Publicado en Con Salud La falta de expectativas cumplidas, darse cuenta de que hay especialidades que encajan más con su perfil, o tener problemas con sus compañeros en el servicio, son algunos motivos que pueden empujar a los nuevos médicos residentes, que estos días comienzan a trabajar en los hospitales españoles, a abandonar la plaza elegida y buscar otra especialidad. La mayoría de quienes lo hacen (según los últimos datos de Sanidad, aproximadamente un 11% de los residentes) tienden a renunciar a su plaza para volver a presentarse al examen MIR, asumiendo el largo proceso selectivo que supone. No obstante, y aunque en principio, una vez elegido un hospital y una especialidad, los médicos no pueden cambiarse a otra durante los cuatro o cinco años que dura su formación, la legislación sí contempla unos “casos excepcionales” para poder cambiarse a otra especialidad médica sin necesidad de volver a hacer el examen.