..Elena Santa María.
En vísperas del Día Mundial contra el Cáncer de Mama, y la las puertas del Congreso ESMO 2018, el Dr. Álvaro Rodríguez-Lescure, vicepresidente de la Sociedad Española de Onclología Médica (SEOM), comenta con iSanidad. Lo mejor de la sanidad, los últimos avances en cuanto a diagnóstico y tratamiento así como lo que supone para él la relación con los pacientes.
¿Cuál es la incidencia de cáncer de mama en hombres?
La cifra gruesa que se maneja siempre es que menos del 1% de los cánceres de mama ocurren en varones. La extrapolación más o menos es de 1,5 casos por millón de casos nuevos al año, o sea que menos de un 1%.
¿Qué novedades se van a presentar en ESMO?
En cáncer de mama la fundamental es la comunicación de los datos concretos de un ensayo clínico en el que se está evaluando el efecto de la inmunoterapia añadida a la quimioterapia en un tipo de cáncer de mama concreto, que es el triple negativo, y que es un tipo de cáncer de mama, a día de hoy con la quimioterapia como única opción de tratamiento. Hasta ahora no ha habido tratamiento dirigido, el tratamiento hormonal no funciona, otras terapias biológicas con anticuerpos hasta ahora no han funcionado. Es el primer estudio que compara el estándar, que es la quimioterapia, con una opción experimental que en este caso era añadir un tratamiento de inmunoterapia en la misma línea en que ha ocurrido en el cáncer de pulmón, melanoma, tumores renales, etc. en los últimos años. Es verdad que en ese sentido el cáncer de mama va un poco por detrás, también por motivos biológicos. Este es el primer estudio del que sabemos que hay datos positivos, lo que no sabemos es la cuantía, que se comunicará allí. Es el dato más relevante con diferencia.
En ESMO se presentará el primer estudio del que sabemos que hay datos positivos sobre el efecto de la inmunoterapia añadida a la quimioterapia para el triple negativo
¿Se ha probado la inmunoterapia en el cáncer de mama metastásico?
No, porque esto es una novedad. En cáncer de mama metastásico no hay ninguna indicación aprobada y precisamente en este congreso se comunicarán por primera vez datos de un ensayo clínico, dependiendo de su cuantía y magnitud del beneficio podrá ser motivo de que se apruebe por las agencias reguladoras el uso de la inmunoterapia para cáncer de mama metastásico. Se utilizan anticuerpos en algunos tipos de cáncer de mama, pero inmunoterapia como la estamos conociendo ahora, hasta la fecha no.
¿Qué diferencias hay entre las Comunidades Autónomas en cuanto al cribado?
Como todo, el problema de la transferencia de la sanidad a cada comunidad autónoma entraña hasta 17 modelos diferentes. Ni siquiera en la periodicidad, las proyecciones que se hacen de mamografía o incluso en la edad a la que se empieza: en algunas es desde los 50, en otras desde los 45. En algunas las frecuencias es bianual…hay diferencias, efectivamente.
¿Cómo tendría que ser el cribado recomendado?
El cribado tenemos que mejorarlo mucho todavía, independientemente de la peculiaridad de cada comunidad autónoma. Como concepto general, respecto al cribado en los próximos años vamos a asistir a cambios muy importantes y a otros planteamientos del cribado de la población general, vamos a buscar el cribado en poblaciones con gran beneficio. Hoy en día sí que está aceptado que hay un grupo de pacientes que tienen un programa de cribado específico, que son aquellas mujeres que son portadoras de mutaciones de riesgo, pero que son un grupo muy pequeño. En estas mujeres, independientemente de su edad, se recomienda hacer un cribado con mamografía e incluyendo resonancia magnética mamaria, pero estamos hablando de un porcentaje muy pequeño de mujeres. Algunas son pacientes de cáncer de mama pero otras no lo han tenido nunca, pero son portadoras de la mutación. En cuanto al cribado general, somos conscientes de que tiene sus limitaciones y seguramente en los próximos años asistamos a un cambio de ese paradigma, en el sentido de diseñar cribados más específicos, seguramente para grupos de mayor riesgo que hay que saber identificar para obtener el máximo beneficio.
En cuanto al cribado general, somos conscientes de que tiene sus limitaciones y seguramente en los próximos años asistamos a un cambio de ese paradigma
¿Hasta qué punto podría la biopsia líquida sustituir al cribado?
Como potencial es muy interesante, pero hay que demostrar muchas cosas. La biopsia líquida es una técnica de diagnóstico muy importante, tiene mucho desarrollo en cáncer desde hace ya tiempo. En algunos tumores más que en otros. Podría ser una herramienta, pero una cosa es que pueda serlo y otra cosa es que lo sea, por eso hay que demostrarlo y eso se demuestra con estudios. Es uno de los aspectos que se puede incorporar potencialmente en el futuro, como un programa de cribado más selectivo. Pero está todavía por ver. El potencial lo tiene, pero hay que demostrarlo. Con un cribado tienes que demostrar que en una población concreta tienes un impacto en la supervivencia. El cribado te permite articular algún tipo de estrategia que permite disminuir la mortalidad en un segmento de la población, y eso hay que demostrarlo.
¿Cómo han evolucionado los tratamientos hormonales?
Un porcentaje importante de los cánceres de mama que tienen relación o dependencia de con las hormonas. El tumor se aprovecha de las hormonas femeninas, los estrógenos, y los utiliza como factor de crecimiento, como si riegas un geranio. La hormonoterapia más antigua que se conoce es la castración: quitar los ovarios, esto se describió ya ne el siglo XIX. Hoy en día interferimos mediante medicación y en muchos órdenes, hay fármacos que bloquean parcialmente el efecto de los estrógenos, otros inhiben la producción de estrógenos, algunos antes de la menopausia. Hay medicación que consigue la castración médica. Pero en la menopausia también se producen estrógenos en el cuerpo, de otra manera y en otros órganos, pero se producen hay fármacos que bloquean esa producción incluso en la menopausia.
Hay varios niveles de intervención, básicamente con medicación, aunque en algunos casos se puede recomendar quitar los ovarios: en mujeres muy jóvenes con una enfermedad avanzada, en las que es interesante que los ovarios no produzcan hormonas. Son intervenciones bastante sencillas que se hacen por laparoscopia, ya no se hacen con cirugías abiertas tradicionales. Básicamente actuamos a nivel de medicación y la mayoría por vía oral, algunos intramuscular, o subcutánea.