Redacción
Un análisis sobre 32 millones de muertes cardiovasculares en 27 países y a lo largo de cuatro décadas revela que las temperaturas extremas, tanto por frío como por calor, incrementaron el riesgo de muerte entre las personas que padecían enfermedades cardiovasculares. En España, el frío por encima de los valores habituales ocasionó 11,3 muertes cardiovasculares más y el calor extremo generó cuatro fallecimientos adicionales.
En España, el frío por encima de los valores habituales ocasionó 11,3 muertes cardiovasculares más y el calor extremo generó cuatro fallecimientos adicionales
El trabajo, publicado el lunes en la revista Circulation, de la Asociación Americana del Corazón, afirma que “con el cambio climático, se precisa más investigación para examinar y desarrollar estrategias que mitiguen el impacto de las temperaturas extremas en las enfermedades cardiovasculares”.
El profesor de la Universidad de Santiago de Compostela, Dominic Royé, participó desde España en el análisis que abarcó 567 ciudades en 27 países del mundo. Se analizaron los datos entre 1979 y 2019. Los datos se extrajeron de la Multi-Country Multi-City (MCC) Collaborative Research Network, un consorcio de epidemiólogos, bioestadísticos y científicos del clima. La red estudia los impactos del clima en la salud y los factores estresantes ambientales relacionados con las tasas de mortalidad.
“Se precisa más investigación para examinar y desarrollar estrategias que mitiguen el impacto de las temperaturas extremas en las enfermedades cardiovasculares”
Los investigadores compararon las muertes cardiovasculares en el 2,5% de los días más calurosos y más fríos de cada ciudad con las muertes cardiovasculares en los días que tenían la temperatura asociada con una menor tasa de muertes en la misma localización. Por cada 1.000 muertes de naturaleza cardiovascular, el estudio detectó que las jornadas de calor extremo generaban 2,2 muertes adicionales. El frío extremo origina 9,1 muertes adicionales. La insuficiencia cardíaca se relacionó con el mayor exceso de muertes por temperaturas extremas. Se registraron 2,6 muertes más en días de calor extremo y 12,8 más con frío extremo.
“Una de cada 100 muertes cardiovasculares puede atribuirse a días con temperaturas fuera de lo normal”, apuntan. “Si bien no sabemos la razón de que la insuficiencia cardíaca sea la patología más afectada, su naturaleza progresiva como enfermedad, hace que los pacientes sean susceptibles a los efectos de la temperatura. Este es un descubrimiento importante ya que una de cada cuatro personas con insuficiencia cardíaca es reingresada en el hospital dentro de los 30 días posteriores al alta. Solo el 20% de los pacientes con insuficiencia cardíaca sobreviven 10 años después del diagnóstico”, explican los investigadores.
Por cada 1.000 muertes por enfermdades cardiovasculares, las jornadas de calor extremo generaban 2,2 muertes adicionales y las de frío 9,1 fallecimientos más
En España el calor extremo provocó cuatro muertes adicionales más y el frío extremo 11,3 fallecimientos adicionales pro cada 1.000 muertes cardiovasculares. La enfermedad isquémica del corazón (11,7 muertes), seguida del ictus (11) son las patologías más afectadas por el frío extremo. Le siguen la insuficiencia cardíaca (8,3) y arritmia cardíaca (9,8). En el caso del calor, las dolencias que padecen un mayor impacto son ictus (3,6). Le sigue la enfermedad isquémica del corazón e insuficiencia cardíaco (en los dos casos, 3,5 muertes adicionales), y arritmia cardíaca (0,1).
Los investigadores destacan que la investigación sirve como llamamiento para las “organizaciones profesionales de cardiología para que desarrollen directrices sobre la intersección de las temperaturas extremas y la salud cardiovascular”, afirmaron.