Redacción
La Sociedad Española de Radiología Médica (Seram) ha informado que entre el 60 y 80% de los pacientes que acuden a los servicios de Urgencias son sometidos a una o más pruebas de imagen, por lo que se realizan aproximadamente 15 millones de estudios radiológicos de este tipo al año en hospitales públicos, a los que hay que añadir otros estudios urgentes procedentes de ingresados y UCIs.
En este sentido, se estima que cada 8 y 10 años se duplica en los grandes hospitales la cifra de tomografías computarizadas (TCs) urgentes, cuya complejidad también se ha visto incrementada. “La TC es la herramienta estrella en patología urgente, que ha revolucionado todas las pautas de actuación clínica de cabeza a pies”, ha afirmado el expresidente de la Sociedad Española de Radiología de Urgencias, José María Artigas.
Se estima que cada 8 y 10 años se duplica en los grandes hospitales la cifra de tomografías computarizadas urgentes
Según informa Seram, el empleo de TC en urgencias es “imprescindible” en el manejo de patologías como el ictus, dolor torácico, abdomen agudo, hemorragia digestiva o traumatismos graves, entre otros. Además, “mejora la confianza diagnóstica y la decisión de ingreso o alta y reduce la estancia media y los costes hospitalarios”.
También la ecografía “sigue siendo una herramienta esencial en urgencias”. La demanda de estudios crece en cantidad y especialmente en complejidad, por lo que es importante un entrenamiento adecuado, indica Seram.
“En ámbitos clínicos se ha definido como el fonendoscopio de nuestros días, lo que considero un planteamiento arriesgado; son de sobra conocidos el sesgo inherente a mezclar juicio clínico con impresión diagnóstica por imagen o la sobreutilización. El empleo idóneo de la imagen integrada es una de las claves formativas del radiólogo”, ha puntualizado Artigas.
El uso de tomografías computarizadas en urgencias mejora la confianza diagnóstica y la decisión de ingreso o alta y reduce la estancia media y los costes hospitalarios
En el caso de la radiografía simple, especialmente osteoarticular y tórax, “sigue siendo de gran utilidad en urgencias”, donde se realizan la mitad del total de este tipo de estudios realizados por el servicio de radiodiagnóstico, cuya cifra se mantiene o crece ligeramente en la mayoría de los centros. Sin embargo, la resonancia magnética (RM) “se va abriendo paso poco a poco como apoyo diagnóstico a la Medicina de Urgencias (MUE)”.
Con motivo del Día internacional de la Medicina de Urgencias y Emergencias, desde la Seram han destacado que “la radiología se ha integrado de forma eficaz y eficiente en los algoritmos y protocolos de actuación de los servicios de urgencias hospitalarias, siendo una herramienta clave en el manejo de su casuística, desde los casos más graves a los leves, con el fin de derivar a cada uno al dispositivo asistencial adecuado”.
“El papel del radiólogo es fundamental, priorizando aquellas exploraciones más tiempo-sensibles, como un estudio TC en un ictus potencialmente tratable, o comunicando de forma inmediata los hallazgos más relevantes en el plano vital o funcional, como un foco de hemorragia en un traumatismo, primera causa de mortalidad evitable en este contexto clínico”, ha finalizado Artigas.