..Emilio Ramirez.
..Cristina Cebrián. (Fotografías)
Jesús Gómez, presidente de la Sociedad Española de Farmacia Comunitaria (SEFAC) pone en valor la importancia que tiene que haya casi 23.000 farmacias en España, y es que a su juicio, asegura un profesional sanitario cercano al paciente y también asegura que el medicamento está en las mejores condiciones y que los pacientes lo están utilizando. En el extranjero, como explica a iSanidad Lo mejor de la Sanidad muchos envidian el Sistema Nacional de Salud y la Farmacia española.
¿Cómo valora que el Ministerio les haya incluido en la tarea de la reforma de la Atención Primaria?
“Bueno, yo creo que es necesario, dejar a 50.000 representantes científicos de 50.000 profesionales de la salud pues no es eficiente, y yo creo que la Farmacia Comunitaria como otros agentes de la salud deben estar, y yo creo que es una buena noticia, y bueno, como estamos acostumbrados a actuar rápido en la farmacia con el paciente, pues actuaremos rápido también en las propuestas para Farmacia Comunitaria”.
“Todo el tema del medicamento que es la esencia de la farmacia, la dispensación del medicamento; este es un campo muy importante porqué los pacientes tienen que salir sabiendo para qué toman la medicación”
¿Cuáles son las propuestas que van a mandar?
“En primer lugar yo creo que el farmacéutico comunitario tiene que estar más integrado con el centro de salud, protocolos comunes que conozcamos qué está haciendo, qué se hace desde el centro de salud y qué hacemos nosotros. Es muy importante tener protocolos de actuación en cuanto a derivación de pacientes, en qué condiciones, quiénes, según patología. Nosotros tenemos unas propuestas en síntomas menores que esto deben conocerlo también en el centro de salud, luego tema de cribajes que se pueden en la farmacia, sí hacemos valoraciones farmacéuticas; yo creo que este es otro de los campos, todo el tema del medicamento que es la esencia de la farmacia, la dispensación del medicamento; este es un campo muy importante porqué los pacientes tienen que salir sabiendo para qué toman la medicación, el por qué, durante cuánto tiempo y el cómo. Esto es muy importante, si eso no se consigue en la farmacia difícilmente se va a conseguir en otros sectores, por lo tanto todos los recursos que hemos invertido si luego no se toma bien el medicamento pues hemos fracasado. Las consultas de salud que podemos ahorrar tiempo y derivar las necesarias ante temas de síntomas menores y luego el seguimiento de determinados pacientes, quién es adherente, quién no es adherente, sí hay efectos secundarios, sí hay resultados negativos en la medicación, todo eso lo podemos hacer, y creo que eso tiene que estar en coordinación con el médico de Atención Primaria”.
“Yo creo que la historia clínica es potestad del paciente y tiene que estar en manos del paciente para ponerla en disposición de aquel profesional de la salud que él considere”
¿Debería el farmacéutico poder acceder a la historia clínica?
“Me alegra que me preguntes eso, es un tópico, pero es verdad. El seguimiento farmacoterapéutico de estos pacientes no puedes hacerlo si no tienes acceso a la historia clínica, es imposible, porque, ya no digo solo a toda, pero sí a una parte importante. ¿Por qué?, la historia farmacoterapéutica, por ejemplo un paciente que lleva un fármaco para la tensión, tú no sabes si es la primera vez que se lo han recetado, ¿por qué se lo han cambiado los anteriores?…etc, necesitas una información, o estás vendido, y cuando ese paciente te viene con una consulta de salud, sin esa información pues la decisión terapéutica no va a ser la mejor posible porque nos falta información, y yo creo que al final, ¿Sabes qué hacemos en la farmacia?, oiga, venga usted con toda la información que tiene en casa, y te vienen con unos dosieres que los dejan encima de la mesa, y así lo hago en mi farmacia, y tienes acceso, pero no es la forma. Yo creo que la historia clínica es potestad del paciente y tiene que estar en manos del paciente para ponerla en disposición de aquel profesional de la salud que él considere”.
Casi 23.000 oficinas de farmacia en España, ¿es un tejido de puntos de distribución de salud que hay que explotar mejor?
“Pues sí, yo creo que tener 22.500 centros de salud en España, cercanos a 200 metros, 250 de lo más lejano de un domicilio, es algo que hay que tener en cuenta. Asegura un profesional sanitario muy cercano al paciente, eso en consultas, pero también asegura que el medicamento está en las mejores condiciones y los pacientes lo están utilizando también en las mejores condiciones en cualquier rincón de España, se está asegurando un 99,9%, prácticamente no hay país en el mundo que tenga estas cifras que tenemos nosotros”.
“La gestión tiene que ser privada y pública sumada, pero es que incluso los hospitales habrán públicos y privados, y centros de salud que serán de gestión pública y privada y tienen que convivir sí queremos una eficiencia”
El problema de la farmacia en muchas ocasiones es que es un establecimiento privado, ¿Si fuera público se vería de manera diferente?
“Creo que al final, vamos a ver, ¿Quién paga el servicio de dispensación de medicamentos?, el Estado, por lo tanto estamos haciendo una función pública, estamos regulados desde el punto de vista público, eso hay que tenerlo muy en cuenta, luego hay otras actividades en la farmacia que están implicadas en las decisiones del Sistema Nacional de Salud pero que no las financia el Estado, como es la indicación farmacéutica, la consulta en la farmacia, eso es una gestión privada pero que tiene un impacto público, llámale cómo quieras. La realidad es que es un sistema que funciona, y funciona muy bien, y es el ejemplo. Cuando recorro otros países, hace poco estuve en Centroamérica en el Congreso Internacional de Atención Farmacéutica, y todos los compañeros me decían cómo podía tener yo un Sistema Nacional de Salud y una Farmacia como la española, y nos envidian, y nos envidian en muchos países, hay que mejorar y retocar cosas, sí, pero yo creo que es el hecho de que sea privado-público al final paga el Estado, el Estado es el garante de este derecho a la Sanidad que tenemos todos, pero la gestión tiene que ser privada y pública sumada, pero es que incluso los hospitales habrán públicos y privados, y centros de salud que serán de gestión pública y privada y tienen que convivir sí queremos una eficiencia, todo lo demás es no ver las necesidades reales de los pacientes”.