Redacción
El Instituto Nacional de Gestión Sanitaria (Ingesa) ha dado un importante paso en la modernización de la tecnología sanitaria del Sistema Nacional de Salud (SNS) con la formalización de los primeros siete lotes del acuerdo marco de mamógrafos, dentro del Plan de Acuerdos Marco de Alta Tecnología (AMAT-I). Esta iniciativa tiene como objetivo renovar el parque tecnológico del SNS, incrementando las capacidades diagnósticas de los centros de salud y hospitales de todo el país.
La formalización de estos siete lotes supone una inversión inicial de 5,6 millones de euros y permitirá la adquisición de 27 equipos de mamografía, con la posibilidad de ampliar la inversión hasta los 15,5 millones de euros si se completan los diez lotes previstos, lo que llevaría a la adquisición de un total de 61 mamógrafos. Los equipos están diseñados para ser respetuosos con el medio ambiente y contemplan diferentes modalidades, como la ampliación a tomosíntesis y sistemas de biopsia avanzados.
El acuerdo marco de mamógrafos forma parte de un conjunto de seis procedimientos desarrollados por el Ingesa, en colaboración con el Ministerio de Sanidad. A la fecha, se han completado casi en su totalidad cinco de los seis grupos de equipos de tecnología sanitaria previstos. Además de los mamógrafos, se han adjudicado lotes para arcos quirúrgicos, equipos portátiles de radiología y salas de radiología digital, entre otros. Estas formalizaciones permitirán a las comunidades autónomas y otras administraciones adheridas comenzar a tramitar sus contratos basados con las empresas adjudicatarias, facilitando así la adquisición de la tecnología necesaria para mejorar la atención a los pacientes.
El ahorro estimado para el SNS será de 40 millones de euros
El Plan AMAT-I, junto con el Plan Inveat, busca reducir la obsolescencia tecnológica de los equipos en el SNS, estandarizar la calidad de la tecnología utilizada y fomentar una mayor equidad en el acceso a diagnósticos precisos en todo el territorio. Gracias a la experiencia acumulada con el Plan Inveat, el Ingesa ha optimizado los procesos de adjudicación para garantizar una rápida implantación de estos equipos en los centros sanitarios.
Este esfuerzo se traduce en un ahorro significativo para el SNS. Se estima que, una vez completados los acuerdos marco, el ahorro podría alcanzar los 40 millones de euros, lo que permitirá destinar recursos a otras áreas de la sanidad pública. La adjudicación de los lotes 9 y 10, actualmente en proceso, y la formalización pendiente de los equipos de ecografía, completarán esta fase de adquisición tecnológica que está transformando el panorama sanitario del país.
Con esta iniciativa, el Ingesa no solo refuerza la capacidad diagnóstica del SNS, sino que también avanza hacia un modelo de sanidad más sostenible y homogéneo, donde la tecnología de vanguardia está al servicio de todos los ciudadanos. Esto permitirá a los profesionales sanitarios contar con herramientas de última generación para el diagnóstico y tratamiento de enfermedades, como el cáncer de mama, mejorando así los resultados de salud de la población.
El Plan Inveat
El Plan Inveat (Inversión en Equipos de Alta Tecnología), también desarrollado por el Instituto Nacional de Gestión Sanitaria (Ingesa), ha sido fundamental para la renovación del parque tecnológico del Sistema Nacional de Salud (SNS).
Con una inversión de 795 millones de euros, se ha centrado en renovar equipos esenciales como resonancias magnéticas, tomografías computarizadas y otros dispositivos de alta tecnología que habían superado los 12 años de antigüedad. Gracias a este plan, se ha logrado incorporar más de 850 nuevos equipos en hospitales de toda España, lo que ha permitido mejorar la capacidad de diagnóstico y la rapidez en la atención de enfermedades como el cáncer y enfermedades cardiovasculares. Además, el Plan Inveat busca asegurar que todos los pacientes tengan acceso a tecnología de última generación, independientemente de la comunidad autónoma en la que se encuentren, promoviendo una mayor equidad en el acceso a servicios de salud avanzados.
Esto ha mejorado de manera significativa la calidad de la atención médica en España, favoreciendo diagnósticos más precisos y accesibles para todos los ciudadanos. Además, ha contribuido a la homogeneización de los estándares de calidad en todo el territorio, garantizando que los pacientes tengan acceso a la misma tecnología de vanguardia, independientemente de su lugar de residencia.
