Especial RSC & Sostenibilidad iSanidad 2025
En el año 2019, Bayer reformuló sus objetivos en lo relativo a la sostenibilidad. La compañía ha invertido en España 569 millones de euros desde ese momento, destinados a impulsar un modelo de agricultura regenerativa, así como al desarrollo de la innovación en salud la descarbonización de su actividad en salud y a lo largo de la cadena de valor.
Todo ello, afirman desde la compañía, ha sido crucial para el progreso de la organización en este ámbito y parte esencial en la transformación de sus áreas de actividad. Así queda plasmado en la actualización de su informe de impacto en el país, que reúne todos los avances logrados en materia de protección medioambiental y, también, los relativos al impulso de la acción social y educativa dentro de la misma.
Con la recopilación de estos logros en el informe, además, desde Bayer se persigue vincular de manera estratégica su apuesta por la sostenibilidad a sus esfuerzos en innovación, competitividad, talento y fortalecimiento del potencial científico en el país.
Parte de la inversión orientada a la mejora de la sostenibilidad se ha destinado al desarrollo de la innovación en las áreas en las que la compañía opera, así como a la mejora de sus infraestructuras. Con ello, además, se ha incrementado la capacidad productiva de I+D de la compañía y la digitalización de los procesos para ser más eficientes y reducir el impacto medioambiental.
La actualización del informe de impacto recoge los hitos alcanzados desde que en 2019 Bayer reformulase sus objetivos de sostenibilidad
Jordi Sánchez, CEO de Bayer en España y Portugal, se muestra satisfecho con estos avances. “No se me ocurre mejor manera de celebrar el año de nuestro 125 aniversario en el país que con este progreso que valida nuestro compromiso con el presente, pero también con un futuro” indica Sánchez. Asimismo, añade, “la transformación de nuestra actividad es clave para el avance de todos y la necesaria protección de los recursos naturales del planeta”.
Por ello, para Sánchez, “este informe que ahora se presenta no solo documenta nuestro avance, sino que inspira un camino hacia adelante, resaltando las oportunidades que surgen al evolucionar juntos impulsando la competitividad estratégica y la capacidad del país para aportar a la innovación también en este sentido”.
Los avances en sostenibilidad, en datos
Del informe presentado por Bayer se extraen varios datos que reflejan estos avances. Entre ellos, que la compañía en España ha logrado reducir un 38% sus emisiones absolutas de gases de efecto invernadero desde 2019, y un 68% si se evalúa únicamente su actividad propia.
Uno de los hitos que resaltan desde la compañía es que, en 2024, se anunció se alcanzó la descarbonización de la planta de La Felguera, en Asturias, para el año 2026. Esta planta es muy relevante para la actividad de Bayer puesto que es la encargada de producir el ácido acetilsalicílico de la compañía para todo el mundo. Cabe destacar que este centro es el primero en el sector que consigue este logro en el país, también gracias al acuerdo de la compañía con Iberdrola para desarrollar la innovación necesaria que permitiera cubrir las necesidades de vapor del centro con energías que fueran 100% renovables.
En concreto, la instalación consta de un sistema innovador de almacenamiento térmico transformará la electricidad 100% renovable proveniente de una instalación de autoconsumo adyacente y de sus diferentes plantas renovables en el vapor que Bayer necesita para desarrollar su actividad. Así, se sientan los cimientos del primer contrato de venta de calor de estas características en España (HPA en sus siglas en inglés). En la consecución de este logro también se ha contado con el respaldo del Instituto de Transición Justa y el PERTE de descarbonización, que ha contribuido con 17 millones de euros necesarios para el desarrollo del proyecto.
Desde la compañía destacan que la planta de la Felguera (Asturias) acometió su proceso de descarbonización en 2024
Otro de los avances destacados en este avance de Bayer ha sido la reciente certificación de la primera metodología para medir la huella de carbono de productos farmacéuticos, validada por TÜV Rheinland bajo el estándar ISO 14067. Con ella, es posible medir toda la cadena de suministro y las emisiones de CO2 generadas en el proceso productivo. El centro asturiano de la Felguera también ha participado en este logro.
Por otra parte, de cara a completar la cadena de valor y el análisis del ciclo de vida de sus productos, la compañía ha suscrito un acuerdo para la gestión selectiva de residuos con el Grupo Llorens. Con este, se recuperará la totalidad de los materiales residuales para reintroducirlos en procesos productivos. Esta acción ya ha comenzado a dar sus frutos y sólo en 2024 se gestionaron más de 14 toneladas de residuos con esta nueva metodología, a la que se irá sumando un mayor volumen según avance en el tiempo.
Transformación del modelo de agricultura
En este contexto de avance hacia la sostenibilidad, la agricultura regenerativa puede jugar un papel clave. Aquí, con la pretensión de ayudar a producir más alimentos con menos recursos naturales y al mismo tiempo que se reduce el impacto medioambiental, la compañía se erige como agente que contribuye a esta transformación gracias a sus aportaciones en la investigación de nuevas semillas, digitalización de la actividad y acompañamiento al agricultor.
En este sentido, los datos revelan que en 2024 la compañía destinó 25 millones de euros para el desarrollo de la actividad de I+D de sus centros del sur, poniendo a disposición de los agricultores un nuevo sistema para el cultivo maíz denominado Preceon. Este combina una nueva generación de híbridos de maíz de baja estatura con FieldView, una herramienta digital que contribuye a mejorar el rendimiento de las cosechas y, a su vez, optimiza la gestión de los recursos.
La apuesta de Bayer por la agricultura regenerativa refuerza su compromiso en el avance hacia la sostenibilidad
Asimismo, la compañía impulsa diversas iniciativas orientadas a preservar la biodiversidad en diferentes zonas. Uno de estos proyectos se denomina Dionisio y se realiza junto a la asociación agraria ARAG-ASAJA y la ONG Grefa, la cual tiene el foco en el medioambiente y que trabaja desde hace dos años en este objetivo promoviendo buenas prácticas agrícolas sostenibles.
Otra colaboración en este sentido es la que lleva a cabo Bayer con Novamont para realizar una mejor gestión de los residuos agrícolas gracias al desarrollo de bioplásticos compostables. En el marco de esta acción, en 2024 se llevó a cabo un estudio experimental en los invernaderos de El Ejido, en Almería, evaluando el rendimiento de más de 1.300.000 metros lineales de rafia y 180.000 clips fabricados con el bioplástico compostable Mater-Bi. Ya se conocen los resultados de este proyecto de los que se desprende que los materiales cumplen con todos los requisitos técnicos necesarios y que, además, pueden ser procesados junto con restos vegetales para genera compost de alta calidad que no haya presencia de microplásticos.
Educación y acción social
Más allá de las acciones en el ámbito medioambiental, desde Bayer también tienen en curso varios proyectos en otras áreas con impacto social en España. Estas se articulan en torno a ejes como el refuerzo del talento especializado y la promoción del interés por la ciencia de las nuevas generaciones, dentro de su apuesta por el progreso sostenible.
Siguiendo este hilo, desde Bayer han impulsado programas educativos como Cuestión de Ciencia y Baylab, con los que aspiran a fomentar el pensamiento crítico, el interés por las disciplinas STEM y reforzar el vínculo entre ciencia y sociedad, tratando de acercar el conocimiento a estudiantes, docentes y comunidades educativas de diferentes territorios de España.
Asimismo, en términos de acción social, en 2024 la corporación realizó donaciones que ascienden a más de 225.000 euros. Y, con el foco en la actualidad y teniendo en cuenta el impacto, se incluye una dotación excepcional de 100.000 euros para la recuperación de los afectados por la DANA.
En el contexto de acción social, Bayer cuenta con programas formativos y de voluntariado y en 2024 destinó una partida a la recuperación tras la DANA
En otras áreas, destacan medidas como el programa de voluntariado corporativo. De hecho, en 2024 esta acción se reforzó gracias a la aprobación de ocho horas de permiso anual retribuido para cada empleado. Y las pruebas certifican su impacto positivo ya que, en cómputo total, los trabajadores han dedicado más de 2.000 horas a causas sociales a través de iniciativas como GreenVolunteers para acciones climáticas, la donación de equipos informáticos para centros escolares afectados por la DANA, y un plan de sensibilización sobre la soledad no deseada junto a la Fundación Sant Joan de Déu.
Así, con todas las acciones que desde Bayer organizan e impulsan tanto en sostenibilidad como en el plano social, pretenden contribuir a una transformación global de la compañía en la que la responsabilidad social juega un papel cada vez más protagonista.











