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Los probióticos son microorganismos vivos que cuando se suministran en cantidades oportunas promueven beneficios en la salud, pero es necesario identificar la cepa adecuada para cada enfermedad y demostrar su eficacia y seguridad a través de estudios.
Como explica la Dra. Encarnación Arriza, directora médica del Grupo Farmasierra, “precisamente la cepa 35624® (Alflorex para Colon Irritable) es un ejemplo de esa eficacia y seguridad en la mejora del SII, avalado por 15 años de investigación y más de 150 publicaciones científicas y presentaciones internacionales”. Este probiótico ha demostrado una mejora significativa de los síntomas del Síndrome del Intestino Irritable (SII), ya que disminuye el dolor o la molestia abdominal, la hinchazón o distensión y la dificultad en movilidad intestinal.
El SII afecta a entre un 10 y un 20% de la población, más frecuentemente a mujeres, y con una mayor prevalencia entre los 20 y 50 años. Según datos de la Fundación Española del Aparato Digestivo (FEAD.
También conocido como colon irritable, este trastorno gastrointestinal se caracteriza por episodios de dolor abdominal y cambios en los hábitos intestinales, como estreñimiento, diarrea, distensión abdominal, hinchazón o flatulencia. Existen otros síntomas extraintestinales que pueden acompañar al SII como reglas dolorosas, dolor de cabeza, molestias al orinar, dolores musculares y óseos y cansancio
Pese a que se trata del trastorno gastrointestinal más frecuente diagnosticado y la segunda causa de absentismo laboral tras el resfriado común, tan solo un 15% de afectados consultan a un médico ante la manifestación de síntomas. A todo ello se une que existe un gran desconocimiento en torno a la enfermedad.
Para la mejora del Síndrome del Intestino Irritable los hábitos de vida saludable son claves
Para el SII actualmente no existe ningún tratamiento curativo, pero se pueden distinguir dos tipos de abordajes; uno mediante hábitos de vida saludable y otro desde el punto de vista farmacológico.
Respecto a los hábitos de vida saludable se deben seguir una serie de recomendaciones. Por ejemplo evitar el consumo de tabaco y alcohol; clasificar qué alimentos sientan peor y eliminarlos; hacer cinco comidas al día y dedicarle al menos 20 minutos a cada una.
Además, realizar 30 minutos al día de actividad física adecuada a cada persona. Además de evitar situaciones estresantes para paliar los síntomas. Del mismo modo, es importante tomarse tiempo para defecar.
En cuanto al tratamiento terapéutico los probióticos tienen eficacia en esta patología. No obstante, el especialista médico indicará cuál es el adecuado según los síntomas que se presenten. Pueden ir desde la ingesta de fibra; laxantes si existe predominio de estreñimiento; antidiarreicos; los antiespasmódicos o incluso en ocasiones hay que recurrir a antidepresivos o ansiolíticos.
