Juan Pablo Núñez. CEO Uniteco
Mucho se ha escrito acerca del Real Decreto de Prescripción Enfermera, una antigua reclamación de la profesión para un desarrollo más efectivo de su trabajo. Pero quizás hay un aspecto en el que no se ha reparado. No es otra cosa que las nuevas responsabilidades que por ley asumen los profesionales de la enfermería que se acrediten para prescribir medicamentos.
La situación actual de la responsabilidad civil profesional es convulsa. Existe cierto desconcierto en el mercado ante la desaparición de compañías que tradicionalmente han cubierto este aspecto de la profesión. Otras nuevas han aparecido cubriendo los huecos que nadie quería asegurar, pero que ya han avisado que se irán en cuanto se termine su contrato. Otras nuevas, sin experiencia en este área tan particular, han aparecido con el precio como gancho, quizá jugando a la especulación.
Existe cierto desconcierto en el mercado ante la desaparición de compañías que tradicionalmente han cubierto la responsabilidad civil
Es esta situación en la que las enfermeras asumen nuevas responsabilidades, conlleva un riesgo. Este riesgo actualmente no está contemplado en la inmensa mayoría de las pólizas de responsabilidad civil profesional que se ofrece a las enfermeras. Los capitales que se suscriben actualmente tampoco están adecuados a esta nueva realidad. Es habitual que los errores en la prescripción sean causa de reclamaciones, unido a las altas reclamaciones e indemnizaciones que ya estamos viendo, suponen un caldo de cultivo no apto para legos.
Una vez expuestos estos hechos cabría preguntarse qué sucede en caso de que la indemnización sea mayor que el capital asegurado ¿Está en juego el propio patrimonio? A la hora de redactar sus reclamaciones los abogados de los pacientes no solo apuntan a todos aquellos que han intervenido en el caso denunciado (médicos, enfermeras, hospitales, servicios de salud, aseguradoras de salud…) sino que también pueden hacerlo contra los responsables del seguro: tanto la propia compañía como aquellos que -en enfermería es muy común- lo estén ofreciendo como asociaciones profesionales, colegios o consejos.
¿Qué sucede en caso de que la indemnización sea mayor que el capital asegurado?
El peligro de la situación actual es un problema de cantidades. A pesar de que, al menos en nuestro caso, se está avisando desde hace tiempo, no existe una conciencia de un riesgo absolutamente real.
Ya están llegando los primeros avisos porque las condenas que superan el millón de euros. Antes eran raras, pero ya son habituales. Y con el nuevo baremo esto no va a hacer más que crecer. Las consecuencias se ven a 10 años, el plazo de los casos más abultados. Para ser capaces de responder dentro de 10 años hay que estar preparados ahora, que es cuando se va a recibir el siniestro. ¿Estamos preparados para dentro de 10 años? Me temo que la inmensa mayoría no
