Redacción
Hasta 1.182 artículos se publicaron y después se retiraron de revistas científicas entre 2004 y 2022 por tratarse de estudios que no son reales y con autores que tampoco han participado en ellos. Uno de cada cinco de estos artículos está hecho por “fábricas de artículos”, empresas que producen manuscritos científicos falsos por encargo. Son algunas de las conclusiones del estudio que han coordinado investigadores de la Universidad de Santiago de Compostela en colaboración con las universidades de Brown y Yale, que acaba de publicarse en el British Medical Journal.
Los autores alertan de que las “fábricas de artículos” son un problema creciente. “Equivalen a una manipulación sistemática del proceso de publicación científica, así como a la difusión de resultados falsos”
Los autores alertan de que las “fábricas de artículos” son un problema creciente con consecuencias que pueden ser graves. “Equivalen a una manipulación sistemática del proceso de publicación científica, así como a la difusión de resultados falsos”, advierten. Estas organizaciones se dedican a producir y vender artículos científicos a investigadores y estudiantes a cambio de dinero. En el análisis, señalan que muchos de estos artículos “incluyen datos fabricados”.
El trabajo ha analizado la evolución de los motivos que llevaron a la retirada de artículos científicos después de haber sido publicados en los últimos ocho años. Los investigadores se centraron en aquellos que tenían ensayos e investigaciones falsas y autores que realmente no participaron.
Han identificado 1.182 artículos retirados de revistas científicas por contener estudios o autorías falsas. De ellos, el 96,8% proceden de instituciones chinas
Con estas premisas han identificado 1.182 artículos retirados por esta razón. De ellos, el 96,8%, un total de 1.143, proceden de instituciones chinas. Además, 909 (el 76,9%) mencionaban una institución hospitalaria como filiación principal. Solo en 2021, más del 20% de los artículos retirados una vez publicados se atribuyeron a este tipo de mala praxis. El área de conocimiento con la mayor parte de estas retiradas de artículos es la de farmacología y farmacia con un 22%.
El trabajo forma parte de la tesis de doctorado de la primera autora, Cristina Candal Pedreira, quien firma el trabajo junto con Joseph S. Ross, Alberto Ruano Raviña, David S. Egilman, Esteve Fernández y Mónica Pérez Ríos. Los investigadores comprobaron que solo 15 revistas científicas “concentran la mayor parte de estos artículos tramposos”. Además, vieron que este tipo de artículos que llegan a publicarse pese a ser falsos apenas existían antes de 2014, “es un fenómeno muy novedoso”, señalan.
Solo 15 revistas científicas “concentran la mayor parte de estos artículos tramposos” retirados
Los autores solicitaron el acceso a la base de datos Retraction Watch, la más exhaustiva en la actualidad en este campo, tras firmar un acuerdo de uso. “Todas estas retiradas de artículos fueron comprobadas de una manera exhaustiva y se obtuvo la misma información de todos ellos para posteriormente ser analizada”, explican.
Los autores concluyen que “este tipo de artículos son cada vez más frecuentes, lo que supone un problema para la comunidad investigadora. Se originaron mayoritariamente en China y se publicaron en una pequeña cantidad de revistas”. Además, subrayan la necesidad de nuevos mecanismos para identificar y evitar este tipo de mala conducta.