Una vez que han pasado el periodo de entre dos y cinco días de riesgo de contagio de la difteria, tras el caso del niño de 6 años infectado en Cataluña, las autoridades descartan que puedan aparecer más casos, aunque han mantenido la alerta y las medidas preventivas durante todo el fin de semana.
Desde la Agencia de Salud Pública de Cataluña, su director Antoni Mateu, mantienen abierta la investigación epidemiológica, pero en declaraciones. Agencia EFE reconoce que “será difícil encontrar el origen del contagio” y de momento “se están haciendo frotis de faringe“.
Por otro lado también asegura que se han investigado a “todas las personas que tuvieron contacto con el menor” hasta el punto de que han llegado a revacunar a algunas de ellas. Incluso en la piscina de Torelló que frecuentaba el menor han llevado a cabo medidas profilácticas.
Mateu ha explicado que “van pasando los días desde que el niño ingresó y deja de ser posible que él haya sido un foco de infección” y haya contagiado a alguien, por lo que descartan posibles nuevos casos. En principio parece que la persona que pudo contagiar al menor es portador de una “bacteria asintomática“, es decir, podría infectar, pero no mostraría los síntomas de la enfermedad.
Los grupos antivacunas mantinen la postura
En diversas declaraciones los padres del niño infectado han reconocido que han sido “engañados” por los grupos antivacunas “porque no estaban bien informados“. Tienen un profundo sentimiento de culpabilidad que les intentamos quitar”, ha explicado Mateu.
Aprovechando la situación ha insistido en que “no hay discusión posible con el tema de la eficacia de las vacunas“, a la vez que ha recordado que “hablamos de difteria, pero no hay experiencia, nos encontramos en una situación nueva perfectamente evitable” porque el último caso de contagio de difteria en España fue hace 28 años.
Sin embargo la Liga por la Libertad de Vacunación ha insistido a las familias a “continuar ejerciendo su derecho a decidir, informada y libremente” y ha recordado que en la composición de la Vacuna de la Difteria hay difteria, tétanos, tosferina, haemophilus, polio, aluminio ‐500 microgramos‐, fenoxietanol, trazas de thiomersal ó mercurio ‐50 microgramos‐ y polisorbato ‐80 microgramos‐ (Ficha Técnica INFANRIX. Lab GlaxoSmit Klaine. 2011 / Ficha Técnica PENTAVAX. Lab.Sanofi PasteurMSD. 2012). “Quiere esto decir que además de difteria están presentes otras vacunas y componentes tóxicos de alta capacidad lesiva para el organismo vacunado. Entre los efectos adversos posibles de las vacuna de la difteria se contemplan la muerte postvacunal (1 muerte por cada 2.000.000 dosis administradas), reacciones de hipersensibilidad inmunitaria, lesiones neurológicas o encepalopatía postvacunal, nefropatías o lesiones renales (1 persona por cada 1.000‐10.000 dosis administradas)“. Y ha recordado que “ la aparición de una persona afectada de difteria no significa que estemos en epidemia y que la vacuna resuelva la situación, sino que estamos actualmente viviendo una infección que no se presentaba hace tres décadas“.
..Alfonso González