J.P.R.
Los hematólogos cuentan en la actualidad con un mayor arsenal terapéutico que les ha permitido avanzar más en la medicina precisión. En los últimos años, tratamientos como los inhibidores de la tirosin-quinasa, los anticuerpos conjugados, los anticuerpos biespecíficos y las terapias CAR-T han cambiado el panorama de los tumores hematológicos, un conjunto de neoplasias que representa el quinto cáncer más común en España, según los últimos datos de la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM). estos tratamientos han tenido impacto en calidda de vida, supervivencia libre de progresión y supervivencia global.
“Estos tratamientos son muy diferentes a la quimioterapia y el trasplante. Confiamos en que logren sustituirlos y nos quedemos libres de estos tratamientos tan agresivos para los pacientes”, ha subrayado la Dra. Raquel de Paz, médico adjunto del Servicio de Hematología y Hemoterapia del Hospital Universitario La Paz, durante un seminario para periodistas organizado por la compañía farmacéutica Pfizer en el marco del Mes de Concienciación sobre el Cáncer de la Sangre.
Los inhibidores de la tirosin-quinasa, los anticuerpos conjugados, los anticuerpos biespecíficos y las terapias CAR-T han permitido a los hematólogos avanzar en la medicina de precisión
Se estima que el número de diagnósticos de cáncer hematológico en España se sitúe entre 22.000 y 29.000 en 2024. En 2025, esta cifra podría ascender. Las previsiones para el año próximos se sitúan en el entorno de 25.770 nuevos casos. El envejecimiento es uno de las causas que ha provocado un incremento de la incidencia. Existe otro factor: un mejor diagnóstico de la enfermedad. “Antes teníamos mielomas que no se diagnosticaban hasta que no se producía una insuficiencia renal, una fractura o una anemia. Esto también pasaba con la leucemia linfocítica crónica, por ejemplo”, ha señalado la Dra. María Jesús Blanchard, médico adjunto del Servicio de Hematología y Hemoterapia del Hospital Universitario Ramón y Cajal. “Se recogen mejor los datos. No todos los hospitales los recopilan y los trasnfieren a las redes todavía”, ha añadido la Dra. De Paz.
A pesar de que el envejecimiento de la población ha tenido un impacto considerable en la incidencia de la enfermedad, no todos los pacientes frágiles se pueden beneficiar de estos tratamientos. “En el caso de los pacientes mayores intentamos mejorar su calidad de vida con un tratamiento de soporte”, ha manifestado La Dra. De Paz. En el caso del mieloma múltiple, no repercute tanto la edad sino el estado de salud del paciente. “Sí que nos importa la comorbilidad o el tipo de comorbilidad”, ha insistido la Dra. Blanchard.
Estos tratamientos más complejos pueden conllevar también toxicidades más complejas. “No apoyamos en otros especialistas . Estamos empezando a crear circuitos para reducir las toxicidades. El abordaje es más completo y nos permite tratar a pacientes más frágiles”, ha afirmado la especialista del Ramón y Cajal.