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La detección temprana, el cribado y diagnóstico correctos y la disponibilidad de múltiples tratamientos permite hablar de una supervivencia media del cáncer de mama tras cinco años del 90%. Sin embargo, esta alta tasa trae consigo la necesaria atención a las mujeres que han superado la enfermedad y que va más allá del componente clínico. Por eso, Ana Valderas, representante de la Federación Española de Cáncer de Mama (FECMA) ha explicado que “el éxito del alto porcentaje de supervivencia al cáncer de mama es un reto para el sistema y para la propia atención oncológica, ya que en ocasiones hay secuelas, hay impacto en la calidad de vida y hay un ámbito emocional que tiene que ser atendido. En definitiva, hay necesidades que surgen tras el período de tratamiento activo que han de ser tenidas en cuenta”.
Así lo ha puesto de manifiesto durante el Webinar Realidades, necesidades y seguimiento de largos supervivientes de cáncer de mama. El evento, organizado por FECMA, ha contado con el apoyo de la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM) y la colaboración de Pfizer.
Según el Dr. Josep Borrás, la pandemia ha mostrado que el sistema sanitario presentaba una fragilidad significativa
Durante la reunión el Dr. Josep Borrás, coordinador científico de la Estrategia en Cáncer del Sistema Nacional de Salud, ha asegurado que a pesar de los avances en la enfermedad y en la atención a las largas supervivientes, queda “un largo camino por recorrer“. “La pandemia nos ha mostrado que el sistema sanitario presentaba una fragilidad significativa. Por ello, es necesario reconstruir lo que ha dejado de funcionar y hacer un esfuerzo por incrementar los recursos dentro del sistema sanitario“, ha explicado.
Por su parte, el Dr. Álvaro Rodríguez-Lescure, presidente de SEOM, ha manifestado que “las necesidades cambian porque la patología evoluciona. Con las nuevas supervivientes se generan otro tipo de necesidades. Es decir, problemas articulares a raíz del cáncer, linfedema, alteraciones corporales, cambios físicos o psicológicos, menopausia precoz o extrema, etc. Por ello es importante personalizar el abordaje en función de cada paciente. Es esencial una medicina integral y en la que atención primaria tenga un papel destacado para que se consolide la relación y la toma de decisiones entre médico y paciente”.
La Dra. Társila Ferro: “Es clave que las pacientes cuenten con toda la información para poder afrontar la etapa en la que se encuentran”
La Dra. Társila Ferro, directora de Innovación y Calidad del Instituto Catalán de Oncología, ha explicado que: “la calidad de vida cobra mucha importancia en las mujeres que han superado la enfermedad”. Asimismo, la doctora ha añadido que “en este sentido, es clave que las pacientes cuenten con toda la información para poder afrontar la etapa en la que se encuentran“.
Durante el evento, también se ha destacado la importancia de hábitos saludables. Especialmente, la nutrición y el ejercicio físico. Asimismo, se han destacado a los aspectos psicosociales como elementos que contribuyen significativamente en la calidad de vida.
La Dra. Társila Ferro, ha destacado la influencia que tienen las relaciones afectivas del entorno familiar, amistades o de trabajo en el entorno emocional. Especialmente ha hecho referencia al entorno laboral, donde generalmente no se cuenta con estrategias de incorporación específicas. Ello implica con frecuencia bajas laborales intermitentes y, en algunos casos, la pérdida del trabajo. Estas situaciones provocan que las mujeres sientan limitaciones y no progreso tras haber superado el cáncer, lo cual influye en su calidad de vida. Por ello, la doctora destaca la necesidad de desarrollar y estructurar acciones específicas también en el ámbito social.
Durante el evento, Fecma también ha presentado los datos de una encuesta realizada a 400 pacientes de las 47 asociaciones de la Federación
Covid-19 y atención de las pacientes
Asimismo, durante la sesión se han presentado los datos de una encuesta realizada a 400 mujeres de las 47 asociaciones de FECMA. El objetivo del estudio es conocer el impacto de la pandemia Covid-19 en el seguimiento de pacientes con cáncer. En lo que se refiere a la atención recibida durante la pandemia, un 65% de las encuestadas afirma que fue adecuada. No obstante, más de un 50% reclama habilitar circuitos independientes para pacientes oncológicos. Más de un 25% contar con pautas de adaptación a los cambios emocionales y al manejo de las inseguridades en situaciones como la vivida. En la encuesta, las pacientes también destacan otras áreas de mejoras como una mayor previsión, mantener las citas pendientes y más información sobre la reanudación de citas y revisiones.
Además, la encuesta muestra que a un 24% de las mujeres encuestadas con cita programada le han cancelado alguna de ellas. Po otro lado, a un 39% se la han retrasado. Los resultados corroboran que la opción de hacer una revisión telefónica se ha ofrecido al 60% de las mujeres a las que les han cancelado la cita. Sin embargo, la mayoría de las que han realizado un seguimiento vía telefónica aseguran haber encontrado “falta de cercanía y una atención insuficiente a su caso”. Asimismo, se mencionan otras dificultades como el cambio de oncólogo, la imposibilidad de revisión o un retraso de hasta cinco meses para la cita.
Cuando las consultas no han sido canceladas, la gran mayoría de los casos las mujeres han acudido a su cita (76,5%). Sin embargo, una de cada 3 ha manifestado que ha acudido con miedo principalmente al contagio. Por último, un 8% ha expresado que su mayor miedo ha sido no poder acudir acompañada.
