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Más del 60% de las personas con asma no sigue correctamente el tratamiento prescrito y el principal motivo es una mala técnica inhalatoria. Esto repercute negativamente en la eficacia de la medicación y, por consiguiente, en el empeoramiento del estado del paciente. Además, aumenta el riesgo en caso de contagio por Covid-19, según advierten Chiesi y la Fundación Lovexair.
El hecho de ser un posible colectivo de riesgo, un mal control del asma o la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (epoc) les coloca en una situación de especial vulnerabilidad en caso de contagio. Por ello, para evitar esta situación vulnerable, ambas organizaciones han lanzado la campaña Cómo usar correctamente tu inhalador, dentro del programa Respirar es vida. La idea es contribuir al conocimiento y sensibilización de la población acerca del asma y la epoc, dos de las enfermedades respiratorias más prevalentes.
Un mal control del asma o epoc coloca a estos pacientes en una situación de especial vulnerabilidad en caso de contagio de Covid-19
“La utilización de los inhaladores no es fácil, por lo que a los pacientes les cuesta asimilarla”, reconoce Eva Maroto, fisioterapeuta respiratorio, coordinadora clínica y responsable de I+D y formación de Fundación Lovexair. “Con el paso del tiempo, esta dificultad da lugar a errores que hay que ir vigilando y corrigiendo para que esto no ocurra”, añade Maroto.
Además, esta técnica de inhalación depende “del dispositivo de inhalación que se tenga pautado. En el mercado hay multitud de ellos y cada uno tiene sus propias particularidades”, explica Ana María Uréndez, enfermera del Grupo de Enfermedades Respiratorias Crónicas de atención primaria del instituto de investigación Sanitaria de las Islas Baleares (IdlSBa).
Dr. J. Álvarez: “Una mala técnica inhalatoria se asocia a más visitas a urgencias, más ingresos hospitalarios y a una mayor mortalidad por agudización”
Por otro lado, la primera consecuencia de una mala técnica de inhalación es la falta de eficacia del medicamento prescrito. “El efecto broncodilatador o antiinflamatorio de losfármacos no se produce. La persona, por tanto, mantiene sus síntomas de disnea, tos, expectoración, opresión torácica, sibilancias o cualquier otro producido por la enfermedad. Pues la medicación no está actuando”, explica el Dr. Carlos J. Álvarez, médico del Servicio de Neumología del Hospital 12 de Octubre de Madrid. En este sentido, “una mala técnica inhalatoria se asocia a más visitas a urgencias, más ingresos hospitalarios y a una mayor mortalidad por agudización”, añade el neumólogo.
No hay que olvidar que un asma o una epoc mal controladas “impiden llevar a cabo actividades cotidianas como pasear, ir a comprar, realizar las faenas domésticas, etc.”, advierte Jordi Giner, enfermero del servicio de Neumología y Alergia del Hospital de la Santa Creu i Sant Pau y experto en terapia inhalada.
Jordi Giner (enfermero): “Con una buena técnica de inhalación, estos pacientes deberían poder hacer las actividades de la vida diaria sin limitaciones”
En cambio, “con una medicación adecuada, una buena adhesión al tratamiento y una buena técnica de inhalación, estos pacientes deberían poder hacer las actividades de la vida diaria sin limitaciones, o mínimas”, señala Giner.
Desde Chiesi son conscientes de esta situación y “para ayudar a las personas con asma y epoc tenemos que ir más allá de ofrecer soluciones terapéuticas. Lanzamos esta campaña para empoderar a las personas con asma y epoc para que tengan una mejor adhesión terapéutica y por lo tanto una mejor calidad de vida”, indica Giuseppe Chiericatti, director general de Chiesi en España.
