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En el análisis global del paciente, la Medicina de Precisión debe ser entendida como un nuevo enfoque basado en un conocimiento exhaustivo de sus características vitales, su estilo de vida y su genoma. Todo ello contribuye a la prevención de la enfermedad, como también a la obtención de respuestas que permiten mejorar la salud del paciente, contribuyendo a la sostenibilidad del Sistema Nacional de Salud (SNS).
En este sentido, en el marco de las Jornadas ‘Perfilando una Estrategia Nacional de Medicina de Precisión en el Sistema Nacional de Salud’ organizadas por la Cátedra Extraordinaria MSD-UIMP Salud, Crecimiento y Sostenibilidad en la sede de la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP) de Santander han permitido abordar no solo la importancia de contar con una Estrategia Nacional, sino los beneficios que esta nueva medicina puede proporcionar a los clínicos, al sistema sanitario y, especialmente, a los pacientes.
La inauguración de este curso ha corrido a cargo de la subdirectora adjunta de la Subdirección General de Calidad de Medicamentos y Productos Sanitarios del Ministerio de Sanidad, María Luisa García Vaquero; del rector de la UIMP, el profesor Emilio Lora Tamayo; del director de la Cátedra Extraordinaria MSD-UIMP Salud, Crecimiento y Sostenibilidad, el profesor César Nombela; y el presidente y director general de MSD en España y Portugal, Ángel Fernández.
MSD aboga por disponer de un marco estratégico nacional como la mejor vía para que trabajando y colaborando en conjunto se pueda hacer más accesible y sostenible la Medicina de Precisión
“En MSD creemos que disponer de un marco estratégico nacional es la mejor vía para que -trabajando y colaborando conjuntamente- se pueda hacer más accesible y sostenible la Medicina de Precisión que implica un análisis holístico de las personas y puede contribuir a la prevención y tratamiento más preciso de los pacientes y sus enfermedades”, destacó Ángel Fernández durante su discurso de inauguración.
Esta nueva medicina, como uno de sus “objetivos prioritarios”, continua el presidente y director general de MSD, “es la capacidad de poder aplicar los fármacos más innovadores a aquellos pacientes a los que mejor se adecue esta terapia, con la dosis adecuada, en el momento adecuado y bajo los criterios de lograr una respuesta más eficaz y duradera”, toda una serie de prestaciones “que sin duda contribuirá a generar una mejor innovación, un compromiso con la accesibilidad y, al conseguir respuestas solidas a patología no cubiertas, a mantener la sostenibilidad del Sistema Nacional de Salud”.
La implantación de la Medicina de Precisión y la llegada de las nuevas tecnologías van a precisar necesariamente una formación continuada
Al respecto, el profesor Nombela ha recordado que implantar la Medicina de Precisión y la llegada de las nuevas tecnologías van a requerir sí o sí una formación continuada. “De manera cada vez más inmediata, cada avance científico y médico impacta directamente en los pacientes y por tal motivo no se debe escatimar en la formación e información de nuestros profesionales sanitarios. Los beneficios de la Medicina de Precisión son numerosos pero no hay que olvidar que necesita de una Estrategia Nacional para asegurar su implantación”, afirmó.