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El uso de dulaglutida en personas con diabetes mellitus tipo 2 (DM2) favorece la persistencia en el tratamiento. Concretamente, en comparación con otros fármacos de su clase. Este es uno de los resultados de un estudio presentado durante el Congreso Europeo ISPOR, con la colaboración de Lilly, sobre el uso de dulaglutida. Se trata de una investigación de vida real realizada en población con DMT2 sobre el uso de fármacos agonistas del receptor GLP1. Para realizar el estudio se incluyó a 1.402 pacientes españoles.
El objetivo fue comprender los patrones de tratamiento, persistencia y costes asociados entre las personas con DM2 que iniciaron un nuevo tratamiento con los AR GLP-1 más utilizados. Bien podían utilizarse una vez a la semana con exenatida-QW o con dulaglutida, o una vez al día con liraglutida.
A los 18 meses la persistencia con dulaglutida fue de más de l 12% en comparación con otros medicamentos de los GLP-1
De este modo, los resultados demostraron una mejora de la persistencia con dulaglutida. Concretamente, a los 18 meses la persistencia con este fármaco fue de más de l 12%, en comparación con el uso de otros medicamentos de los GLP-1 estudiados. Así, los 492 pacientes tratados con este fármaco obtuvieron una persistencia del 59,1% frente al 45,7% tratados con exenatida-QW y el 46,6% con liraglutida.
Uno de los autores del estudio, el Dr. Santiago Tofé, médico adjunto del servicio de endocrinología del Hospital Son Espases de Palma de Mallorca, comenta lo que suponen estos resultados. “La adherencia y persistencia al tratamiento son clave para trasladar la eficacia de los fármacos obtenida en los ensayos clínicos a la práctica real”, señala.
En este sentido, el endocrinólogo destaca la eficacia terapéutica de dulaglutida. Además, a diferencia de otros dispositivos, “ya está preparado para ser administrado, al ser un dispositivo fácil de usar por el paciente. Esto puede estar favoreciendo un mayor mantenimiento del tratamiento por parte de los pacientes”, apunta el Dr. Tofé.
Dr. Tofé: “Ya está preparado para administrarse, al ser un dispositivo fácil de usar por el paciente”
Por otro lado, el uso de este fármaco, en comparación con otras moléculas, favorece la reducción de costes. De hecho, el estudio señala que el coste medio asociado fue más bajo en pacientes con dulaglutida. En concreto, supuso un recorte de más de 300 euros al año, comparado con pacientes con otros tratamientos.
La mayor diferencia se da en las visitas al especialista o a urgencias. Por ejemplo, en el caso de la dulaglutida el coste asociado es de alrededor de 400 euros menos que con los otros fármacos.
“Es un fármaco que no necesita titulación de dosis, por lo que no es necesario una visita adicional al médico para ajustar la dosis. Más bien se parte de la dosis que el paciente va a mantener”, concluye el Dr. Tofé.
