Pablo Malo Segura (Oviedo)
La donación de 280 millones de euros realizada por la Fundación Amancio Ortega para la adquisición de equipos de protonterapia en España representa una oportunidad de liderar el desarrollo de la terapia de protones. “España va a contar con el 25% de los centros de protonterapia de Europa. Es una oportunidad histórica que va a permitir individualizar el tratamiento y generar conocimiento”, destaca el Dr. Antonio Conde, coordinador de la plataforma multidisciplinar de protonterapia de Sociedad Española de Oncología Radioterápica, que ha atendido a iSanidad durante el XXII Congreso Nacional de SEOR celebrado en Oviedo para valorar el escenario actual y futuro de la protonterapia en España.
Actualmente, nuestro país cuenta con dos centros de protonterapia de titularidad privada. El jefe de Servicio de Oncología Radioterápica en el Hospital Universitario y Politécnico La Fe de Valencia ha subrayado que en los próximos años se van a sumar otros 11 centros que se encuentran en construcción (10 financiados por la Fundación Amancio Ortega) y un proyecto público en Santander. En total, España contará con 13 centros, que se empezarán a poner en marcha de manera progresiva a finales del año 2026.
“El objetivo de la plataforma multidisciplinar de protonterapia de SEOR es unir todas las iniciativas que hay en España en este ámbito”
¿Cuáles son las principales líneas de trabajo de la plataforma multidisciplinar de protonterapia de SEOR?
Esta plataforma se constituyó a finales del año 2023 y se ha presentado de forma oficial durante el congreso SEOR. Su objetivo es unir todas las iniciativas de protones que hay ahora mismo en España, tanto los dos centros que ya están en funcionamiento como los diez que se están creando gracias a la donación de la Fundación Amancio Ortega y el de Santander. La plataforma ha sido diseñada para que el grupo no esté formado solo por oncólogos radioterápicos, sino que también incluya a radiofísicos y a todos los profesionales vinculados a la protonterapia de otras especialidades médicas como la oncología pediátrica. También queremos contar con arquitectos, ingenieros y gestores para que el modelo de España, que va a ser un líder mundial en esta tecnología, sea un éxito.
“La protonterapia permite poder irradiar menos en población pediátrica y adultos jóvenes, lo que reduce el riesgo de que se puedan generar segundos tumores”
¿Qué beneficios concretos ofrece la protonterapia frente a otras técnicas de radioterapia en tumores complejos?
Los protones tienen una característica física que es el pico de Bragg. Esto consiste en que cuando la radicación entra en un paciente, se deposita toda la dosis en un punto, y a partir de este la dosis es cero. El beneficio que aporta esta característica es que, al parar la radiación de una forma tan precisa, eliminamos la irradiación en determinados tejidos sanos que están pegados al tumor o bien el resto del organismo del paciente. Esto genera un beneficio por múltiples causas. En primer lugar, permite aumentar la dosis con seguridad en determinados tumores o áreas que queremos tratar y están muy cercanas a órganos de riesgo que no van a poder recibir esas dosis altas de radiación. Por otro lado, al disminuir a cero la dosis en tejidos sanos, se reduce el riesgo de que se puedan desarrollar efectos secundarios debidos a la radiación.
En tercer lugar, poder irradiar menos en población pediátrica y adultos jóvenes va a producir un menor riesgo de que se puedan generar segundos tumores. Además, se están viendo otra serie de ventajas, como que al recibir menos irradiación el resto del cuerpo no disminuye el sistema inmunológico del paciente. Esto ayudaría también a combinaciones de tratamientos, lo que se está explorando de cara al futuro.
“Las indicaciones de la protonterapia van a ir aumentando a medida que tengamos mayor disponibilidad de los recursos”
¿En qué tumores está demostrando mejores resultados?
Actualmente, en España estamos utilizando la protonterapia fundamentalmente en tumores pediátricos en determinadas localizaciones y en adultos con tumores de la base del cráneo, como los cordomas o sarcomas que están en una localización muy compleja y requieren de altas dosis de radiación. La terapia de protones también se está empleando en irradiación de determinados tipos de tumores oculares, como puede ser en el melanoma de coroides.
Gracias a la importante donación de la Fundación Amancio Ortega, España contará con 13 centros para finales de 2026. ¿Es una oportunidad para España de convertirse en un referente a nivel mundial en terapia de protones?
La radioterapia española está al más alto nivel en los estándares europeos y mundiales gracias a diversas iniciativas como la donación de la Fundación Amancio Ortega, que supuso actualizar toda una serie de recursos que estaban en riesgo de obsolescencia en oncología radioterápica, y más adelante al Plan Inveat, destinado a actualizar los equipos de alta tecnología.
¿Se van a ampliar las indicaciones de la protonterapia?
Las indicaciones de la protonterapia van a ir aumentando a medida que tengamos mayor disponibilidad de los recursos. El objetivo es ir caso a caso para realizar un estudio individualizado y elegir el tratamiento más adecuado para cada paciente. Al ofrecer a un paciente un tratamiento con fotones o con protones tenemos que haber analizado previamente que es el mejor tratamiento posible y que existe un beneficio con esta técnica. Existen múltiples modelos, uno de ellos es calcular la radioterapia con fotones y con protones para comprobar si el beneficio de la dosimetría en determinadas estructuras es significativo.
“Es fundamental que todos los centros de protonterapia, incluidos los dos de titularidad privada que funcionan actualmente, trabajen en red”
Con los nuevos centros de protonterapia que están en construcción España va a disponer de un recurso más para abordar el cáncer, que se suma a otras técnicas como la SBRT, la radiocirugía, la radioterapia adaptativa o la radioterapia intraoperatoria. España va a contar con el 25% de los centros de protonterapia de Europa, lo que permitirá hacer registros y ensayos clínicos para aumentar el conocimiento respecto al uso de la terapia de protones.
¿Por qué es importante contar con un registro unificado de pacientes y trabajar en red para poder superar las limitaciones futuras?
Es fundamental que todos los centros de protonterapia, incluidos los dos de titularidad privada que funcionan actualmente (Quirónsalud y Clínica Universidad de Navarra), trabajen en red siguiendo el modelo de éxito de la Organización Nacional de Trasplantes (ONT). El trabajo en red tiene que estar coordinado desde los centros de oncología radioterápica, incluso puede haber algunos que estén más especializados en determinadas patologías.
Uno de los objetivos fundamentales que se acordó con la Fundación Amancio Ortega es garantizar que el acceso a la protonterapia sea equitativo. Aunque haya una provincia o una comunidad autónoma que no tenga físicamente un centro de protones, cualquier paciente del territorio español debe poder acceder a este tratamiento. Para ello, se realizó un estudio que permitiera optimizar la distribución de centros a nivel nacional en función de la distancia y la densidad poblacional.
“Uno de los objetivos fundamentales que se acordó con la Fundación Amancio Ortega es garantizar que el acceso a la protonterapia sea equitativo”
¿Cuáles son los principales necesidades en materia de formación para maximizar el uso de estos equipos?
La formación de los profesionales en el uso de estos equipos es clave para un uso adecuado y óptimo de esta técnica. Es importante promover la formación de los oncólogos radioterápicos y de los radiofísicos hospitalarios a nivel nacional para que sepan las indicaciones, cuándo remitir un paciente y las vías para realizarlo, así como realizar los seguimientos de los pacientes para evitar desplazamientos.
Además, es muy importante ofrecer una formación al resto de especialistas médicos que para que conozcan la protonterapia y sus indicaciones. El objetivo es que cuando dispongamos ampliamente de este recurso se individualice para que no haya una radioterapia de primera y otra de segunda y poder ofrecer a cada paciente lo que va a ser mejor para él.
“La IA nos ayuda a delimitar mejor las estructuras sanas respecto a las estructuras tumorales y disminuir heterogeneidades. Además, es muy útil en la optimización de los cálculos de dosis”
¿En qué aspectos ha demostrado mayor utilidad la IA en radioterapia?
La IA está transformando completamente la medicina. En concreto, en radioterapia esta herramienta nos ayuda a delimitar mejor las estructuras sanas respecto a las estructuras tumorales y disminuir heterogeneidades. También es muy útil en la optimización de los cálculos de dosis. Además, la IA nos puede ayudar a extraer mejor los datos clínicos que tenemos de los pacientes para poder realizar registros y visualizar a nivel descriptivo, predictivo y estadístico correlaciones que muchas veces son muy complejas como las dosimetrías. Tenemos que aprovechar el potencial que ofrecen el big data y la IA en nuestra especialidad.