..Juan Pablo Ramírez. Director de iSanidad.
Tradicionalmente hemos vivido un conflicto entre fe y ciencia. Hoy padecemos otro similar entre ciencia y política. Lo observamos en relación al cambio climático. Quizás el ecologismo no ha escogido en los últimos años a los portavoces más adecuados. Ha recurrido con mayor frecuencia a representantes de la sociedad civil y ha dejado en un segundo plano la opinión científica. La ecología es una rama de la biología y los científicos tienen mucho que decir. Los médicos han sido muy claros sobre las consecuencias del cambio climático.
El primo de Rajoy o de George W. Bush recibieron en su día críticas más que lógicas por sus posturas negacionistas. Pero también carece de sentido obviar que desde determinados sectores del ecologismo surgen voces contrarias a las vacunas o cierta querencia a los que se ha llamado terapias alternativas, siempre sin evidencia científica.
La ecología es una rama de la biología y los científicos tienen mucho que decir
No es cuestión de entrar en si Greta Thunberg sí o no. Este país tiene una tendencia malsana a simplificar los debates y obviar lo realmente importante. Se trata de que al año mueren en España 10.000 personas por la contaminación del aire; alrededor de 30.000 son diagnosticadas al año de patologías que están relacionadas con el cambio climático. Estas son las cifras del Ministerio de Sanidad durante la Cumbre del Clima, pero las que maneja la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (SEPAR) resultan más preocupantes.
La disparidad entre las cifras de los médicos de SEPAR y el Ministerio de Sanidad ponen de manifiesto la necesidad de investigar más sobre los efectos del cambio climático. Estamos ante un problema de salud pública
Según SEPAR mueren en España entre 80.000 y 100.000 personas al año de forma prematura por enfermedades respiratorias relacionadas con el cambio climático y las partículas contaminantes del aire. Existe una vinculación clara con el asma, la patología respiratoria más prevalente en nuestro país. Tenemos la evidencia de que los contaminantes del aire también impactan en las exacerbaciones de epoc.
Incluso la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM) ha relacionado la contaminación como uno de los factores de riesgo junto a la obesidad, el tabaquismo y el sedentarismo de determinados tumores como uno de los factores de riesgo de determinados tumores como el de mama, cervix, próstata, colorrectal o pulmón.
Es necesario investigar para conocer la gravedad y el alcance en nuestra salud del cambio climático. Así lo ponen de manifiesto la disparidad de cifras entre el Ministerio de Sanidad y SEPAR. En el peor de los casos hablamos de 10.000 muertes anuales, lo que demuestra que estamos ante un verdadero problema de salud pública.
