El 17% de conductores sigue un tratamiento farmacológico y 3 de cada 4 no tiene información sobre sus efectos

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..Redacción.
Según las estimaciones de la Dirección General de Tráfico en las próximas semanas se producirán 47 millones de desplazamientos en coche. Ante este panorama es necesario recordar las posibles interacciones que algunos medicamentos tienen sobre el acto de conducir. Y en consecuencia tomar una serie de precauciones que minimicen los riesgos al volante.

En España, diversos estudios apuntan a que el 17% de los conductores afirma seguir un tratamiento farmacológico. Un hecho que se ve agravado porque tres de cada cuatro reconoce no tener información sobre el efecto de su medicación. Además, a esto se suma que muchos de los conductores utilizan medicamentos que no necesitan receta. Por lo que no conocen los riesgos que implican estos fármacos al conducir.

Actualmente alrededor de 5.700 presentaciones de medicamentos (un 25% de los existentes) incluyen un pictograma consistente en un triángulo equilátero rojo con un coche negro en el interior sobre fondo blanco. Este pictograma alerta de la posible interacción del medicamento con la conducción; además remite al paciente a ampliar la información con la leyenda “Conducción: ver prospecto”. Estos fármacos pueden influir en la conducción de muy diversas maneras.

Uno de los mecanismos a través del cual un medicamento puede afectar al conductor es la somnolencia. Otros efectos son la reducción de reflejos y aumento del tiempo de reacción; la alteración de la percepción de las distancias; las alteraciones oftalmológicas o de la audición; los estados de confusión y aturdimiento y las alteraciones musculares. Aunque también es importante recordar que no siempre el efecto será negativo, puesto que en muchas ocasiones el tratamiento farmacológico permite controlar la patología y mejorar la capacidad de conducción.

Evitar los posibles efectos de los medicamentos a la hora de conducir

Para paliar estos posibles efectos de los medicamentos al conducir se recomienda evitar hacerlo al iniciar un tratamiento que disminuya potencialmente reflejos; tener especial precaución con la administración conjunta de varios medicamentos, y no consumir alcohol.

También es importante conocer que algunos medicamentos incluyen alcohol en su composición. Por lo que es recomendable consultar el prospecto para conocer su contenido total. Sin embargo cada situación debe ser valorada individualmente. Y es que un mismo medicamento podría no afectar a una persona de la misma manera; y sí hacerlo de forma considerable a otra. Incluso, un mismo medicamento podría influir de forma diversa a la misma persona, en momentos distintos.

Por su contacto directo con el paciente, los farmacéuticos juegan un papel esencial para concienciar a la población sobre la importancia de la seguridad vial. La labor informativa del farmacéutico al respecto es de gran relevancia. Por un lado promueve el uso racional de los medicamentos, pero además, conoce todos los medicamentos que puede estar utilizando el ciudadano, precisen o no de receta. En estas vacaciones estivales, ante cualquier duda con los fármacos y la conducción, los ciudadanos pueden acudir a alguna de las 22.081 farmacias comunitarias repartidas por toda España y consultar con el farmacéutico.

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