Gema Maldonado
El Ministerio de Sanidad quiere dar un giro a la evaluación de innovaciones farmacológicas y nuevas terapias para acortar sus tiempos, adaptarlo a las necesidades no cubiertas reales y garantizar la equidad y sostenibilidad del sistema. Y para conseguirlo, uno de los pasos, es incorporar a las comunidades autónomas desde el minuto cero del proceso y en el posterior camino de negociaciones de precios.
En el proceso de los acuerdos económicos el Ministerio tomaría un papel de liderazgo sobre las comunidades para llegar a consensos y evitar que cuando un fármaco tenga precio-reembolso, los territorios frenen su llegada a los hospitales. El objetivo de estos cambios es que las comunidades no realicen una segunda evaluación de las terapias ni retrasen su llegada a los pacientes, para garantizar que llega a todos los territorios de forma equitativa. Sanidad también se plantea cambiar algunos de sus procedimientos para ofrecer mayor información a las comunidades.
Dr. Martín Saborido: “Si queremos que el acceso sea equitativo y rápido el Ministerio tiene que ejercer un liderazgo mayor sobre los territorios y alcanzar acuerdos con las comunidades”
Al menos, son las líneas de trabajo sobre la mesa en la Dirección General de la Cartera Común de Servicios del SNS y Farmacia del Ministerio de Sanidad que ha explicado el Dr. Carlos Martín Saborido, vocal asesor de la dirección general que lidera César Hernández, en el Tercer Ciclo de debate sobre Terapias Avanzadas organizado por BioInnova Consulting el pasado martes en Madrid.
Respecto a los acuerdos financieros sobre las nuevas incorporaciones al SNS, el Dr. Martín Saborido advirtió de que “si queremos que el acceso sea equitativo y rápido el Ministerio tiene que ejercer un liderazgo mayor sobre los territorios y alcanzar acuerdos con las comunidades para acelerar ese acceso regional”. En este sentido, cree que sería necesario contar con recursos, no solo de personal, también con herramientas en el propio Ministerio y en las comunidades para que todas puedan hacer seguimiento de las negociaciones para alcanzar esos acuerdos económicos y hacer seguimiento de ellos.
“Si llega una terapia o un fármaco a la Comisión de Evaluación en la que participan las comunidades autónomas y las posiciones están encontradas, está claro que va a haber otra evaluación por parte de esas comunidades”
El mismo inicio del proceso de evaluación en el Ministerio ya contaría con las comunidades autónomas, que con el mecanismo actual se incorporan en una fase más avanzada. “Si llega una terapia o un fármaco a la Comisión de Evaluación en la que participan las comunidades autónomas y las posiciones están encontradas, está claro que va a haber otra evaluación por parte de esas comunidades. Con el nuevo Real Decreto de Evaluación, las comunidades están desde la pregunta inicial, de forma que cuando la terapia o el fármaco llega a la evaluación esas situaciones van a estar superadas”, explicó el asesor ministerial.
Por último, el consenso con las comunidades tiene que continuar durante el seguimiento tras la incorporación de las nuevas terapias para poner en común los datos de todas las comunidades sobre el uso y los resultados de la innovación terapéutica. Un aspecto, el de los datos compatibles y unificados en el que el asesor admitió que en España “somos malísimos”.
El Dr. Martín Saborido advierte de que hay que asegurarse de que “la innovación se introduzca por la demanda, no por la oferta”
Ante representantes de compañías como Gilead Sciences, Johnson & Johnson, Novartis España y PTC Therapeutics, el Dr. Saborido explicó hacia dónde debe caminar la evaluación de terapias avanzadas, que siempre debe ser “completa y compleja”, partir de un “análisis del horizonte” de las terapias que se vislumbran y asegurarse de que “tienen realmente interés, es decir, que la innovación se introduzca por la demanda, no por la oferta”. Una demanda que vendrá marcada por las necesidades médicas que expresen los propios clínicos con la experiencia de su día a día, los pacientes y por el espacio que un área terapéutica determinada tenga para investigar. La base de esta evaluación tiene que estar formada por “datos, datos y más datos, sin ellos, tomar decisiones no tiene sentido”, recordó el Dr. Martín Saborido.