Juan León García
A apenas unas semanas de que se constituyese la alianza ‘Compromiso por la salud cardiovascular’, se ha celebrado este martes su primer acto con el objetivo de actualizar las iniciativas enmarcadas en la Estrategia de Salud Cardiovascular y actualizar cuáles son sus principales desafíos por delante. En concreto, para Pablo Crespo, secretario general de la Federación Española de Empresas de Tecnología Sanitaria (Fenin) (desde la que se impulsó esta entidad que engloba a una decena de entes, desde sociedades científicas, instituciones y hasta asociaciones de pacientes), aún “queda mucho trabajo por hacer, y es por ello que todos los firmantes de este manifiesto hacemos un llamamiento: acelerar el abordaje y desarrollo temprano de las enfermedades cardiovasculares en nuestro país”.
Y es que, ha señalado Crespo como parte de la inauguración de la jornada Corazonea celebrada en el Ilustro Colegio Oficial de Médicos de Madrid (Icomem), desde la aprobación en abril de 2022 de dicha estrategia, su despliegue “no va a la velocidad que desearíamos”.
A su vez, el presidente de la Fundación Española del Corazón (FEC), Andrés Íñiguez, ha pedido que la Escav, pase a ser un Plan para así “asegurar que lleve asociado un presupuesto”. “Las estrategias no llevan asociadas financiación, mientras que los planes sí que la tienen, por ello se debería cambiar el nombre al Escav y llamarlo Plan, así tendría una cantidad destinada”, según ha expresado y se ha hecho eco Europa Press.
Entretanto, los participantes en la jornada han coincidido en el compromiso unánime por la mejor salud cardiovascular y en cómo esta joven alianza tiene un mismo objetivo que ha expresado el Dr. Manuel Martínez-Sellés, presidente del Icomem: “conseguir mejorar el pronóstico de las que siguen siendo la principal causa muerte en España y el mundo, la enfermedades cardiovasculares”.
Los participantes en la jornada ‘Corazonea’ han coincidido en el compromiso unánime por la mejor salud cardiovascular
No obstante, hace falta poner énfasis en la prevención de este tipo de patologías, que podrían reducir considerablemente la mortalidad. Para ello, el desarrollo de tecnologías sanitarias para el diagnóstico y tratamiento es clave. Como ha reflejado la coordinadora de la Estrategia en Salud Cardiovascular del Sistema Nacional de Salud (SNS), Carla Dueñas, uno de los principales objetivos del plan es “mejorar el nivel de salud cardiovascular”.
Por ello, trabajan en la promoción de una buena salud cardiovascular, la reducción de la incidencia o la extensión de medidas que permitan mejorar la prevención al respecto. Tanto a nivel nacional, como europeo: el proyecto Jacardi (que se enfoca tanto en la parte cardiovascular como en su conexión con la diabetes) es una de las iniciativas más ambiciosas en el contexto comunitario, en la que participan 11 entidades españolas.
La celebración de este encuentro es fruto de la alianza ‘Compromiso por la salud cardiovascular’, impulsada por el sector Cardiovascular, Neurocirugía y Tratamiento del dolor de la Federación Española de Empresas de Tecnología Sanitaria, Fenin, y de la que forman parte una decena de entidades. Asimismo, se ha desgranado el decálogo de medidas para mejorar la salud cardiovascular de los españoles y en consonancia con los fines de la Escav elaborado por la alianza.
Cooperación entre primaria y especializada
Por parte de las sociedades científicas, se ha destacado la cooperación y coordinación entre los distintos profesionales (tanto de atención primaria como especializada) para trabajar en la mejora de la salud cardiovascular entre la población.
Para el Dr. Luis Rodríguez Padial, presidente de la Sociedad Española de Cardiología (SEC), la clave de la actual estrategia es que se termine implantando de manera más o menos homogénea en todo el territorio, teniendo en cuenta las particularidades de cada sistema sanitario en nuestro país. Con el fin último, ha completado el Dr. Juan José Legarra Calderón, presidente de la Sociedad Española de Cirugía Cardiovascular y Endovascular (Secce), de que mejore la calidad de vida del paciente “lo antes posible”.
Al respecto, los lazos con atención primaria son fundamentales. Para el presidente de la Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria (Semergen), el Dr. José Polo García, la labor radica en “educar y formar al paciente, y también al cuidador”. Es decir, en potenciar la prevención, en la que también adquieren importancia las pruebas diagnósticas gracias, por ejemplo, a equipos TAC.
Además, enfermería especializada cumple un rol importante, a juicio de la Dra. Concepción Cruzado, vicepresidenta de la Asociación Española de Enfermería en Cardiología (AEEC), tanto en cuidados, como en la mejora de la adherencia en el régimen terapéutico, tanto farmacológico como no farmacológico, o en el impulso de la telemedicina.
“Enfoque colectivo” entre administraciones
En este encuentro, representantes de distintas administraciones han puesto de manifiesto la necesidad de “aunar objetivos” para un enfoque colectivo de la salud cardiovascular en España, teniendo en cuenta que la Escav coexiste con otras estrategias o planes particulares de las comunidades autónomas. Algunas de ellas, como las de Comunidad de Madrid, Cataluña y Andalucía, han sido expuestas en Corazonea.
Desde la visión ministerial, Pilar Aparicio, responsable de Coordinación de las Estrategias de Salud del Ministerio de Sanidad, ha corroborado que “la Escav se encuentra aún en fase de implementación y hay que hacerlo de forma equitativa en todos los territorios”. Pilar Aparicio también ha abogado por “sacarle el máximo partido a los datos que generan las acciones de la estrategia, para conocer los problemas de salud de la población y cómo evolucionan”.
Respecto a la situación actual de la Escav, los participantes han destacado que presenta unos objetivos muy ambiciosos y bien valorados en Europa que, sin embargo, repercuten en su “complejidad”. Ello acarrea que, dos años después de su aprobación, sean pocas las comunidades autónomas que han iniciado la implantación de la Escav. Algunos de los factores identificados hacen referencia a la necesidad de una mayor coordinación intersectorial entre los diferentes niveles asistenciales y el gran número de especialistas a los que implica.