Publicado en ABC Altos funcionarios del servicio de sanidad británico, el NHS, han anunciado que se pedirá el pasaporte a los pacientes, o de lo contrario no serán atendidos. El NHS requerirá «dos formas de identificación» para acceder a atender al público, por ejemplo, acreditar una dirección en el Reino Unido y el pasaporte. Mientras permanezca en la UE, que como mínimo será dos años más, el Reino Unido está obligado a atender a los comunitarios, del mismo modo que los británicos reciben asistencia médica en Europa, como bien sabe, por ejemplo, la nutrida colonia de pensionistas ingleses que residen en España y disfrutan de su sanidad.