Fátima Del Reino Iniesta
La enfermedad pulmonar obstructiva crónica (epoc), que afecta a tres millones de personas en España, supone un desafío creciente para el sistema sanitario, con un impacto económico superior a los 3.000 millones de euros anuales. La fisioterapia es uno de los mayores aliados en la lucha contra esta enfermedad ya que los pacientes que incluyen esta terapia en su rutina evolucionan mejor que aquellos que nunca la practican. “Es la gran demanda en el tratamiento de la epoc“, afirmó Mariano Pastor, presidente de la Federación Española de Asociaciones de Pacientes Alérgicos y con Enfermedades Respiratorias (Fenaer) en una entrevista concedida a iSanidad durante la presentación de la campaña Pulmones que laten organizada por AstraZeneca.
Esta terapia no farmacológica mejora la evolución de los pacientes, reduce exacerbaciones y alivia la carga del sistema sanitario
Este enfoque, complementario al tratamiento farmacológico, no solo mejora la calidad de vida del paciente, sino que también reduce complicaciones y la presión sobre los recursos sanitarios. La fisioterapia aplicada a pacientes con epoc tiene como objetico optimizar la función respiratoria y el bienestar general.
El enfoque tradicional del tratamiento de la epoc, centrado en medicamentos y control de síntomas, debe ampliarse para integrar a los fisioterapeutas como parte de equipos multidisciplinares. Pastor insistió en que la falta de coordinación entre atención primaria, especializada y enfermería ya supone un reto; sin embargo, incorporar la fisioterapia sistemáticamente podría transformar el panorama actual.
“Un paciente bien tratado y con acceso a fisioterapia tiene menos hospitalizaciones y complicaciones graves”
“Un paciente bien tratado y con acceso a fisioterapia tiene menos hospitalizaciones y complicaciones graves. Esto beneficia tanto al sistema sanitario como al paciente“, señaló. La inversión en fisioterapia se traduce en ahorro a largo plazo, al reducir los costes asociados con tratamientos intensivos y recaídas.
La fisioterapia respiratoria es una herramienta subestimada en la lucha contra la epoc. Sus beneficios en la evolución de los pacientes y la reducción de costes sanitarios la convierten en una inversión imprescindible. Mariano Pastor dejó claro que integrar este enfoque en los sistemas asistenciales no solo mejorará la vida de los pacientes, sino que también aliviará la sobrecarga del sistema de salud.
“Hay una parte de los pacientes que padecen enfermedad mental como consecuencia de la epoc y es algo que normalmente no se tiene en cuenta”
Para los médicos y profesionales sanitarios, la fisioterapia debería dejar de ser una opción secundaria para convertirse en un estándar de atención en el manejo de la epoc. Apostar por un tratamiento completo, humanizado y multidisciplinar es la dirección adecuada hacia un mejor control de esta enfermedad crónica.
Además, el presidente de Fenaer destacó la importancia de ofrecer apoyo psicológico y emocional para estos pacientes. “Hay una parte de los pacientes que padecen enfermedad mental como consecuencia de la epoc y es algo que normalmente no se tiene en cuenta”.
Educación y adherencia
Junto con la falta de acceso a programas de fisioterapia, otro desafío clave es la concienciación de los pacientes sobre la importancia de mantener su tratamiento incluso cuando los síntomas remiten. “Es fundamental concienciar al paciente de la importancia de mantener el tratamiento incluso cuando se siente bien o está asintomático, ya que la enfermedad persiste y requiere manejo continuo. La educación y la sensibilización juegan un papel clave en este aspecto”, subrayó Pastor.
“Es fundamental concienciar al paciente de la importancia de mantener el tratamiento incluso cuando se siente bien o está asintomático, ya que la enfermedad persiste y requiere manejo continuo”
En este sentido, la educación sanitaria, apoyada por enfermería y médicos, es esencial para garantizar que los pacientes comprendan que la epoc no desaparece, aunque se sientan mejor temporalmente. Además, simplificar los tratamientos, “haciéndolos más fáciles de usar”, favorece la adherencia del paciente.
“Al prescribir, es esencial tener en cuenta tanto el criterio clínico como las preferencias del paciente, ya que, cuando el dispositivo, como un inhalador, se elige de forma conjunta entre médico y paciente, la adherencia tiende a ser significativamente mayor”, concluyó.