Rosa Fuster se ha dejado grabar quitando carteles de la candidatura contraria a la suya. Acompañada de Amparo Ramón, miembro de su candidatura, Fuster ha ido quitando unos carteles que “le molestaban”. Tanto le duele que hagan publicidad electoral los demás que ha amenazado a los trabajadores diciendo que “esto está prohibido y va a venir un guardia de seguridad ahora mismo”, sin comente asumir que ella no es autoridad competente en materia electoral, sino parte parcial y muy interesada.
La propia Fuster, que probablemente desconoce que la Ley Orgánica 5/1985, de 19 de junio, del Régimen Electoral General, artículos 53 y siguientes, dice que quitar carteles supone no respetar el régimen de publicidad electoral. Esta ley establece que:
1. “Serán castigados con la pena de prisión de tres meses a un año o la de multa de seis a veinticuatro meses quienes lleven acabo alguno de los actos siguientes:
a) Realizar actos de propaganda una vez finalizado el plazo de la campaña electoral.
b) Infringir las normas legales en materia de carteles electorales y espacios reservados de los mismos, así como las normas relativas a las reuniones y otros actos públicos de propaganda electoral.
2. Serán castigados con las penas de prisión de seis meses a dos años y la de multa de seis meses a una año los miembros en activo de las Fuerzas Armadas y Seguridad del Estado, de las Policías de las Comunidades Autónomas y Locales, los Jueces, Magistrados y Fiscales y los miembros de las Juntas Electorales que difundan propaganda electoral o lleven a cabo otras actividades de campaña electoral.”
Ahora bien, las elecciones al Colegio de Médicos de Valencia no se regulan por esta Ley, lo que impide que se pueda denunciar ese comportamiento pero no lo hace menos reprobable y de hecho supone una vulneración de las reglas democráticas de las elecciones.
La Junta Electoral incluso podría actuar de oficio y reprobar públicamente la actitud de Rosa Fuster o incluso anular su candidatura porque se ha saltado casi todas las normas posibles: ha amenazado a la otra candidata, ha quitado los carteles de la otra candidata, ha recogido votos por correo de manera fraudulenta, se ha erigido como autoridad electoral, ha utilizado los recursos del colegio para su propia candidatura… ¿de verdad esta persona puede representar a los médicos de Valencia?
..Alfonso González
