Redacción
En un importante avance para la medicina diagnóstica, la Fundació Puigvert ha validado en un estudio clínico una nueva herramienta que permite identificar el tratamiento antibiótico más adecuado en apenas 45 minutos para infecciones urinarias no complicadas. Este sistema, llamado Sysmex PA-100 AST, reduce drásticamente los tiempos de diagnóstico y tratamiento, frente a los dos a cuatro días que requieren los métodos actuales.
El Dr. Carles Alonso-Tarrés, jefe del Laboratorio de Microbiología de la Fundació Puigvert, de Barcelona, en colaboración con el Dr. Jaume Borràs, jefe clínico del Servicio de Urgencias de la Fundació Puigvert, han sido quienes han liderado este estudio, con la colaboración de los servicios homólogos del Hospital de Sant Pau y la empresa Sysmex, en la que se incluye Sysmex Astrego, que ha desarrollado la tecnología.
“Las pruebas que tenemos ahora tardan varios días, lo que obliga a los médicos a prescribir antibióticos de amplio espectro de forma empírica, sin esperar los resultados del laboratorio”, comenta el Dr. Alonso-Tarrés
“Las pruebas que tenemos ahora tardan varios días, lo que obliga a los médicos a prescribir antibióticos de amplio espectro de forma empírica, sin esperar los resultados del laboratorio. Esto conlleva riesgos de efectos secundarios y el aumento de microorganismos multirresistentes”, explica el Dr. Alonso-Tarrés. Con el nuevo sistema, los médicos podrán ofrecer un tratamiento mucho más específico y seguro. Esto no solo mejorará la recuperación de los pacientes, sino que también reducirá el uso innecesario de antibióticos de amplio espectro y, por ende, la proliferación de cepas multirresistentes.
Diagnóstico preciso en tiempo récord
En el estudio, publicado en la revista European Journal of Clinical Microbiology & Infectious Diseases, se compararon los resultados del Sysmex PA-100 AST con los métodos de microbiología de rutina en 278 pacientes femeninas con sospecha de infecciones del tracto urinario (ITU) no complicada. “Los hallazgos muestran que esta nueva herramienta ofrece resultados de bacteriuria en 15 minutos y de AST en 45 minutos, con una sensibilidad del 84% y una especificidad del 99,4% para las especies bacterianas dentro de las especificaciones del analizador, que son especies comunes que causan ITU no complicada”, comenta el Dr. Alonso-Tarrés.
“Los hallazgos muestran que esta nueva herramienta ofrece resultados de bacteriuria en 15 minutos y de AST en 45 minutos”, explica el Dr. Alonso-Tarrés
En concreto, el analizador está diseñado para identificar las bacterias Escherichia coli, Klebsiella pneumoniae, Proteus mirabilis, Enterococcus faecalis y Staphylococcus saprophyticus. A partir de estas, el sistema estudia la resistencia o sensibilidad a cinco antimicrobianos: amoxicilina/ácido clavulánico, ciprofloxacina, fosfomicina, nitrofurantoína y trimetoprima.
“La diferencia clave con los métodos tradicionales es que este sistema no requiere esperar la formación de colonias bacterianas. Utilizamos nanofluídica para capturar células individuales y un microscopio de contraste de fases que nos permite observar cómo las bacterias responden a los antibióticos de manera casi inmediata“, explica el Dr. Francisco Lucena, especialista de Sysmex que lleva el analizador y que también ha participado y firma el estudio de validación clínica.
“La diferencia clave con los métodos tradicionales es que este sistema no requiere esperar la formación de colonias bacterianas”, subraya el Dr. Lucena
Los resultados del estudio confirman que el test rápido proporciona una recomendación de tratamiento óptima en el 80% de los casos, con lo que se reduce la prescripción de antibióticos de amplio espectro. El 20% restante de casos se resolverá, como hasta la fecha, en la valoración médica de cada paciente.
Una herramienta con impacto potencial en la salud pública
El impacto potencial de esta tecnología va más allá del tratamiento individual de las infecciones urinarias. Según el Dr. Alonso, uno de los grandes problemas en el manejo de las infecciones del tracto urinario es el uso excesivo de antibióticos de amplio espectro debido a la falta de un diagnóstico rápido. “Con esta herramienta, reducimos el uso innecesario de antibióticos potentes, lo que disminuye la posibilidad de que aparezcan cepas multirresistentes, un problema que ya afecta al 15% de las consultas médicas“, añade.
Las infecciones del tracto urinario son una de las infecciones bacterianas más comunes a escala mundial, con más de 400 millones de casos anuales. En España, las ITU representan una de las infecciones bacterianas más frecuentes en atención primaria y hospitalaria. Según el informe EPINE 22, solo en atención primaria aproximadamente el 30% de las consultas son sobre procesos infecciosos, de los cuales en torno al 10% son infecciones urinarias.
“El sistema está diseñado para ser utilizado fuera de los laboratorios convencionales, con una mínima interacción del operador y sin necesidad de personal especializado”, destaca el Dr. Lucena
El sistema Sysmex PA-100 AST ofrece la posibilidad de una transformación en la práctica médica, no solo en centros hospitalarios, sino también en entornos de atención primaria. El Dr. Lucena destaca que “el sistema está diseñado para ser utilizado fuera de los laboratorios convencionales, con una mínima interacción del operador y sin necesidad de personal especializado, lo que lo convierte en una herramienta ideal para consultorios de atención primaria y servicios de urgencias”.
Perspectivas de futuro
En cuanto a la adopción generalizada de este avance, el Dr. Alonso subraya que el dispositivo está disponible y que su implementación dependerá de que los sistemas de salud valoren su utilidad. Además, insiste en que, aunque la infección urinaria es uno de los principales desafíos, la reducción del uso de antibióticos de amplio espectro también contribuirá a disminuir la aparición de bacterias multirresistentes en otros tipos de infecciones.
El Sysmex PA-100 AST no solo representa un avance en la mejora del tratamiento de infecciones urinarias, sino que también juega un papel crucial en la lucha contra la resistencia a los antimicrobianos. La herramienta ha sido reconocida a nivel internacional, recibiendo el prestigioso Premio Longitude, dotado con ocho millones de libras y creado por la agencia de innovación del Reino Unido, Challange Works, para abordar la resistencia a los antimicrobianos.
