Juan León García
“Nos preocupa la falta de adherencia. Nuestros tratamientos son a largo plazo, y para que sean eficaces hay que tomarlos, al menos, durante seis meses o un año”, ha advertido este miércoles la Dra. Marina Diaz Marsá, presidenta Sociedad Española de Psiquiatría y Salud Mental (Sepsm). La especialista ha participado en la presentación de la campaña ‘Prevención y actuación farmacéutica en salud mental desde la farmacia comunitaria’ impulsada por el Consejo General de Colegios Oficiales de Farmacéuticos (Cgcof). Precisamente, desde el órgano colegial refrendan esta tesis: “Uno de los principales problemas de estos pacientes es el abandono de los tratamientos”, ha coincidido su tesorera, Rita de la Plaza.
Según la propia sociedad científica, la mitad de los pacientes bajo tratamiento por depresión tiene falta de adherencia. Algo que también pasa en personas diagnosticadas con psicosis, ha añadido la Dra. Diaz. Un hecho que, si ya es perjudicial en cualquier circunstancia, en terapias a largo plazo como son las que hacen frente a trastornos mentales (pueden extenderse entre 1 y 5 años tras el primer episodio) agravan la condición de estos pacientes, tanto mental como física.
Por lo tanto, resume, “la adherencia es fundamental para la prevención de recaídas”. Además de que los efectos secundarios en estos tratamientos son “mínimos” y la administración es “fácil”, dos características que deberían influir en un mejor cumplimiento de las terapias. En este punto, la figura del farmacéutico también es clave a la hora de fomentar reducir ese abandono.
La campaña del Cgcof tiene como principal objetivo la mejora de la calidad de vida de los pacientes con patologías mentales
La campaña, que cuenta con la colaboración de Boehringer Ingelheim, promoverá el pilotaje de un servicio de educación sanitaria en 300 farmacias rurales con dos sesiones centradas en la adherencia y el manejo del paciente con patología mental, para cuidadores.
El principal objetivo, ha destacado la tesorera del Cgcof, es buscar “una mejora en la calidad de vida” de los pacientes con problemas de salud mental. El farmacéutico lo puede hacer gracias a la asiduidad con la que contacta con pacientes mentales.
Tal y como ha recordado, el presidente del Cgcof, Jesús Aguilar, ya trasladó hace unos días ante la Comisión de Sanidad del Senado la necesidad de avanzar en los aspectos que ahora recoge la iniciativa. “Los farmacéuticos y las farmacias estamos convencidos de que podemos desempeñar un papel más destacado en el ámbito de la salud mental, y particularmente en la prevención del suicidio, si contamos con la voluntad política, integrando a la red de farmacias en las estrategias y programas”, analizó.
La Dra. Diaz ha completado que 3.952 personas cometieron suicidio en 2023, una señal de “alerta” sobre la necesidad de detectar y prevenir los problemas de salud mental en la población. De este dato, el 90% de esas conductas suicidas están asociadas a una enfermedad mental.
Con todo, la Sepsm ha lamentado además la falta de profesionales: España cuenta con una media de 10 psiquiatras por cada 100.000 habitantes por los 18 por cada 100.000 que se registran en el resto de Europa.
El alcance de las redes sociales
Como embajador de esta campaña, el farmacéutico, divulgador sanitario y paciente con TDAH, Guillermo Martín (@Farmaenfurecida), ha apreciado una mejora a la hora de visibilizar estos problemas de salud mental. Sobre todo, por parte de las nuevas generaciones: “Ahora se ha normalizado ir al psicólogo”, ha ejemplificado.
La gente joven, hoy, “se anima a contar sus problemas y reflexionar sobre ellos”. En especial, uno que impacta de lleno sobre la generación digital, como es a soledad no deseada, que en personas con trastornos mentales “es un agravante”.
De ahí que el hacerse eco de esta iniciativa desde su cuenta de Instagram, en la que roza el medio millón de seguidores, permitirá “alcanzar a gente más joven que se ve afectada por trastornos mentales”. En definitiva: “Campañas que salvan vidas”.
