Redacción
En muchas ocasiones las mujeres especialistas en medicina interna no tienen la misma visibilidad ni ocupan las mismas posiciones de liderazgo que sus compañeros varones. Es una de las preocupaciones que las internistas abordaron en el reciente 43º Congreso Nacional de Medicina Interna de la SEMI celebrado en Gijón, donde también analizaron la falta de visibilidad y estudios de enfermedades del ámbito de la medicina interna que afectan más a las mujeres.
Fue en la mesa redonda Foro Iberoamericano de Mujeres Internistas donde se abordaron estas cuestiones. Este foro nació en México en mayor de 2022 como un espacio de encuentro de mujeres internistas preocupadas por la visibilidad de las mujeres en el mundo de la medicina interna, tanto como pacientes como en su posición de médicos.
Las internistas destacan que cuando no se tienen en cuenta diferencias entre ambos sexos ni factores de género se diagnostica a las mujeres “tardíamente, o incluso, son infradiagnosticadas e infratratadas”
Diagnósticos tardíos
Las especialistas expusieron la falta de consideración de las diferencias entre ambos sexos en los estudios sobre las distintas enfermedades que abordan en la especialidad. Históricamente, además, las mujeres han estado infrarrepresesntadas en las investigación médicas. Tampoco se suelen considerar otros factores de género y sociales. Las internistas señalaron que cuando estos elementos no se tienen en cuenta de forma integral, las consecuencias son claras. “Las mujeres suelen ser diagnosticadas tardíamente, o incluso, son infradiagnosticadas e infratratadas“, afirmaron.
La Dra. Juana Carretero Gómez, presidenta de la Sociedad Española de Medicina Interna, puso de manifesto que en “un gran número de enfermedades, el hecho de ser mujer es un condicionante en cuanto a factores de riesgo. Por ejemplo, en caso de enfermedad coronaria, la diabetes tipo 2 es un componente que incrementa la mortalidad de las mujeres en más de un 58%, respecto a los hombres. Ser mujer es relevante también en otras patologías, como en el accidente cerebrovascular isquémico, prevalente en las mujeres en un 87%. Asimismo, ellas tienen un riesgo 45% superior al de los hombres de sufrir hemorragias subaracnoideas“.
“El accidente cerebrovascular isquémico es prevalente en las mujeres en un 87%. Además, ellas tienen un riesgo 45% superior al de los hombres de sufrir hemorragias subaracnoideas”
Las especialistas coincidieron en que las nuevas investigaciones y la aplicación de los tratamientos deben tener un enfoque segmentado por sexo y género. Es decir, ha de tener en cuenta las diferencias a nivel de anatomía y fisiología entre hombres y mujeres y aquellas relacionadas con los factores sociales, económicos, educativos y culturales. “Esta es una de las prioridades en innovaciones de género”, incidió la Dra. Carretero, “tanto es así que diversos grupos internacionales están trabajando para revertir la inequidad de género en la salud de las mujeres”.
El papel de las mujeres internistas
Otra de las preocupaciones de las internistas fue el papel de las mujeres dentro de su propia profesión. Señalaron que en ocasiones están infrarrepresentadas en áreas de liderazgo dentro del sector. Ocurre también en la autoría de artículos y el desarrollo de las investigaciones o en las reuniones profesionales. Muchas veces ni siquiera son tomadas en cuenta como oradoras en la misma proporción que sus compañeros varones.
“En la SEMI estamos haciendo camino”, explica la Dra. Montserrat Chimeno,“trabajando en la igualdad real en todos los sentidos en nuestra profesión. Nos ha costado mucho llegar, y cada vez hay más mujeres internistas que desarrollan su profesión con éxito. Hoy en día en la SEMI hay un mayor número de mujeres que de hombres”, precisó. Pero recordó que otro de los techos de crista que las mujeres internistas deben “seguir rompiendo” es el del liderazgo en la propia sociedad científica. “Aunque la SEMI fue fundada en 1952, solo hasta 2012, 60 años más tarde, hubo una mujer presidenta, la Dra. Pilar Román. Hoy, tenemos una nueva presidenta, con la Dra. Juana Carretero”, puntualizó.
“Lo que anhelamos es una equiparación real en favor de la salud de nuestros pacientes y el desarrollo de nuestra profesión”
La Dra. Chimeno cerró su intervención recordando que “es imprescindible que trabajemos para que las mujeres podamos tener el mismo lugar que nuestros compañeros hombres, porque somos conscientes que nuestros méritos no tienen que ver con nuestra biología. Nuestros méritos son la excelencia en el trabajo científico que desarrollamos con la misma calidad, empeño, compromiso y pasión que los hombres. Lo que anhelamos es una equiparación real en favor de la salud de nuestros pacientes y el desarrollo de nuestra profesión”.