..Gema Maldonado.
Son muchos los problemas que afronta la atención primaria, especialmente en esta segunda ola de la pandemia, con agendas de pacientes que superan el medio centenar diario, colas a las puertas de los centros de salud y falta de personal. El coronavirus, además de aumentar exponencialmente sus tareas en cuanto a la atención y seguimiento de los pacientes, sin abandonar a los crónicos, ha disparado la burocracia con la que cada día tienen que lidiar.
El coronavirus ha disparado la burocracia con la que cada día tienen que lidiar los médicos de atención primaria
Bajas por cuarentena, bajas por Covid-19, certificados para profesores en colegios y para trabajadores en empresas privadas se han multiplicado y ralentizan el resto de tareas asistenciales y de atención a pacientes. “La burocratización es asfixiante” según denuncia la Confederación Estatal de Sindicatos Médicos (CEMS).
Una afirmación que corroboran los médicos de familia. “Es totalmente cierto”, afirma el Dr. Lisardo García Matarín, médico de familia en el Centro de Salud Aguadulce Sur, en el municipio de Roquetas de Mar (Almería) y miembro de varios grupos de trabajo de Semergen. Entiende que todo el papeleo que afrontan en plena crisis del Covid-19 “es como poner palos en las ruedas de un sistema que ya está atascado”.
Dr. García Matarín: “Es como poner palos en las ruedas de un sistema que ya está atascado”
La pandemia ha generado un gran número de bajas por cuarentena “que son horribles” en estos días, señala el Dr. García Matarín. Han de gestionarlas, con el tiempo que suponen. Pero, además, el proceso puede alargarse en los casos de PCR positiva. “Cuando se hace una segunda PCR, el 50% de ellas da positiva después de 14 días y, aunque probablemente la persona no sea contagiosa, y lo único que quede son carcasas del virus, hay que pedir una analítica de sangre y esperar resultados. Todo esto demora las cosas una semana más: tienes que ampliarle la baja y volver a citarlo. Más papeleo”.
Más allá de las cuarentenas y bajas por Covid-19, los médicos se encuentran con las peticiones de certificados varios. En el entorno educativo, señala, se acumulan las peticiones de los maestros y profesores con contratos interinos. “Cada vez que les hacen un contrato, aunque sean cuatro o cinco en el curso, les exigen un certificado diciendo que están bien y que no tienen enfermedades infecciosas. Esto es un residuo de cuando existía la tuberculosis”, lamenta.
Centros educativos y empresas privadas piden certificados de salud a sus empleados, lo que aumenta las tareas de burocracia de los médicos en atención primaria
En la empresa privada está sucediendo algo similar. Cada vez son más las que piden a sus nuevos empleados un certificado que garantice que la persona contratada no tiene Covid-19. “He atendido a una chica a la que le pedían una PCR negativa y este certificado para trabajar en un bar. Pero si no tienes datos clínicos objetivos, como una analítica, tú no puedes decir que no tiene Covid-19. Y este tipo de cosas las empresas nos las piden bastante”, explica. “Es tedioso y empeora el funcionamiento del sistema”.
¿Qué se puede hacer para descargar a los médicos de la burocracia?
El Dr. Lisardo apuesta por por habilitar modelos de autodeclaración responsable para certificados que den entrada a trabajos. Modelos que no tengan que pasar por el médico, en los que el empleado declara que está en condiciones para trabajar. Y, sobre todo, cree que hay que contratar personal.
“Atendemos a 20.000 pacientes y con solo un médico más, que se encargó del seguimiento de casos y de gestiones burocráticas, pudimos atender el resto de tareas”
En los días de mayor incidencia de coronavirus en su centro de salud, durante la segunda quincena de agosto, contaron con un médico recién titulado que “alivió mucho” toda la gestión. “Atendemos a 20.000 pacientes y con solo un médico más, que se encargó del seguimiento de casos y de gestiones burocráticas, pudimos atender el resto de tareas”. Pero el médico ya se marchó a principios de septiembre para incorporarse a su plaza MIR en un hospital de Madrid y no han vuelto a tener refuerzos.
Este mismo miércoles, el viceconsejero de Salud Pública y Covid-19 de la Comunidad de Madrid, Antonio Zapatero, comunicaba que habían solicitado al Ministerio de Sanidad “desburocratizar la tramitación de bajas médicas” a través del Instituto Nacional de Seguridad Social (INSS). Esto podría limitar la actuación no clínica del médico de atención primaria.
CESM pide contratar administrativos y personal TCAE y pide “no utilizar la atención primaria como el vertedero de tareas burocráticas del sistema”
Propuestas de CESM
Este jueves, CESM publicaba un documento en que da cuenta de todos los problemas que asedian a la atención primaria en todas las comunidades autónomas desde hace años y que, con la pandemia, se ven agudizados. Además propone una serie de medidas a tomar para hacer frente a la masificación de consultas, la seguridad y el respeto a los médicos y a los pacientes, la falta de personal y otros problemas que afectan al este nivel asistencial.
En el ámbito de la sobrecarga burocrática, el sindicato CESM propone la contratación de Técnicos en Cuidados Auxiliares de Enfermería (TCAE) y administrativos con el objeto de que se derive la práctica totalidad de actividad burocrática a este personal. Además, ha pedido que se avance en la informatización y agilización de los partes de baja laboral, las recetas y las interconsultas.
También se refieren a la atención especializada y hacen un llamamiento: “cada nivel asistencial debe asumir la burocracia que genere. No utilizar la atención primaria como el vertedero de tareas burocráticas del sistema”. Por eso, solicitan que se dote a la atención especializada de los recursos suficientes para resolver la burocracia que genere y no tengan que remitirla a la atención primaria.
