Dr. Mario Meyer: “En Latinoamérica no tenemos la incidencia de cáncer de los países del norte, estamos a medio camino”

Meyer-incidencia-cáncer-Latinoamérica

..Redacción.
En los últimos años ha habido una expansión importante de las enfermedades oncológicas en Latinoamérica, según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS). Una tendencia que se espera que continua al alza al menos hasta 2030 y hace que en Latinoamérica estén a “medio camino de incidencia en cáncer con los países del norte“, según ha puesto de manifiesto el Dr. Mario Meyer, especialista en medicina interna y en oncología médica, durante una entrevista con iSanidad. Para Meyer, esto tiene que ver con el envejecimiento de la población y los cambios en el estilo de vida en Latinoamérica. Además, señala que la pandemia ha afectado mucho al sistema de salud pública de Paraguay, provocando que se retrasasen consultas y cirugías.

Meyer también indica que los avances y las investigaciones oncológicas de países como Estados Unidos, Alemania, Francia o España, influyen muchísimo en los países del entorno de Paraguay ya que “vivimos en una sociedad globalizada donde los conocimientos son compartidos“. En cuanto a un plan nacional con cribados poblacionales para la detección precoz de tumores en Paraguay, considera que aún hay mucho por hacer, pero apunta que sí hay programas nacionales que están mejorando ese tema.

El Dr. Mario Meyer señala que Latinoamérica está a mitad de camino de la incidencia de cáncer que tienen los países del norte

¿Qué incidencia tienen las enfermedades oncológicas en Paraguay y en toda América Latina?
Todavía no llegamos a la incidencia de los países del norte, pero estamos a mitad de camino. Ha habido una expansión importante de las enfermedades oncológicas en Latinoamérica y va a seguir habiendo, está proyectado que esto continúe en crecimiento hasta el 2030 aproximadamente. Es como una epidemia oncológica que también tiene que ver mucho con el envejecimiento de la población y los cambios en el estilo de vida en Latinoamérica, que ha cambiado muchísimo. Nos hemos vuelto comedores de fast food, mucho más sedentarios, consumiendo mucho más azúcar y con menos tiempo para comer ensaladas, frutas o comidas cocinadas en casa. Por lo tanto, la alimentación, el sedentarismo ha influido bastante y también el envejecimiento de la población.

¿Cómo ha afectado la pandemia a los pacientes y a la atención sanitaria tanto en Paraguay como en toda América Latina?
Ha afectado mucho porque nuestro sistema de salud pública no tiene la contención que tienen otros países, que de todos modos han sufrido muchísimo. Aquí se han retrasado bastante las consultas y las cirugías ni que decir, porque uno necesita terapia intensiva si va a planear una cirugía importante, por ejemplo, oncológica. Por lo tanto, todos los procedimientos han sufrido un retraso significativo. El miedo de la gente para ir a los lugares, particularmente, en la clínica donde hago oncología, que también veo pacientes del público, pero es privado, yo no he visto una merma importante pero sí estoy en un 80% de lo que tenía antes. En los lugares públicos sí ha habido una merma muy importante, también por la falta de medios.

“En los lugares públicos sí ha habido una merma muy importante, también por la falta de medios”

¿Dónde se forman los especialistas de tu entorno? ¿En España, Estados Unidos, Chile, Argentina…?
En todos esos lugares, en España en mi especialidad quizás no tanto, pero ahora tenemos una oncóloga que vino de España justamente. Pero sí, en España mucha gente, como muchos especialistas en Estados Unidos y en los países vecinos, por supuesto, Brasil y Argentina, en Chile menos. Tenemos un par de oncólogos en Francia y Alemania.

Aquí tenemos dos universidades principales, Paraguay es un país pequeño, somos 7 millones de habitantes, entonces tenemos dos universidades principales: una estatal que es la Nacional de Asunción y la privada fuerte que es la Católica de Asunción. La UNA y la UCA, la UCA tiene mucha relación con la medicina, tiene mucha relación con Alemania. Tenemos ahora mismo cerca de 50 especialistas formándose en Alemania, muchos porque en Paraguay hay mucha inmigración alemana. Entonces, ellos mismos se formaron en la Católica luego vuelven a Alemania y se forma ahí una relación interesante, hay mucha gente en Alemania también.

¿Cómo influyen los avances y las investigaciones oncológicas que hay en España, Estados Unidos, Alemania, Francia en los países del entorno de Paraguay?
Influyen muchísimo porque vivimos en una sociedad globalizada donde los conocimientos son compartidos. Por lo tanto, sale un estudio positivo en España o en Estados Unidos e inmediatamente nos enteramos y, por supuesto, lo queremos aplicar. Realmente utilizamos todas las investigaciones, la literatura del Norte aplicada aquí. Los laboratorios se encargan de traer los productos, pero siempre hay una cierta espera. No obstante, Argentina y Brasil suelen rápidamente adquirir los productos, las nuevas medicaciones o los nuevos estudios, y nosotros tenemos una comunicación muy fluida con ellos.

Dr. Meyer: “Influyen muchísimo porque vivimos en una sociedad globalizada donde los conocimientos son compartidos”

¿Tienen acceso a los nuevos tratamientos como inmunoterapia, CAR-T, terapias dirigidas, medicina personalizada de precisión?
Sí, claro que sí tenemos acceso. En el público no tanto, pero sí, en general accedemos a la inmunoterapia, a las terapias de blanco principalmente pulmón, mama, riñón, melanoma… Sí accedemos, a CAR-T cells no porque es algo mucho más complicado, en hematología maligna estamos un poquito detrás. Lo que se refiere a tumores sólidos sí se tiene acceso, el problema es el costo de estos tratamientos. Resulta muy difícil, especialmente para el sistema público, poder solventar las nuevos fármacos, especialmente las nuevas inmunoterapias. Los anticuerpos monoclonales para mamas, antiangiogénicos, los de pulmón, por lo menos los más antiguos, erlotinib y compañía, ahora sí tenemos acceso también en el público, pero limitado.

“Resulta muy difícil, especialmente para el sistema público, poder solventar los nuevos fármacos, especialmente las nuevas inmunoterapias”

¿Hay algún plan nacional de cáncer con cribados poblacionales para la detección precoz de algunos tipos de tumores?
Sí, por supuesto hay programas, lo que falta es que su efectividad crezca. En Paraguay, por ejemplo, el cáncer de cuello uterino, y eso sucede en Latinoamérica en general, es muy prevalente cuando debería ser una enfermedad más bien rara, porque se pueden hacer cribados, los Papanicolaus, etc. Yo creo que también es algo cultural. En Paraguay, el cuello uterino fue la primera causa de mortalidad de cáncer en mujeres hasta hace muy poco tiempo. Hasta el 2011-2012, el cuello uterino, una enfermedad prevenible por el cribado, constituía la primera causa de mortalidad.

Hoy el cáncer de mama lo superó, pero sigue siendo muy prevalente el de cuello uterino. Y también obviamente, como en España, los cánceres digestivos ocupan un lugar muy alto y ahí sí estamos más atrasados aún en el cribado, en la colonoscopia principalmente. Hay mucho por hacer, pero sí hay programas nacionales que están mejorando ese tema.

Hasta el 2011-2012, el cuello uterino, una enfermedad prevenible por el cribado, constituía la primera causa de mortalidad.

¿Es España una referencia en la formación de especialistas en oncología? ¿La oncología paraguaya tiene algo que envidiarle a la española?
Sí, España es siempre una referencia. Depende mucho del oncólogo, de donde se formó y quién le formó. Para los formados solamente aquí en Paraguay depende de quién es tu maestro. Yo me formé en Estados Unidos, por lo tanto, mi referencia siempre va allí principalmente. No leo literatura oncológica en español, por ejemplo, pero eso es porque soy yo y porque me formé allí, pero sí hay personas y otros oncólogos que leen la de España.

Creo que en oncología por lo menos, aquí la primera referencia es más Estados Unidos, si bien muchos oncólogos van a ESMO, el congreso europeo. Yo no tanto, yo me voy a ASCO, a Estados Unidos. Entonces para mí es Estados Unidos, pero sí, claro que hay una influencia de Europa y de España seguro.

Noticias complementarias

Opinión

Multimedia

Economía

Accede a iSanidad

Síguenos en