Redacción
Sumar al tratamiento estándar de pacientes con enfermedad renal crónica (ERC) el fármaco dapagliflozina permitiría reducir en tres años la frecuencia de de la progresión a fallo renal en un 33%, la hospitalización por insuficiencia cardiaca en un 49% y la lesión renal aguda en un 29%. Eso en cuanto a su impacto clínico en los pacientes. Si se tiene en cuenta la reducción de estas complicaciones, el ahorro que supodría al sistema sería de 158 millones de euros por cada 100.000 pacientes con esta patología que reciban el tratamiento en un periodo de tres años.
Son las cifras que arroja un estudio llevado a cabo por diez especialistas de diferentes hospitales y centros sanitarios españoles que forman parte del programa Inside CKD, un proyecto internacional que analiza la prevalencia de la enfermedad renal crónica, proyecta la carga global de la enfermedad por edad, categoría G, comorbilidad y complicaciones en 31 países, incluyendo España. Sus resultados se han publicado en la revista Nefrología.
El ahorro asociado a la reducción de eventos adversos de la enfermedad renal crónica sería de 258 millones de euros, restando el coste farmacológico de dapagliflozina, el ahorro neto alcanza los 158 millones
El estudio, que se presentó en el reciente Congreso Nacional de la Sociedad Española de Nefrología (S.E.N.) y el XI Congreso Iberoamericano de Nefrología e Hipertensión, viene a sumarse a la evidencia que han mostrado anteriormente otros estudios que ya había confirmado que el uso de los inhibidores del cotransportador de sodio glucosa 2 (SGLT2), como dapagliflozina o empagliflozina no solo reduce los niveles de glucosa en personas con diabetes tipo 2, sino que proporciona beneficios cardiovasculares y reduce la mortalidad. Además, añade el factor económico.
El ahorro estimado asociado a esta reducción de eventos sería de 258 millones de euros por cada 100.000 pacientes, de los cuales el 63,4% de ellos correspondería a evitar la diálisis en el fallo renal. Pero, teniendo en cuenta los costes de estos eventos y los costes farmacológicos del tratamiento con dapagliflozina, el ahorro total neto se estimaría finalmente en 158 millones de euros por cada 100.000 pacientes.
Las hospitalizaciones por insuficiencia cardíaca se reducirían a la mitad en los pacientes con enfermedad renal crónica tratados con dapagliflozina en tres
El estudio empleó un modelo de compensación de costes que comparó los costes de los eventos clínicos y farmacológicos por cada 100.000 personas con ERC de una cohorte virtual tratada con dapagliflozina añadida a la terapia estándar con iSRAA, frente a la terapia estándar con iSRAA sola. Durante el estudio se evaluaron eventos renales, cardiovasculares y mortalidad por cualquier causa. La incidencia de los eventos clínicos por tratamiento se obtuvo del estudio DAPA-CKD y los costes a partir de bases de datos y literatura nacional.
Para los autores del estudio, el retraso de la progresión de la ERC y la reducción de la aparición de eventos clínicos gracias al tratamiento con dapagliflozina beneficiaría de manera importante al paciente, retrasando el desarrollo de la enfermedad y mejorando su calidad de vida, y generaría un considerable ahorro para el Sistema Nacional de Salud, incluso teniendo en cuenta el coste incremental del tratamiento farmacológico con este medicamento.
Un segundo estudio español ha demostrado que la utilización de empagliflozina supondría un ahorro de 8.125 euros por paciente
No es el único estudio de análisis económico sobre este tipo de fármacos. Un segundo estudio español ha demostrado que la utilización de empagliflozina, otro de los medicamentos de la familia iSGLT2, también mejora los resultados en salud y calidad de vida de los pacientes con enfermedad renal crónica y disminuiría los costes y recursos sanitarios destinados a los tratamientos de estos pacientes. En concreto, supondría un ahorro en costes de 8.125 euros por paciente debido al retraso en la necesidad de tratamiento renal sustitutivo, diálisis o trasplante, para los pacientes.
Este estudio realizó un análisis económico del ensayo clínico EMPA-Kidney, en el que se compara el uso de empagliflozina unido al tratamiento estándar de los pacientes con enfermedad renal crónica, frente al tratamiento estándar sólo. El estudio desarrolló un modelo de coste-efectividad para reproducir la historia natural de la ERC, permitiendo relacionar los resultados en salud con los costes asociados a empagliflozina en pacientes de este ensayo clínico.
Los resultados demostraron que se retrasaba la necesidad de diálisis o trasplante para los pacientes
Los resultados demostraron, en el caso del uso de la empagliflozina en el tratamiento, un enlentecimiento de la progresión de la ERC, con menos tiempo en estadios más avanzados de la enfermedad, y la reducción del riesgo de mortalidad cardiovascular, además de un incremento en la supervivencia evaluados en años de vida ganados (AVG) y años de vida ajustado por calidad de vida (AVAC). El análisis concluyó que empagliflozina, añadida al tratamiento estándar, es una opción terapéutica dominante para el tratamiento de la ERC frente a tratamiento estándar solo, ocasionando menor coste y mayor cantidad y calidad de vida.