..Cristina Cebrián.
El desarrollo de resistencias bacterianas ante el consumo de antibióticos es uno de los principales problemas de salud pública en la actualidad. De hecho la Organización Mundial de la Salud (OMS) lo declara como “emergencia en el mundo” y una amenaza creciente para la salud pública. En esa lucha y gracias a la investigación, aparecen datos positivos como ocurre en el primer Informe JIACRA-España, desarrollado en el marco del Plan Nacional frente a la Resistencia a los Antibióticos (PRAN).
El estudio señala que existe una relación positiva entre la cantidad de antibióticos utilizados en personas y animales y el desarrollo de resistencia en las bacterias de ambos
Aunque se aprecia un aumento en el consumo de antibióticos en el ámbito hospitalario, del 9,5% desde 2012, el estudio señala que existe una relación positiva entre la cantidad de antibióticos utilizados en personas y animales y el desarrollo de resistencia en las bacterias de ambos, tras analizar cifras de consumo entre 2012 y 2016 y los porcentajes de resistencia a éstos. Además, aunque en menor grado, hay una relación positiva entre el uso de antibióticos en animales y la tasa de resistencia en bacterias de origen humano. Un total de 18 expertos de nueve instituciones diferentes han participado en este estudio cuya finalidad es obtener nuevos datos que contribuyan a mejorar las medidas frente al problema de la resistencia bacteriana.
Uso de antibióticos en Atención Primaria
Dentro del informe JIACRA-España se recogen las últimas tendencias de consumo de antibióticos de ámbito nacional, incluyendo Atención Primaria, una estimación del consumo hospitalario y la suma total de ventas de antibióticos de uso veterinario. En lo que se refiere a la Atención Primaria y teniendo en cuenta los datos del año 2016, los antibióticos más utilizados pertenecen a las familias de los betalactámicos (64,09%), los macrólidos (10,47%) y las quinolonas (10,54%), mientras que los más usados en medicina veterinaria son las tetraciclinas (45,35%), seguidas de los betalactámicos (35,67%) y las polimixinas (8,5%).
En los últimos tres años, el consumo total de antibióticos en salud humana ha permanecido relativamente constante, aunque aún se sitúa entre los más elevados de Europa
En los últimos tres años, el consumo total de antibióticos en salud humana ha permanecido relativamente constante, aunque aún se sitúa entre los más elevados de Europa y registra una subida del 9,5% en el ámbito hospitalario desde el año 2012.
Sin embargo, hay un cambio de tendencia significativo en el ámbito de la veterinaria, ya que este consumo ha registrado una reducción estimada del 14% desde el año 2014. Las bacterias de origen humano estudiadas han sido agentes patógenos implicados en infecciones, en concreto 34.695 cepas invasivas de Escherichia coli y 8.073 de K. pneumoniae. Las cepas de origen animal se han obtenido en explotaciones ganaderas o mataderos, de animales sanos, y cepas no invasivas o comensales. Para el análisis de sus niveles de resistencias se han estudiado 15.319 aislados de Salmonella spp. (animales y alimentos); 1.485 aislados de Campylobacter spp. (alimentos); 1.560 cepas de Campylobacter spp. (animales) y 2.042 cepas de E. coli (animales).
Principales tendencias registradas
El período en el que se han recogido los datos analizados limita la posibilidad de establecer claramente la correlación entre el consumo de antibióticos y el desarrollo de resistencias, sin embargo las tendencias que se han visto sí permiten establecer un punto de partida para continuar la evaluación de la influencia del consumo en el aumento de los porcentajes de resistencia en bacterias de personas y animales. Esta observación coincide con las tendencias registradas en los informes JIACRA europeos.
En salud humana se ha encontrado relación entre el consumo de cefalosporinas de 3ª y 4ª generación en el ámbito hospitalario y la prevalencia de resistencias a cefotaxima en cepas de Klebsiella pneumoniae invasivas. Los resultados de los análisis muestran, además, una relación significativa entre el uso de carbapenémicos y los porcentajes de resistencias a imipenem en las cepas invasivas de K. pneumoniae.
En salud humana se ha encontrado relación entre el consumo de cefalosporinas de 3ª y 4ª generación en el ámbito hospitalario y la prevalencia de resistencias a cefotaxima en cepas de Klebsiella pneumoniae invasivas
Por otra parte, los aumentos de la resistencia a cefotaxima e imipenem detectados en aislamientos invasivos de K. pneumoniae entre 2012 y 2016 presentan una relación con el aumento del consumo de antibióticos carbapenémicos y de colistina, respectivamente; antibióticos alternativos en el tratamiento de infecciones por K. pneumoniae resistente a los antibióticos arriba mencionados.
Finalmente y aunque se trata de una tendencia mucho menos clara que las anteriores, también se ha registrado relación entre el porcentaje de resistencia a macrólidos de cepas de Campylobacter jejuni y Campylobacter coli de origen animal y el porcentaje de resistencia de las cepas de origen humano.
Abordaje multidisciplinar frente a la mortalidad por infecciones resistentes
La presentación de este informe la realizó Cristina Muñoz, coordinadora del PRAN en el Departamento de Medicamentos Veterinarios de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS) durante la jornada “Consumo de antibióticos y transmisión de resistencia entre humanos y animales: ¿un riesgo real?”, organizada por la Fundación Ramón Areces en colaboración con la AEMPS. Belén Muñoz, directora de la AEMPS, señaló que según las cifras oficiales del Registro de Actividad de Atención Especializada (CMBD), en 2015 se contabilizaron en nuestro país un total de 3.058 muertes por infecciones provocadas por bacterias multirresistentes. En el año 2016 esta cifra se redujo a 2.956 aunque, Crespo advirtió que “resulta prematuro valorar esta reducción como una tendencia a la baja”.
En 2015 se contabilizaron en nuestro país un total de 3.058 muertes por infecciones provocadas por bacterias multirresistentes
El informe JIACRA-España se ha elaborado conforme a la metodología utilizada en informes homólogos europeos que fueron publicados entre 2015 y 2017 por ECDC, EFSA y EMA y persigue revertir la situación actual a través de una mejora en los conocimientos del problema. Se trata del primer análisis integrado y centrado en el estudio de datos españoles, incluyendo cifras de consumo de antibióticos y resistencia en salud humana y sanidad animal, así como la relación entre ambos.