Redacción
A finales de enero, Navarra iniciará el programa de detección de cáncer de cuello uterino según anunció Marian Nuin, directora gerente del Instituto de Salud Pública y Laboral de Navarra. El programa se encuentra enmarcado en el nuevo Plan de Salud Pública de la Comunidad foral para el periodo 2022-2025. La directora expuso los detalles en una comparecencia parlamentaria junto con la consejera de Salud del Gobierno de Navarra, Santos Induráin.
El plan incluye distintos ejes de actuación en materias como promoción de la salud, prevención, detección precoz, epidemiología, sanidad ambiental, seguridad alimentaria y salud laboral, y busca “consolidar a Navarra en los puestos cabeceros a nivel estatal en cuanto a esperanza y calidad de vida”. Los últimos datos del INE (2021) reflejan que la Comunidad foral es la segunda con mayor esperanza de vida, tanto a nivel global (84,3 años), como por género (81,6 en hombres y 86,9 años en mujeres).
Se actualizarán y ampliarán los distintos programas de cribados de cáncer y, en un plazo breve, se implantará el programa de detección de cáncer de útero
En este documento se apuesta, entre otras cuestiones, por un enfoque de promoción de la salud y de prevención, con “especial atención” a los determinantes sociales de la salud y a los ejes de desigualdad, como el género, la edad, la clase social, la etnia y el territorio. La planificación se enmarca en otros planes y normativas a nivel estatal e internacional, en un contexto “cada vez más complejo y globalizado con factores nuevos como el cambio climático. Tiene como reto modernizar y fortalecer la vigilancia en salud pública para garantizar la capacidad de respuesta ante nuevos retos y emergencias”. Todo ello unido a la “correspondiente calendarización y provisión de financiación, en coherencia con un incremento sostenido de la inversión en salud pública en Navarra desde 2015”.
Ampliación de programas de cribado
Respecto al nivel de detección y vigilancia de enfermedades (transmisibles y no transmisibles) destaca la actualización y ampliación de los distintos programas de cribados de cáncer. Así, a finales de enero, se implantará el programa de detección de cáncer de útero, “sin descartarse nuevas ampliaciones a su debido momento, alineadas con las demandas” -a nivel europeo y sustentadas en criterios técnicos- en torno a otros cánceres como pulmón, según Induráin. En febrero de este año comenzará la 5ª vuelta del programa de detección de cáncer de colon y, a finales de marzo, la cohorte de edad de 50 a 65 años habrá recibido una invitación para una prueba en sus últimos dos años. Otros programas ante virus como el VIH seguirán con sus líneas propias y, en este caso, con una actualización de la estrategia que se está trabajando.
El programa apuesta por un enfoque de promoción de la salud y de prevención, con “especial atención” a los determinantes sociales de la salud y a los ejes de desigualdad
El plan también incluye medidas de Salud Laboral. El programa “más relevante por su transversalidad” es la integración de la prevención en la gestión empresarial, con la participación de todos los agentes implicados. También se incluyen los programas de reducción de la siniestralidad, prevención del cáncer y el programa de abordaje de los riesgos psicosociales, incluido en el ámbito laboral. En el área de la protección de la salud, el Programa de vigilancia, control y promoción para una alimentación “segura, saludable y sostenible presenta progresivamente más exigencias con controles cada vez más estrictos” y que requiere de una “gran coordinación nacional e internacional” en relación a las alertas sanitarias y al control de calidad de los productos en origen. Finalmente, el plan contempla los efectos del cambio climático.