Pablo Malo Segura
La industria de tecnología sanitaria es un sector empresarial referente en España y motor económico y de innovación para el país. El 30º Encuentro Anual del Sector de Tecnología Sanitaria, organizado por Fenin y Esade, ha contado con la participación de Antonio Garamendi, presidente de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE), que ha destacado la importancia de la innovación y la sostenibilidad como principales motores de crecimiento en el sector de tecnología sanitaria.
Antonio Garamendi ha subrayado la necesidad de contar con un escenario político e institucional adecuado para la empresa y el desarrollo económico. “Resulta fundamental un clima de confianza, de moderación, de diálogo y entendimiento que permita que despeguen las inversiones que necesitamos, clave para garantizar el crecimiento futuro. Los empresarios queremos seguir actuando como motor del crecimiento económico y del empleo, del bienestar social y del cambio y modernización de nuestra economía”, ha destacado.
El presidente de la CEOE señaló que un desafío clave para el futuro de la tecnología sanitaria es la escasez de talento. “Nos faltan 30.000 o 40.000 técnicos de ciberseguridad, y no es algo que debamos tomar a la ligera“, comentó. Por ello, puso énfasis en la urgente necesidad de profesionales cualificados en sectores industriales y tecnológicos. Además, se refirió a la falta de ingenieros en áreas clave como la medicina y la diferencia por sexos, mencionando que “solo una de cada cuatro son mujeres y el 50% estudia medicina“. En su opinión, parte de la solución pasa por fomentar la igualdad de género en las áreas de ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas (STEM).
Garamendi resaltó la importancia de garantizar una estabilidad regulatoria para fomentar la inversión en el sector: “La confianza es la clave para que invirtamos”
Otro de los aspectos que abordó Garamendi fue la importancia de garantizar una estabilidad regulatoria para fomentar la inversión en el sector. “La confianza es la clave para que invirtamos y afrontar los retos que tenemos por delante“, enfatizó. En este sentido, abogó por políticas y regulaciones claras y consistentes que permitan a las empresas innovar y desarrollarse sin el temor de que los cambios normativos puedan afectar a sus operaciones. El presidente de CEOE también señaló que España se encuentra por debajo de la media europea en términos de contribución de la industria al PIB, con un 13% (asciende al 15% si se cuenta la energía), frente al objetivo europeo del 20%. Para Garamendi, este dato es preocupante y debe corregirse para garantizar el futuro de sectores estratégicos como el de la tecnología sanitaria.
En cuanto a la sostenibilidad y los objetivos de la Unión Europea, Garamendi se mostró optimista, pero también crítico con la falta de avances en ciertos aspectos. “España ha avanzado mucho en cuanto a energías renovables, pero todavía estamos lejos de los objetivos industriales de la UE“, indicó, subrayando la importancia de que las políticas europeas y nacionales fomenten el crecimiento de una economía industrial sostenible. Para concluir Garamendi hizo hincapié en la necesidad de que las empresas puedan generar beneficios para seguir invirtiendo y creando empleo de calidad. “Para que todo esto pase, las empresas tienen que ganar dinero”, reivindicó.
El sector de tecnología sanitaria en Europa
Los retos y desafíos del sector de tecnología sanitaria no solo se ciñen al ámbito nacional, sino que deben analizarse también en clave europea. En especial en el ámbito regulatorio y estratégico, ya que son diversas las normativas y estrategias que se están gestando en Bruselas con implicación para esta industria: salud digital, evaluación de tecnologías sanitarias, etc.
Stuart Silk: “Los desafíos sin precedentes a los que se enfrentan los sistemas sanitarios europeos exigen desarrollar soluciones innovadoras basadas en el potencial de las tecnologías sanitarias”
Stuart Silk, presidente del Board de MedTech Europe, la patronal sectorial europea, destacó que “los desafíos sin precedentes a los que se enfrentan los sistemas sanitarios europeos exigen desarrollar soluciones innovadoras basadas en el potencial de las tecnologías sanitarias”. Para ello, comentó que se necesita un entorno político que se mantenga al tanto de estas innovaciones. “Los responsables políticos europeos pueden y deben adoptar medidas importantes para preservar y apostar por la atractividad y competitividad de las innovaciones tecnológicas”, añadió.
Para Silk es fundamental la adaptabilidad de la tecnología sanitaria y tratar la inteligencia artificial (IA) como una ventaja competitiva. “Debemos mejorar el flujo de información, lo cual es crucial para la eficiencia de los sistemas sanitarios“, afirmó. En este contexto, se refirió a los problemas globales relacionados con la escasez de personal sanitario.
“El gran desafío es no solo hablar de precio o coste, sino del valor que puede traer la tecnología sanitaria”, afirma el presidente del Board de MedTech Europe
Por otro lado, reflexionó sobre cómo traer nuevas tecnologías e innovación de forma más rápida y eficaz al mercado europeo. “La tecnología sanitaria desarrollada en Europa a menudo se lanza primero en Estados Unidos. A veces, el marcado CE tarda entre tres y cinco años“, indicó Silk. MedTech Europe y Fenin están trabajando para agilizar este proceso y ayudar a minimizar las listas de espera. “El gran desafío es no solo hablar de precio o coste, sino del valor que puede traer la tecnología sanitaria“, aseguró.
El presidente del Board de MedTech Europe también habló sobre patentes e innovación. “Cada 30 minutos se presenta una nueva patente. En 2023, hubo más de 15.900 solicitudes“, destacó Silk. Sin embargo, señaló que la gran cuestión es cómo llevar esa innovación al mercado de manera más ágil, protegiendo al paciente y asegurando que los nuevos productos lleguen rápidamente al sistema de salud europeo. “Tenemos una oportunidad enorme por delante para cambiar el rumbo y ser una región líder en la inversión en tecnología sanitaria y traer innovación que tenga un impacto directo en la vida de los pacientes”, concluyó.