..Redacción.
El 22% de los pacientes hospitalizados mayores de 80 años presenta un consumo activo de alcohol, según revelan los datos preliminares de un nuevo registro que han impulsado médicos internistas. Estos resultados fueron avanzados en el marco de la VI Reunión del Grupo de Trabajo de Alcohol y Alcoholismo de la Sociedad Española de Medicina Interna (SEMI). Asimismo, el evento, que se desarrolló de forma virtual, congregó a 150 médicos internistas online. Así, el Dr. Miguel Marcos Martín, coordinador del Grupo de Trabajo de Alcohol y Alcoholismo de la SEMI, destacó la “labor transversal y multidisciplinar del médico internista en el abordaje del alcoholismo y en el campo de las patologías relacionadas con el alcohol”.
El Registro Clínico de Consumo de Alcohol revela que el 11,5% de los pacientes de más de 80 años presenta un consumo problemático
En el marco de esta reunión, entre los múltiples temas abordados, se presentaron los principales hallazgos preliminares, hasta el momento, del Registro de Consumo de Alcohol en Pacientes Ancianos Ingresados. Este registro recoge y analiza datos sobre el consumo de alcohol en pacientes ingresados en hospitales españoles y mayores de 80 años, una población que normalmente queda relegada en las investigaciones sobre hábitos tóxicos. Así, el objetivo es realizar una evaluación integral de la posible influencia del consumo de alcohol sobre complicaciones previas, alteraciones neurológicas, grado de dependencia funcional/deterioro cognitivo/fragilidad y complicaciones durante el ingreso hospitalario por cualquier causa de estos pacientes. Se espera presentar los datos definitivos del estudio que se elaborará en base a la información obtenida con dicho registro el próximo año.
Los primeros datos preliminares muestran que el 22% de los pacientes hospitalizados de más de 80 años presenta hábitos de consumo activo de alcohol
No obstante, los primeros datos preliminares ya aproximan claves y tendencias de relevancia. En este sentido, muestran que se ha detectado un consumo activo de alcohol en el 22% de pacientes analizados mayores de 80 años. Por otra parte, el 11,5% de los pacientes cumple criterios de consumo problemático y que el 3,5% presenta dependencia. También se ha constatado que solamente en el 25% de las historias clínicas analizadas se recogen los parámetros relativos al consumo de alcohol. Dicho registro se ha impulsado de forma colaborativa entre los Grupos de Alcohol y Alcoholismo y Paciente Pluripatológico y Edad Avanzada de SEMI.
Consumo de alcohol y otros tóxicos durante la pandemia
Asimismo, durante la reunión se han evaluado y analizado datos sobre el consumo de alcohol durante la pandemia, tanto entre la población general, como en el colectivo de médicos internistas. Precisamente, este estudio elaborado para conocer los hábitos tóxicos de los internistas españoles durante la pandemia por SARS-CoV-2 y con participación de 1.015 profesionales, muestra que el 8,8% refirió ser fumador. De ellos, un 71,9% incrementó su hábito tabáquico o comenzó a fumar. Por otro lado, además, el 57,4% de los internistas encuestados reconoció consumir alcohol, con una mediana de 3 unidades de bebida estándar semanales. De estos, un 35,8% se inició en el consumo de alcohol o lo aumentó en la pandemia.
Asimismo, hasta el 1,5% afirmó haber consumido sustancias de uso recreativo. Por otra parte, un 18,6% afirmó haber precisado fármacos para combatir el insomnio y un 5,7% tomó antidepresivos. De ello, se concluye que la pandemia por SARS-CoV-2 acentuó el consumo de tóxicos y psicofármacos en el colectivo de internistas españoles.
La pandemia por SARS-CoV-2 acentuó el consumo de tóxicos y psicofármacos en el colectivo de internistas españoles
Por otra parte, también se presentaron los datos de una encuesta entre internistas sobre el conocimiento de sustancias tóxicas, con 194 respuestas (el 77,5% médicos adjuntos). El 76,8% de los participantes considera sus conocimientos sobre ello regulares o malos. Sin embargo, el 84,9% de ellos reconoce preguntar por tóxicos a sus pacientes. Este porcentaje baja al 68,4% si el paciente es mayor de 85 años. El 83% sabe identificar un consumo de riesgo de alcohol, aunque el 75% indica que no usa ningún tipo de cuestionario en su práctica clínica habitual para evaluar alcoholismo y el 65% no suelen preguntar por otros tóxicos que no sean alcohol y tabaco si no tiene una sospecha clínica de consumo.
La Dra. Dolores García de Lucas abordó el binomio “Alcohol y diabetes”. Indicó que el alcoholismo en personas diabéticas “condiciona la adherencia a la terapia y la dieta, los controles de glucemia y el uso de insulina, así como la regularidad del ejercicio”. Según aseveró la Dra. García de Lucas, “el consumo excesivo de alcohol en pacientes de edad avanzada con DM2 aumenta las complicaciones micro y macrovasculares. Además, se relaciona con el desarrollo de hipertensión, fibrilación auricular y favorece la hipoglucemia, la fragilidad y la sarcopenia”.
El 84,9% de los internistas reconoce preguntar por hábitos tóxicos a sus pacientes, aunque este porcentaje baja al 68,4% si el paciente es mayor de 85 años
Por su parte, la Dra. Belén Alonso Ortiz abordó el tema “Alcohol, fragilidad y paciente pluripatológico”. En este sentido, ha indicado que asociadas de un modo u otro al alcohol se pueden estimar unas 3 millones de muertes al año evitables. Asimismo, mencionó que “el alcoholismo se relaciona con más de 200 enfermedades”.
El Dr. Ignacio Novo Veleiro, secretario del Grupo de Trabajo de Alcohol de SEMI, ha indicado que, según la Encuesta Europea de Salud 2020, el 49% de la población de entre 75 y 84 años reconoce haber consumido alcohol en los últimos 12 meses, algo que afirma también el 30% de personas de 85 o más años. Entre los principales riesgos del consumo de alcohol en pacientes mayores, ha destacado: “aumento del riesgo de caídas, interacciones con fármacos, declive acelerado de la calidad de vida, mayor riesgo de eventos cardiovasculares, aumento del riesgo de sangrado y más riesgo de arritmias cardíacas”. Además, ha expresado que, “por debajo de los 60 años, el factor de riesgo más relevante y desencadenante del desarrollo de demencia es el alcohol”.
Por su parte, Dra. Lucía Barrera hizo una revisión del “Consumo de sustancias durante la pandemia Covid-19” entre la población general. En este sentido, recordó que “adicción y Covid-19 pueden ir de la mano. Así, diferentes estudios hablan de un aumento de los síntomas de abstinencia y también de las conductas adictivas, así como de la merma del bienestar mental durante el confinamiento, por la disrupción de la cotidianeidad y el aislamiento”.
Por último, durante la reunión se abordaron temas relativos a las comorbilidades asociadas en la hepatopatía alcohólica. Así, antes de la clausura, se describieron y desgranaron los proyectos y líneas estratégicas de investigación que tiene en marcha el Grupo de Alcohol de SEMI para los próximos meses.
Noticias complementarias:
- TEAF: un problema de salud pública y la única causa de discapacidad prevenible
- Roberto Fernandes (neuropsicólogo): “Cualquier consumo de alcohol durante el embarazo puede producir TEAF”
- Los adolescentes españoles que dicen haberse emborrachado recientemente o consumen cannabis superan la media europea
- La Clínica de la Universidad Rey Juan Carlos, pionera en diagnosticar el trastorno del espectro alcohólico fetal
