Redacción
La Confederación Española de Sindicatos Médicos (CESM) ha emitido un comunicado en el que expresa «preocupación» por la posibilidad de que el Ministerio de Sanidad justifique un retraso en la incorporación de las plazas MIR de la especialidad de medicina de urgencias y emergencias por la suspensión cautelar dictada por el Tribunal Supremo. Un dictamen que suspendía la resolución y emisión de títulos de especialistas a profesionales que acrediten experiencia suficiente en urgencias y emergencias.
El sindicato teme que Sanidad se ampare en esto para no incluir las plazas en la próxima convocatoria. Aunque la ministra de Sanidad ya dijo, antes de que el Supremo dictara la cautelar, que la incorporación de los primeros MIR de la especialidad no llegaría hasta la convocatoria 2026-27.
CEMS señala que Sanidad puede justificar el retraso en la implantación de la especialidad de urgencias por la suspensión cautelar de la emisión de títulos de especialistas por la vía extraordinaria
CEMS asegura que desde el Ministerio sostienen que mientras esté en vigor esta suspensión no podrán nombrarse tutores para las Unidades Docentes correspondientes, tal como establece el artículo 11.5 del Real Decreto 183/2008. Sin embargo, la confederación de sindicatos afirman que este argumento «carece de fundamento». Señalan la Disposición Adicional Primera del Real Decreto 610/2024 por el que se crea la especialidad, que permite sustituir los requisitos del artículo 11.5 por experiencia acreditada en el ámbito profesional de la nueva especialidad.
La Confederación defiende que actualmente no existe ningún obstáculo legal para nombrar a los tutores necesarios y comenzar el proceso de acreditación de las unidades docentes, lo que permitiría iniciar la formación de especialistas en MUE cuanto antes. Para el sindicato, retrasar este proceso supondría posponer, al menos hasta la convocatoria 2026/2027, la inclusión de plazas para esta especialidad en el sistema de Formación Sanitaria Especializada. Pero Sanidad ya contaba con esa fecha para ofertar las primeras plazas MIR, así lo expresó la propia Mónica García en rueda de prensa el pasado octubre.
CESM defiende que no existe ningún obstáculo legal para nombrar a los tutores necesarios y comenzar la acreditación de las unidades docentes para implantar cuanto antes la especialidad de urgencias y emergencia
CESM advierte de que mantener esta situación podría fomentar que profesionales que finalicen su formación en medicina de familia y comunitaria opten por trabajar en servicios de urgencias o emergencias con el objetivo de lograr la doble especialidad a través de la vía extraordinaria, dejando vacantes plazas de atención primaria. La confederación sindical termina su comunicado urgiendo al Ministerio «a acelerar los trámites necesarios tanto para la acreditación de Unidades Docentes en MUE como para dictar las instrucciones que corresponda para que los distintos Servicios de Salud puedan ir acreditando a los tutores de esta especialidad», concluyen.