..Redacción.
El abordaje de la hiperplasia benigna de próstata (HBP) cuenta con un amplio abanico de tratamientos, en función del estadío de la enfermedad. Desde fitoterapia, fármacos alfa-bloqueantes, combinación de varios tratamientos, cirugía a cielo abierto y cirugía endoscópica transuretral, hasta nuevas técnicas que han resultado efectivas.
En el último grupo de intervenciones se incluyen las técnicas clásicas como la RTU–P y otras más modernas como el HOLEP y la fotovaporización láser. Todas ellas están consideradas técnicas mínimamente invasivas, pero que requieren el uso de anestesia general o regional. También suponen un mayor o menor sangrado postoperatorio y dolor, e ingreso hospitalario que oscila entre 24 y 48 horas. Pero lo que más afecta a la calidad de vida de los pacientes, efectos secundarios sexuales, sobre todo la eyaculación retrógrada.
Dr. Fernández: “Mediante esta técnica de mínima invasión, podemos intervenir a nuestros pacientes prostáticos de forma ambulatoria, sin anestesia general”
Como alternativa, se encuentra el sistema Rezum, una técnica importada de EE. UU que ha revolucionado el abordaje quirúrgico de la próstata. “Mediante esta técnica de mínima invasión, podemos intervenir a nuestros pacientes prostáticos de forma ambulatoria, sin anestesia general, de forma rápida y evitando los incómodos efectos sexuales provocados por la toma de medicamentos y el uso de otras técnicas quirúrgicas”, apunta el Dr. Atanasio Fernández, jefe de Servicio de Urología del Hospital Quirónsalud Sur.
El experto recuerda que no se trata de una técnica experimental, ya que la FDA la aprobó hace años para el tratamiento de la hiperplasia benigna de próstata. Además, ya se ha utilizado en miles de pacientes. Consiste en la inyección intraprostática de vapor de agua. Esto provoca una necrosis o muerte celular del tejido prostático que posteriormente el cuerpo absorverá y eliminará. De manera que alivia progresivamente los problemas ocasionados por el crecimiento prostático.
La intervención se lleva a cabo mediante sedación, no requiere de ingreso hospitalario y tiene una duración de 5 minutos
La intervención se lleva a cabo mediante sedación, no requiere de ingreso hospitalario y tiene una duración de 5 minutos. Por lo que el paciente se marcha a su domicilio el mismo día con una sonda que deberá mantener siete días. Después, se le retirará en el mismo centro.
Sin embargo, el Dr. Fernández advierte de que no todo paciente puede ser intervenido mediante la utilización del vapor de agua. Por ejemplo, próstatas de tamaño superior a 90 gramos no son subsidiarias de esta técnica, teniendo que recurrir a otras técnicas de mínima invasión. De igual manera, es una técnica segura y eficaz en pacientes de edad avanzada, pacientes complejos y de alto riesgo.
Actualmente la técnica Rezum sólo se aplica en la sanidad privada en centros seleccionados y entrenados en el procedimiento, como es el caso del Servicio de Urología del Hospital Quirónsalud Sur.