Paula Baena (León)
El sistema sanitario español está altamente digitalizado, pero solo el 1,26% del presupuesto total de sanidad está destinado a Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC). “Cuando cae el sistema de un hospital, todo se paraliza. No se pueden realizar pruebas diagnósticas, ni electrocardiogramas, ni siquiera emitir recetas”, ha explicado Carlos Gallego, director de Transformación Digital en Salud en la Fundació TIC Salut Social y Coordinador General del Comité Técnico de IA en la Sociedad Española de Informática de la Salud (SEIS), durante la tercera edición del seminario Diálogos MSD Inventing for Life, ‘El valor del dato en la investigación biomédica y científica’.
La jornada, que ha reunido en León a diferentes expertos, ha debatido el papel estratégico de los datos en el ámbito sanitario y ha evidenciado la fragilidad tecnológica del sistema sanitario español, que deriva un escaso presupuesto a las TIC.
La primera mesa, ‘El dato y su papel fundamental en la cadena de valor’, moderada por Francisco Martínez del Cerro, responsable de Relaciones Externas de la SEIS, ha expuesto la percepción de los datos sanitarios como “el petróleo del futuro”. Sin embargo, como ha señalado Dolores Ruiz, miembro de la Junta Ejecutiva de la SEIS, este “petróleo” necesita ser refinado y gestionado con excelencia.
Dolores Ruiz: “No hay información si no hay datos de valor”
“No hay información si no hay datos de valor”, ha incidido la experta. Así, ha señalado que los datos son la base de la toma de decisiones clínicas, la gestión hospitalaria y las estrategias de salud pública, pero su valor depende directamente de su calidad, consistencia y accesibilidad.
Además, Ruiz ha recordado que la importancia de la calidad del dato no es exclusiva de la era digital. “Cuando las historias clínicas eran en papel, ya era crucial que los registros fueran precisos y completos”, ha explicado. La digitalización ha ampliado las posibilidades al permitir analizar grandes volúmenes de información, pero no soluciona automáticamente los problemas asociados a la calidad y gobernanza de los datos, según han señalado los especialistas.
La historia clínica resumida y la receta electrónica, grandes avances logrados en interoperabilidad
A pesar de los avances logrados en interoperabilidad, como la historia clínica resumida y la receta electrónica, que permiten compartir información entre distintas comunidades autónomas, persisten grandes desafíos. Uno de ellos es la fragmentación de los datos en silos. Paula Ramírez, associate director de Government Affairs en MSD España, ha destacado que la falta de integración limita el potencial de los datos para la investigación y la toma de decisiones. “No sirve de nada tener 10 millones de registros de glucosa si no sabemos cuándo y por qué se tomaron esas mediciones, o si no están asociadas a las comorbilidades del paciente”, ha explicado Ramírez.
Además, la baja inversión en TIC afecta directamente la capacidad de los sistemas para procesar, almacenar y analizar datos. Carlos Gallego ha advertido que este déficit presupuestario también limita la capacidad del sistema público para competir por profesionales altamente cualificados, como analistas de datos o expertos en inteligencia artificial, cuyo mercado está dominado por el sector privado debido a las mayores retribuciones.