Redacción.
El Servicio de Cirugía Pediátrica del Hospital Vall d’Hebron de Barcelona utiliza imanes para realizar intervenciones quirúrgicas a pacientes en edad pediátrica, lo que le convierte en el primer centro hospitalario de España en emplear esta técnica.
Como informa el hospital barcelonés, esta nueva técnica que, permite el movimiento de las vísceras de forma mínimamente invasiva y menos agresiva que las habituales, se puede utilizar en un gran número de cirugías sin dejar en el paciente cicatrices visibles.
En palabras del Dr. Carles Giné, jefe de Sección de Cirugía Digestiva y Torácica Pediátricas de Vall d’Hebron, se trata de “técnica naciente en el Estado, y estamos dispuestos a desarrollarla al máximo” y es que “las posibilidades que se abren con esta tecnología son inmensas”, añade.
Con esta nueva técnica de imanes para realizar intervenciones quirúrgicas a pacientes en edad pediátrica se han hecho ya operaciones digestivas, torácicas, urológica y oncológicas
En el campo de la cirugía pediátrica, las aplicaciones son numerosas, ya que la tracción de las vísceras es una maniobra habitual en cualquier tipo de cirugía. Con esta nueva técnica de imanes para realizar intervenciones quirúrgicas a pacientes en edad pediátrica se han hecho ya, siempre con resultados exitosos y sin complicaciones quirúrgicas, operaciones digestivas, torácicas, urológicas y oncológicas, como la colecistectomía o extracción de la vesícula biliar.
Con el objetivo de conseguir cirugías menos agresivas y lograr mejores resultados estéticos para el paciente, los cirujanos de la Vall d’Hebron trabajan para reducir todavía más las dimensiones de los imanes (de 10 milímetros de diámetro) y en la adaptación de otros instrumentos.
Técnica con imanes para coger y mover las vísceras de forma mínimamente invasiva y menos agresiva, que reduce sobremanera el dolor postoperatorio
Esta nueva técnica consiste en la introducción en el cuerpo de unos pequeños imanes con pinzas que permiten coger y mover las vísceras con la ayuda de un imán exterior fijado a la mesa de operaciones, que se puede mover en cualquier dirección.
La ventaja de la cirugía con imanes es que permite mover y separar las vísceras de una forma más sencilla, menos invasiva y agresiva, y reduce sobremanera el dolor postoperatorio, mientras que en la cirugía tradicional se necesita introducir más instrumental.
Para el equipo quirúrgico también representa una ayuda, ya que el imán no necesita de una segunda o tercera persona para manejarlo, se mejora la ergonomía (ya que el imán se puede desplazar en cualquier dirección desde fuera) y el espacio quirúrgico está más libre de instrumentos.
Dr. Giné: “cuando expones mejor los tejidos, como permiten hacer los imanes, la ejecución quirúrgica es más precisa y, por lo tanto, más segura para el paciente”
La introducción del instrumental se hace a través de un puerto quirúrgico de 10 milímetros o mediante una única incisión de 10 milímetros a través del ombligo que queda “escondida” en este. Con este método de trabajo se reduce el número de incisiones y de instrumental quirúrgico y los cirujanos consiguen una mejor exposición de los tejidos sobre los que intervienen.
Al respecto, como afirma el Dr. Giné, “cuando expones mejor los tejidos, como permiten hacer los imanes, la ejecución quirúrgica es más precisa y, por lo tanto, más segura para el paciente”.
Esta tecnología que, llegó de la mano de su creador, el Dr. Guillermo Dominguez, de la Fundación Argentina de Buenos Aires, en noviembre de 2016 realizó cirugías de este tipo con los miembros del equipo de Cirugía Pediátrica del Hospital Vall d’Hebron. “Estoy convencido de que en unos años la introducción de imanes dentro del cuerpo será una práctica quirúrgica habitual en todos los hospitales del Estado”, concluye el Dr. Giné.
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