En el año 2000, el Institute of Medicine de Estados Unidos saltó a la primera plana tras publicar el ya antológico informe Errar es humano (To err is human), un reporte sobre la prevalencia y consecuencias de los errores médicos que arrojaba un dato escalofriante:#los eventos adversos producían en Estados Unidos cada año más muertes que los accidentes de tráfico. Ahora, y como complemento a ese informe, ha hecho público un análisis sobre uno de los tipos de incidentes que, si bien no muy frecuente, sí con posibilidad de tener consecuencias funestas:#el error diagnóstico. Según el trabajo, “los errores de diagnóstico pueden causar daño a los pacientes por retrasar el tratamiento adecuado, aplicar un tratamiento innecesario e incluso dañino y provocar consecuencias psicológicas y económicas”. En este sentido, Lluís Bohígas, director de Relaciones Institucionales de Roche Diagnostics, considera la imprecisión diagnóstica como uno de los eventos adversos más peligrosos, dado que “un error en el medicamento o en un acto quirúrgico puede ser fatal, pero un error en el diagnóstico producirá una serie de intervenciones sanitarias completamente inútiles que pondrán en juego la vida del paciente y supondrán un completo desperdicio de recursos”. (Diario Médico)