificar las habilidades requeridas y desarrollar planes integrales para atraer, retener y capacitar a los profesionales adecuados. Es un enfoque proactivo y no reactivo que resulta esencial para mantener la continuidad de la atención.
Es evidente que centrar esfuerzos en el lado más humano es altamente probable cuando cuentas con la tecnología como apoyo
Cuando hablamos de digitalización hablamos de soluciones en la nube que facilitan la planificación y asignación de turnos, el seguimiento de la productividad y la gestión de incidencias de manera remota. Lo hacemos también de la inteligencia artificial (IA), cuyo atractivo en el ámbito de los recursos humanos es innegable. Por ejemplo, ya está realizando una incursión en los sistemas de nóminas para facilitar cálculos automatizados, entre otras cosas.
Es, sin embargo, una tecnología con mucho terreno que recorrer todavía. Según los datos que manejamos en SD Worx, para las empresas integrar IA en sus procesos de recursos humanos no es una de las principales prioridades este año; solo lo es para un 8%. Las compañías están más enfocadas en el bienestar físico y mental de los empleados (40%) y la flexibilidad laboral (34%).
En este aspecto, es evidente que centrar esfuerzos en el lado más humano es altamente probable cuando cuentas con la tecnología como apoyo. Digitalizar los procesos de RRHH y eliminar las tareas manuales agiliza, mejora la calidad del trabajo de los profesionales médicos y permite que todos puedan centrarse en el trabajo con el valor añadido requerido.
